Summaries / Resúmenes - Studia Moralia

Summaries / Resúmenes - Studia Moralia Summaries / Resúmenes - Studia Moralia

studiamoralia.org
from studiamoralia.org More from this publisher
11.07.2015 Views

152 SILVIO BOTEROAparece también implícita la sintonía con la enseñanza delConcilio Vaticano II que en la Optatam totius afirmaba: “la teologíamoral (...) deberá mostrar la excelencia de la vocación delos fieles en Cristo y su obligación de producir frutos en la caridadpara la vida del mundo” (16).El binomio ‘verdad-amor’, si bien ha estado presente en laEscritura y en el Magisterio de la iglesia 27 , aplicado en la teologíamoral aparece con una cierta novedad en el postconcilio.Dios es la Verdad y el Amor al mismo tiempo. Benedicto XVI haquerido subrayar en su primera encíclica Deus caritas est (25Dic. 2005) la relación íntima de aquel Amor con la realidad delamor humano (Cfr. 1). Esto quiere ser la teología moral postconciliar:descubrir al hombre de hoy que Dios – Verdad yAmor- está en estrecha relación, en actitud de alianza, con elhombre: llamada y respuesta.Si la teología moral del postconcilio quiere responder a losnuevos postulados del Magisterio (comprensión profunda de laPalabra de Dios, en relación con el fin último del hombre,como respuesta que el hombre debe dar a la llamada divina enel proceso de su crecimiento en el amor, mediante el discernimientomoral, en el compromiso por el verdadero bien), deberáconjugar sabiamente los dos grandes atributos que Yahvé quisocolocar a la base de la alianza con su pueblo: el Amor y laVerdad (Bondad y Estabilidad) 28 .La conciliación entre el amor y la verdad, en la teologíamoral postconciliar, explica por qué relacionar la ortodoxia y laortopraxis que la tradición quiso contraponer. Modernamente,la verdad no es una mera ‘contemplación’ como la concebía elmundo griego 29 . Hoy la verdad es considerada más bien desdela perspectiva bíblica que nos ofrece s. Juan: ‘hacer la verdad’ 30 .27Cfr. J. Silvio BOTERO G., “La Verdad y el Amor: presencia de un binomioen la s. Escritura y en el Magisterio”, Studia Moralia 40 (2002) 425-465.28Cfr. Felix ASENCIO, Misericordia et Veritas. El ‘Hesed’ y ‘Emet’ divinos.Su influjo religioso-social en la historia de Israel, Aedes UniversitatisGregorianae, Roma 1949.29Cfr. J. Silvio BOTERO G., Vivere la Verità nell’Amore. Fondamenti eorientamenti per un’etica coniugale, Dehoniane, Roma 1999, 78-90.30Cfr. Ignace DE LAPOTTERIE, La verité dans Saint Jean, vol. II, BiblicalInstitute Press, Rome 1974, 514-530.

LA FIGURA DEL TEOLOGO MORALISTA HOY 153Este cambio de perspectiva obliga a ‘deshelenizar’ la teología 31 ya no contraponer ‘doctrina’ y ‘vida’; al contrario, relacionarlasestrechamente como lo plantea el autor de la Carta a los Efesios(4,15): “hacer la verdad en el amor” 32 .Juan Pablo II, hablando a los teólogos españoles, enSalamanca, decía que “el teólogo no puede limitarse a guardarel tesoro doctrinal heredado del pasado, sino que debe buscaruna comprensión y expresión de la fe que haga posible la acogidaen el modo de pensar y de hablar de nuestro tiempo” 33 .En este esfuerzo por integrar ‘ortodoxia’ y ‘ortopraxis’ esdonde el teólogo moralista encuentra ‘su misión específica’. YaJuan Pablo II había afirmado que “la teología ayuda alMagisterio cuando lo sigue, cuando lo acompaña y tambiéncuando lo precede en la búsqueda de nuevos horizontes y denuevos caminos” 34 . El Obispo Maziers escribía hace unos añosque ‘el pastor necesita del teólogo’ y ‘el teólogo necesita tambiéndel pastor’ 35 .El teólogo moralista prestará su servicio a la iglesiamediante su reflexión: “el pensamiento teológico y la acciónpastoral no se oponen entre sí, al contrario, se promueven recíprocamente”,había afirmado Juan Pablo II hablando en laUniversidad Gregoriana (15 Dic. 1979) 36 . Desde esta coyuntura,el moralista se revela como un verdadero colaborador delMagisterio si acompaña, sigue o precede al Magisterio, según31Cfr. Bernard J. F. LONERGAN, “The deshellenisation of dogma”,Theological Studies 28 (1967) 336-351.32Cfr. Romano PENNA, La lettera agli Efesini. Introduzione, versione,commento, EDB, Bologna 1988, 198; Heinrich SCHLIER, La lettera agliEfesini. Commentario teologico del Nuovo Testamento, Paideia, Brescia1973, 323.33GIOVANNI PAOLO II, “La fedeltà del teologo a Cristo implica fedeltà allachiesa….”, 1051 y 1053.34Cfr. GIOVANNI PAOLO II, “Discorso alla consegna del PremioInternazionale ‘Paolo VI’ a H. U. von Balthasar: ‘Ha messo la sua conoscenzaal servizio del vero che promana da Cristo’”, Insegnamenti di GiovanniPaolo II, vol. VII/1 (1984) 1910-1917.35Cfr. Monseigneur MAZIERS, “Ce qu’un pasteur attend des théologiens”,Lumière et Vie 14/71 (1965) 3-14.36Cfr. GIOVANNI PAOLO II, “Apertura della teologia nei confronti dellealtre discipline”, en Insegnamenti di Giovanni Paolo II vol. II/2 (1979)1424

