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6 Ender Materán es el adolescente que recibió el primer implante de homoinjerto valvular aórtico criopreservado en Venezuela. Él no sabe mucho del problema de salud que padece desde los seis años de edad, ni del proceso por el que pasó hace escasos 17 días; tampoco está consciente de por qué ha sido noticia últimamente. Pero sí precisa que padece una cardiopatía congénita (enfermedad del corazón). “Eso es lo que le he escuchado a los médicos y me he podido grabar”, comenta, con un cantadito particular que es su tarjeta de presentación. Vive en Guanare, estado Portuguesa. Es el menor de cinco hermanos. No aparenta los 15 años que tiene; se ve mucho menor. Su temperamento calmado tal vez responde a que por su condición de salud no podía agitarse mucho, porque se cansaba. El antes y el después de su última operación lo describe así: “Yo me cansaba mucho cuan- �� do me esforzaba. En las explanadas podía caminar poco a poco, pero en las pendientes no aguantaba mucho. Por ello no jugaba; me quedaba siempre sentado. Cuando regrese con mis amigos quiero acompañarlos a jugar fútbol, me encanta ese deporte. No sé si ya pueda hacerlo, pues no he corrido todavía. Pero creo que sí, me siento muy bien”. Materán cursa tercer año de bachillerato. Por primera vez le quedaron varias materias, porque últimamente le costaba llegar al colegio. Vive en un lugar retirado del sitio donde queda su escuela. Debe caminar al menos una hora para tomar un transporte público siempre y cuando llegue a tiempo. Cuando no, le toma más de dos horas llegar al colegio a pie. “Ni modo, poco a poco camino y llego”, sostiene, como muestra de su tesón. Cuando sea grande quiere ser médico, para ayudar a los demás como lo han ayudado a él. El padre de Ender “chaporrea” café en el campo (reco- la METRALLA ge los frutos de la planta y trabaja los granos). Su madre, Griselda Alvarado, es ama de casa. Es la que lo acompaña en estos momentos en el Cardiológico y es una señora de poco verbo. Retener y –peor aún- pronunciar un término médico que tenga que ver con el caso de su hijo le cuesta mucho. Sin embargo, tiene una mirada indescriptible que deja ver su humildad y el sufrimiento de madre que padece la desdicha de un descendiente. “Sólo le pedía a los doctores que veían a mi niño, que me mandaran a un hospital en el que no tuviera nada que pagar porque no tengo cómo hacerlo. Por la falta de recursos dejé de llevarlo a las consultas y lo descuidé por dos años”, expresa. Lo más que había podido pagar, y con ayuda de una alcaldía, fue un cateterismo cardíaco (navegación hasta el corazón con fines diagnósticos o terapéuticos). Le costó 1.500 bolívares. “Aquí (en el Cardiológico) no he pagado nada. Todo ha sido gratis. No tengo palabras para agradecer. La atención ha sido muy buena. Y es importante que todas las madres que tengan un hijo como el mío sepan que este lugar existe. Aparte del temor que una tiene de someter a su hijo a una operación del corazón, porque podría morir, una no sabe dónde acudir, y eso desespera”. Ender Materán fue dado de alta el martes de esta semana, pero se mantiene hospedado con su madre en las residencias del Cardiológico Infantil. Se marchará �� “Cuando regrese con mis amigos quiero acompañarlos a jugar fútbol” Ender Materán quiere ser médico para poder ayudar a los demás como lo han ayudado a él Consideraciones �� a su casa cuando terminen algunos estudios especiales. Deberá volver a finales de junio para que se le practiquen los chequeos médicos.
