La guerre des Malouines dans les relations internationales

Annexes
todos mojados y no teníamos absolutamente nada seco. Nada del equipo, nada, ni una manta,
bueno… manta no llevábamos, era bolsa de dormir y abrigo.
Página 33: A partir de que escuché la orden de rendicion el combate duro diez minutos más:
el enemigo seguia tirando. Yo no sabia si responder el fuego, porque las reglas de honor en la
guerra se tienen que respetar, porque si no seria una guerra despiadada, y se respetaron en este
caso. Pensaba : si yo estoy pidiendo la rendición y sigo combatiendo, lo estoy engañando al
enemigo. Eso lo pensé pese a estar herido y todas las cosas. No quería matar a nadie más.
Página 41: “Entonces el comandante del buque vino vestido de gala, se me acerco y me dijo:
lieutenant, mejor lo digo en castellano”: Teniente quiero informarle que Puerto Argentino ha
sido tomodo por tropas inglesas. No vengo a jactarme de esto, sino a decirle que en la guerra
unos ganan y otros cosas. No le contesté absolumente nada. Esto nos cayo muy mal, sentí una
congoja, una sensación de impotencia, de angustia y bueno… a partir de ese momento, ya nos
dijeron donde estábamos, que era cerca de San Carlos”.
Página 41: “Mi mayor preocupacion era como nos iba a recibir la gente aca. Éramos, no nos
engañemos nos iba a recibir la gente acá. Éramos, no nos engañemos, un Ejército que había
perdido una guerra. No estábamos acostumbrados a perder nada, y menos una guerra.
Página 42: “No habia nadie, pero lo que ocurria es que no los habian dejado entrar porque las
calles de Puerto Madryn el pueblo se volco con banderas, vi hombres y mujeres llorando, sin
ninguna duda, cosa que yo hacia tambien. Lloraba, me aflojé un poco por la emoción de llegar
al continente, pero sobre todo por no haber podido darle a esa gente que lloraba por nosotros
la satisfacción de la victoria, congoja que aun mantengo reservada en mi espíritu. No haber
podido darle la victoria al pueblo, que tanta expectativo tenia en nosotros.
Testimonio : Capitán C.A.L.P, nacido en Capital Federal, 33 anos, casado, cuatro hijos. Arma
:
Infantería.
El regimiento llego entre el 24 y el 27 de abril.
Página 50”:Nosotros, por suerte, habiamos tomado todas las provisiones necesarias y
teniamos el abastecimiento ahi. Si bien éramos el regimiento más alejado, no tuvimos
problemas con la comida. Se comía normalmente debido a lo corto del dia y a lo peligroso de
hacer fuego de noche una o dos veces al dia, una comida bien poderosa que era suficiente
además del desayuno lo importante era poder comer en caliente y no raciones frías.
Página 75: No sé si por su facilidad de transporte o qué, pero ellos tiraban a cualquier “bicho
que se movia”, Ademas, todo el dia”.
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