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La biblioteca pública de Estocolmo de Erik Gunnar Asplund, un icono de la capital sueca
teca cuenta en la actualidad con 2 millones de
volúmenes, además de otro material audiovisual
de consulta y préstamo. En el espacio
ocupado por el cubo se encuentran tanto las
circulaciones de acceso a los diferentes espacios
como las diferentes salas de consulta o
lectura y de uso interno de la biblioteca. Por
tanto, una vez dentro del espacio nos damos
cuenta de que el clasicismo sólo es una referencia,
ya que en su uso y funcionamiento, la
biblioteca es un equipamiento absolutamente
contemporáneo. Otra muestra de la vigencia
de su uso es la separación de accesos para
los diferentes usuarios, estando separado el
acceso de los adultos, el de los niños y el del
personal interno. También es significativo el recorrido
de acceso a la sala principal desde la
calle, subiendo una suave rampa escalonada,
a modo de promenade arquitecturale (paseo
arquitectónico). Se trata de una representación
de la ascensión al estadio superior, donde se
encuentra el saber. Al entrar se atraviesa un
estrecho acceso que desemboca en la amplia
sala cilíndrica, mostrando así la importancia
Vista del edificio desde el parque.
del recorrido, la tensión y la sorpresa de la
obra arquitectónica. Se establecen así unas
circulaciones complejas, racionales y funcionales,
mucho más cercanas al funcionalismo
que más adelante seguiría el movimiento moderno
que al clasicismo de la época anterior
de Asplund. Siguiendo la búsqueda del funcionalismo,
todos los muebles fueron diseñados
a medida, específicamente para los diferentes
usos que tenían que acometer.
La biblioteca se encuentra en la esquina
de una gran manzana de la ciudad de Estocolmo,
en la intersección de las calles Odengatan
y Sveävagen, dejando así una gran superficie
libre en el lado sur para un parque
público con un gran estanque, también diseñado
por Asplund. Los tres edificios anexos
en el costado oeste formaban también parte
del conjunto planeado por Asplund, pero fueron
construidos con posterioridad por otros
arquitectos.
En 2006 se convocó un concurso internacional
para la ampliación de la biblioteca. El
nuevo edificio se situaría al lado de la biblio-
Esdrújula. Revista de filología 165