MI AMIGO PINOCHO - Asociación Dante Alighieri en Málaga

Mi amigo Pinocho Noor Jorquera Trascastro
Colegio El Limonar 6ºA
Segundo premio
Esta es mi reflexión sobre el libro de Pinocho, pero empezaré por presentarme, ya que yo no soy de
esas que se ponen a escribir así sin más, sin siquiera dar su nombre, hay gente que lo hace, qué le
vamos a hacer... Mi nombre es Noor Jorquera Trascastro y tengo 12 años; voy a escribir lo que pienso
sobre el libro escrito por Carlo Collodi al que dio el nombre de: “Las aventuras de Pinocho (Historia de un
muñeco)”.
La verdad es que la historia, a bote pronto, es bastante surrealista, ya que ¿quién se podría creer que
un muñeco hecho con madera corriente y moliente puede correr, andar, saltar...? Pero aún así, la historia
es como la vida misma: te muestra que te pueden traicionar, que puedes perderlo todo, que hay mala y
buena gente en el mundo, que todo se puede lograr...
Una de las cosas del libro que más importancia ha tenido para mí, ha sido la paciencia, el amor, el
esfuerzo y el cariño que depositó Geppetto en su travieso muñeco de madera, al que llamó Pinocho y
sobre el que ejerció como padre y trató como un hijo. Hay una parte del libro que no es que me parezca,
esqueespreciosa:elmomentoenelGeppettoenseñaaPinochoaandar...Esoesloqueyollamoun
momento para recordar. En el libro hay muchos más momentos para recordar, algunos hermosos, otros
entristecedores y algunos hasta hacen que los más distraídos se pongan a pensar sobre el tema. Una de
las frases más tristes y que más recuerdas es: “Aquí yace la niña del cabello azul turquí muerta de dolor
por haberla abandonado su hermanito Pinocho”.
Yo no me centro en las mentiras de Pinocho ni en sus fallos, porque creo que lo más importante es su
afán de superación, el esfuerzo que hizo por encontrar a su padre, el empeño que puso al final en los
estudios... Sé que también los fallos que tuvo Pinocho son muy importantes, porque te muestran lo que
pasa cuando no haces caso a las personas que te quieren y te dejas llevar por las malas influencias.
Pienso que los malos actos de Pinocho no los hacia por molestar, ni porque él fuese mala persona,
únicamente era inocente e inexperto, la verdad es que muchas de las cosas que le pasaban a Pinocho se
las tenía merecidas por desobediente, pero el escarmiento que se llevaba era suficiente para hacerle
entrar en razón al menos en ese momento.
Hay muchos aspectos del libro que en la vida real no son exactamente de esa forma, por supuesto el
Zorro y el Gato en nuestra realidad no serían animales aprovechados y embusteros, sino que
simplemente serían estafadores, ladrones o meros caraduras de esos que van por la vida sin ninguna
meta que cumplir y solo piensan en ellos. Otro ejemplo es el del Grillo parlante, que representa la
conciencia, la voz de la experiencia, el sabio hablar al que Pinocho no hizo caso y por ese motivo tantos
malos ratos se llevó.
Yo no diré que me identifico con esos personajes que a todo el mundo les fascinan sus virtudes, pues
yo no soy así, ¡ojala tuviera yo la templanza del Hada del cabello azul turquí o la paciencia del bueno de
Geppetto! Por supuesto, tampoco me identifico con esos personajes a los que tanta gente les gustaría
hacer desaparecer para que a Pinocho no le pasaran cosas malas, como por ejemplo, convertirse en burro
tras haber pasado cinco meses en el País de los Juguetes con su amigo predilecto, al que tendría que
haber dejado en ese portal sin echar la vista atrás obedeciendo las órdenes del Hada. Hablo de
personajes como el Zorro y el Gato, los niños de la escuela sin ganas de aprender... Yo me identifico con
Pinocho, y no es porque sea desobediente ni nada de eso, sino porque tanto Pinocho como yo, aunque
hemos cometido muchos fallos a lo largo de nuestra vida, hemos sabido rectificar y hemos aprendido algo
de cada uno de ellos. La verdad es que identifico a muchas personas con personajes del libro, pero pienso
que todos los niños del mundo tenemos a un Pinocho en nuestro interior ya que, ¿qué niño no ha
cometido un error?, ¿qué niño no ha aprendido algo de una mala experiencia? No hace falta ser
desobediente ni mentiroso para identificarte con éste, sobre todo porque Pinocho tiene muchas más
cosas y no siempre se comporta mal. En general, identifico a la mayoría de los padres del mundo con
Geppetto o el Hada, porque cualquiera de ellos haría lo que fuera por sus hijos y por inculcarle valores.
Para mí, Pinocho es como un amigo; ya sé que suena raro y parece que no tuviera amigos reales, pero
eso no es así, tengo bastantes. Me refería a que, igual que con mis amigos y compañeros, también con
él he pasado muchos buenos ratos; claro que no de la misma forma que los paso con ellos, sino
sumergida en la lectura, viviendo sus aventuras como si
fueran las mías. Además, he aprendido lecciones de los líos en los que se metió Pinocho, de la misma
forma que lo hubiera hecho si en ese lío estuviésemos implicados algún amigo mío y yo.
Mi personaje favorito, aunque parezca mentira ya que a la mayoría de la gente prefiere al Hada o a
Geppetto, es Pinocho, porque es con el que más he aprendido, del que más valores he sacado y con el
que más me he divertido.
Recomiendo el libro a todo el mundo, no sólo porque me haya gustado mucho, también porque creo que
es un libro para todas las edades, que te enseña muchas cosas, y nunca se es demasiado joven o
demasiado mayor para aprender a hacer las cosas bien.
Para terminar podría decir que es uno de los libros que más me ha gustado leer, o que es un libro que
nunca olvidaré, también podría decir que es uno de esos libros que se van pasando de padres a hijos;
como veis, podría decir muchas cosas, muchas cosas que no diré. En cambio, resumiré el libro en tres
sencillas y únicas palabras: INOCENCIA, APRENDIZAJE y CARIÑO.
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