Modernización de las relaciones entre la Federación y los Estados ...

entre la Federación y los Estados federados requieren un esfuerzo de coordinación
ineficiente desde el punto de vista económico. Por ello, resulta más difícil introducir
sistemas informáticos modernos o cooperar a nivel europeo.
El Delegado recomienda establecer una agencia tributaria federal (cap. 4.1.10). Esta
recomendación, además de prometer ventajas financieras, está avalada por los principios
orgánicos de la Constitución, por las experiencias acumuladas en el sistema federal y los
aspectos de equidad tributaria. Los impuestos propios de los Estados federados deberían ser
recaudados exclusivamente por ellos mismos.
Si no es posible establecer una agencia tributaria federal, deberían ser reforzadas las
facultades de la Federación de dar instrucciones a los Estados federados. En este contexto,
sería recomendable renunciar al requisito de consentimiento por parte de los Estados
federados. En el caso de que se implante esta pequeña solución, el Delegado aconseja
establecerla constitucionalmente, enmendando la Ley Fundamental.
0.3 Infraestructura de transporte
Es preciso reforzar el principio de la subsidiariedad en el campo de las competencias
para la infraestructura de transporte, lo que se conseguirá a través de la regionalización de
funciones, atribuyendo a los Estados federados las competencias legales para el
cumplimiento de las tareas típicamente regionales. De esta forma será posible evitar el
conflicto de intereses federales y regionales, reducir las necesidades de control integral,
fortalecer el sentido de responsabilidad de los Estados federados y aumentar la eficiencia.
En concreto, el Delegado se refiere a los siguientes aspectos:
Carreteras federales de larga distancia (cap. 4.2.1)
Según la normativa constitucional vigente, incumbe a los Estados federados, por
delegación de la Federación, gestionar la red de carreteras federales de larga distancia
(integrada por autopistas federales y carreteras federales). Tras la construcción de la red de
autopistas, las carreteras federales sirven hoy en día sobre todo para el transporte regional y
han perdido importancia para el transporte de larga distancia, tarea que incumbe a la
Federación.
El conflicto de intereses provoca que la cooperación entre Federación y Estados
federados a la hora de gestionar las carreteras federales sea ineficaz. Esto vale
particularmente para la planificación de obras de vialidad, la disminución de categoría de
carreteras federales y la construcción de circunvalaciones.
Por este motivo, el Delegado recomienda concentrar la competencia para las autopistas
federales en manos de la Federación (o sea, las competencias en materia de financiamiento
y gestión). Los Estados federados deben encargarse de la totalidad de carreteras federales
(asumiendo la responsabilidad en materia de financiamiento y gestión) y recibir, a cambio,
una compensación financiera apropiada que no debe ser obligatoriamente afectada a un
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