�� ACONTECIMIENTO Trata negrera La ausencia de condiciones mínimas de higiene y los excesivos castigos a los que fue sometida, así como la falta de anticuerpos contra las epidemias europeas, prácticamente diezmaron la población indígena de Nuestra América. Esto mermó considerablemente la mano de obra que necesitaban los invasores españoles y portugueses en el siglo XVI. Ante esa circunstancia, y bajo la visión racista y equivocada de que los esclavizados africanos podrían soportar mejor el trabajo extenuante, se decidió adoptar la mano de obra negra. Así se intensificó el tráfico negrero, un negocio rentable en el que las mujeres y los hombres africanos eran una mercancía más. Piratas, comerciantes y navegantes particulares fueron sus impulsores, pero en el siglo XVII pasó a ser una actividad administrada por compañías de renombre. En la trata negrera los futuros esclavizados eran cazados en el interior o en la costa. Una vez atrapadas y encadenadas las víctimas -incluidas niñas, niños y mujeres- se les trasladaba a pie hasta barracones donde permanecían antes de ser llevardos a los barcos. Alexander Torres Iriarte CONCEPTO Esclavitud negra El fenómeno de la esclavitud negra se generó a partir del siglo XV por la necesidad del mercado europeo, y de sus dominios s en América, de disponer de mano de obra barata para producir r las tan preciadas mercancías y artículos de consumo, tales como: mo: añil, cacao, azúcar, tabaco y café. El comercio de estos productos dejaba importantes ganancias que con el tiempo contribuyeron a la expansión económica y política de España, Portugal e Inglaterra. La necesidad de contar con on una mano de obra barata concondujo al surgimiento de la inhumana práctica del comercio ercio negrero entre portugueses, eses, ingleses, holandeses y españoañoles. Esto -junto con la ideología ogía reinante que sostenía que existían seres de raza superior destinados a dominar el mundo, y seres inferiores condenados a la servidumbre- justificó todas las acciones crueles de los eu- bi CENTENARIO Comprender la Independencia La esclavitud en la Venezuela colonial ropeos contra los habitantes del continente africano. La mano de obra esclavizada fue la principal mercancía del régimen colonial; ella sostuvo el sistema económico con el elevado pre- cio dde la libertad de las africanas y los africanos. Andrés An Eloy Burgos PERSONAJE Marta Cumbale Nació en Güiria (estado Sucre) y su familia es- tuvo integrada por po descendientes de africanos esclavizados y otros en situación tuac de manumisos. Murió en eel pueblo de San Francisco, jurisdicción juris de Maturín, el 28 de ddiciembre de 1864. Esta Es heroína luchó al lado ��7 de las y los patriotas en los campos de Chaguaramal y se afilió al grupo de mujeres que dirigió Juana Ramírez en Maturín entre los años 1811 y 1814. Marta Cumbale es símbolo del compromiso con la libertad de mujeres pobres de origen africano, que cumplieron un rol estelar en la lucha por la Independencia venezolana, pero que fallecieron sin que sus paisanos las recordaran. A.T.I. DOCUMENTO Carta de libertad Durante el periodo de dominación colonial de España sobre América, las esclavizadas y los esclavizados tenían la posibilidad de alcanzar su libertad mediante una carta de libertad, con lo que se mantenían nía dentro de la ley; esto, a diferencia fere de quienes huían y se organizaban org en comunidades clandestinas clan llamadas cumbes y ci cimarroneras. EEste anhelado documento se obtenía obt al pagar un monto de dinero din que variaba según la edad, edda el sexo y la complexión física físic de la persona esclavizada. También Ta am podía ser concedida por la ama o el amo, ya fuera como co om recompensa por alguna acción accc o dejada en testamento como herencia. Generalmente esto dependía de las relaciones afectivas que pudieran llegar a darse. Karín Pestano POSICIÓN La esclavitud es un fenómeno que adquiere un gran auge con la invasión del continente que hoy llamamos América por parte de los europeos. La empresa conquistadora demandaba fuerza de trabajo para la explotación mercantil de las nuevas regiones, y una vez exterminada o diezmada la población autóctona, África se convirtió en el centro de interés de la empresa de trata de seres humanos. Esto explica por qué durante 4 siglos millones de africanas y africanos, tratados como bestias en barcos negreros, atravesaron el océano Atlántico para posteriormente ser rematados por los colonizadores de América. Genoveses, alemanes, portugueses, franceses, ingleses y españoles tienen un expediente doloroso en la América colonial. Pese a esta dura realidad, la resistencia nunca cesó cuando de justicia se trataba. Los grilletes, el látigo y la marca con hierros ardientes no pararon las ansias de libertad. Los gritos de furia, la lucha creativa, la huída oportuna, el trabajo pausado pese a a la soga del “amo”, los sabotajes a los dueños y las rebeliones demuestran una historia de insumisiones. Estudiar la esclavitud de las negras y los negros en nuestra historia colonial es comprender la importancia de los derechos de nuestras y nuestros afrodescendientes hoy. A.T.I (Coordinador)
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