04.12.2020 Views

2 pideme lo que quieras ahora y siempre de megan maxwell

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Nerviosa, no sé qué hacer. Lo miro, me siento frente a él y me retuerzo las manos.

—Llama a Marta —me pide finalmente.

Con rapidez, hago lo que ha dicho.

Tiemblo.

Estoy asustada.

Eric, mi fuerte y duro Iceman, sufre. Lo veo en su rostro. En la crispación de su

gesto. En sus ojos enrojecidos. Quiero acercarme a él. Quiero besarlo. Mimarlo. Quiero

decirle que no se preocupe. Pero Eric no desea nada de eso. Eric sólo desea que lo deje en

paz. Respeto lo que necesita y me mantengo en un segundo plano.

Media hora después, llega Marta. Trae su maletín. Al ver mi estado, con la mirada

me pide que me tranquilice. Intento hacerlo mientras examina a su hermano con cuidado

ante mi atenta mirada. Eric no es un buen paciente y protesta todo el rato. Está insoportable.

Marta, sin inmutarse por sus gruñidos, se sienta frente él.

—El nervio óptico está peor. Hay que meterte de nuevo en quirófano.

Eric maldice. Protesta. No me mira. Sólo blasfema.

—Te dije que esto podía pasar —indica Marta con calma—. Lo sabes. Necesitas

comenzar el tratamiento para poder hacerte el microbypass trabecular.

Oír tal cosa me enfada. No me ha comentado en todo este tiempo absolutamente

nada de nada. Pero no quiero discutir. No es momento. Bastante tiene él ya con esto. Pero,

dispuesta a sumarme a lo que hablan, pregunto:

—¿Cuál es el tratamiento?

Marta lo explica. Eric no me mira, y cuando finaliza, afirmo con seguridad:

—Muy bien, Eric. Tú dirás cuándo lo comenzamos.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!