LA FIGURA DEL TEOLOGO MORALISTA HOY 153Este cambio de perspectiva obliga a ‘deshelenizar’ la teología 31 ya no contraponer ‘doctrina’ y ‘vida’; al contrario, relacionarlasestrechamente como lo plantea el autor de la Carta a los Efesios(4,15): “hacer la verdad en el amor” 32 .Juan Pablo II, hablando a los teólogos españoles, enSalamanca, decía que “el teólogo no puede limitarse a guardarel tesoro doctrinal heredado del pasado, sino que debe buscaruna comprensión y expresión de la fe que haga posible la acogidaen el modo de pensar y de hablar de nuestro tiempo” 33 .En este esfuerzo por integrar ‘ortodoxia’ y ‘ortopraxis’ esdonde el teólogo moralista encuentra ‘su misión específica’. YaJuan Pablo II había afirmado que “la teología ayuda alMagisterio cuando lo sigue, cuando lo acompaña y tambiéncuando lo precede en la búsqueda de nuevos horizontes y denuevos caminos” 34 . El Obispo Maziers escribía hace unos añosque ‘el pastor necesita del teólogo’ y ‘el teólogo necesita tambiéndel pastor’ 35 .El teólogo moralista prestará su servicio a la iglesiamediante su reflexión: “el pensamiento teológico y la acciónpastoral no se oponen entre sí, al contrario, se promueven recíprocamente”,había afirmado Juan Pablo II hablando en laUniversidad Gregoriana (15 Dic. 1979) 36 . Desde esta coyuntura,el moralista se revela como un verdadero colaborador delMagisterio si acompaña, sigue o precede al Magisterio, según31Cfr. Bernard J. F. LONERGAN, “The deshellenisation of dogma”,Theological Studies 28 (1967) 336-351.32Cfr. Romano PENNA, La lettera agli Efesini. Introduzione, versione,commento, EDB, Bologna 1988, 198; Heinrich SCHLIER, La lettera agliEfesini. Commentario teologico del Nuovo Testamento, Paideia, Brescia1973, 323.33GIOVANNI PAOLO II, “La fedeltà del teologo a Cristo implica fedeltà allachiesa….”, 1051 y 1053.34Cfr. GIOVANNI PAOLO II, “Discorso alla consegna del PremioInternazionale ‘Paolo VI’ a H. U. von Balthasar: ‘Ha messo la sua conoscenzaal servizio del vero che promana da Cristo’”, Insegnamenti di GiovanniPaolo II, vol. VII/1 (1984) 1910-1917.35Cfr. Monseigneur MAZIERS, “Ce qu’un pasteur attend des théologiens”,Lumière et Vie 14/71 (1965) 3-14.36Cfr. GIOVANNI PAOLO II, “Apertura della teologia nei confronti dellealtre discipline”, en Insegnamenti di Giovanni Paolo II vol. II/2 (1979)1424

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!