+ Descargar revista nº 24 (PDF) - Centro Gallego de Vitoria Gasteiz
+ Descargar revista nº 24 (PDF) - Centro Gallego de Vitoria Gasteiz
+ Descargar revista nº 24 (PDF) - Centro Gallego de Vitoria Gasteiz
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
A toda vela… el “Nostramo-Nieves”<br />
Francisco Corcuera Villacián<br />
Algo <strong>de</strong> mágico tienen esos navíos.<br />
Quizá sea porque con su presencia<br />
evocan épocas <strong>de</strong> gran<strong>de</strong>s <strong>de</strong>scubrimientos,<br />
o porque nos hacen recordar con añoranza<br />
aventuras y odiseas <strong>de</strong> abordajes,<br />
corsarios, islas <strong>de</strong>l tesoro, moby-dicks…, en<br />
aquellas tar<strong>de</strong>s <strong>de</strong> cine dominicales <strong>de</strong> nuestra<br />
infancia.<br />
Crucero “SEA CLOUD II” en trabajos <strong>de</strong> carenado<br />
y revisiones generales<br />
Hace una treintena <strong>de</strong> años, en Tenerife, tuve<br />
la ocasión <strong>de</strong> embarcar en uno <strong>de</strong> ellos. Era el<br />
protagonista <strong>de</strong> una excursión turística con <strong>de</strong>stino<br />
a una recóndita playa cuyo acceso sólo era<br />
posible por mar.<br />
Durante el trayecto, nos relataron por una<br />
peculiar megafonía, la historia <strong>de</strong>l viejo pailebote<br />
en sus periplos por los siete mares.<br />
Si ya <strong>de</strong> por sí, el casco <strong>de</strong> ma<strong>de</strong>ra crujía<br />
en una navegación <strong>de</strong> cabotaje con aguas tranquilas,<br />
no podía imaginarme el barco con temporal<br />
por esos mares <strong>de</strong> Dios. Pasamos un día<br />
inolvidable.<br />
Recientemente, y a través <strong>de</strong> un foro relacionado<br />
con temas náuticos, me interesé por el<br />
para<strong>de</strong>ro <strong>de</strong>l pailebote. Gracias a la colaboración<br />
<strong>de</strong> los lugareños, la i<strong>de</strong>ntificación <strong>de</strong>l barco<br />
no fue difícil.<br />
Según sus testimonios, por aquellos años<br />
existieron dos veleros trabajando en Tenerife<br />
<strong>de</strong>dicados a excursiones y fines turísticos: El<br />
“Marino Riquel” y el “Nostramo”, ambos <strong>de</strong><br />
características muy parecidas pero con rumbos<br />
diferentes.<br />
El primero <strong>de</strong> ellos estuvo en activo hasta los<br />
años 90. Su <strong>de</strong>stino es incierto, ya que mientras<br />
unos atestiguan que el barco fue hundido quedando<br />
como arrecife artificial, otros se inclinan<br />
por el abandono y <strong>de</strong>sguace en el sur <strong>de</strong> la isla.<br />
Todas mis incógnitas estaban <strong>de</strong>spejadas. En<br />
una <strong>de</strong> las fotografías <strong>de</strong>l velero aparecía la balsa<br />
salvavidas en cuya superficie, unas letras apenas<br />
legibles <strong>de</strong>lataban su nombre. Era mi barco.<br />
Mejor suerte corrió el NOSTRAMO.<br />
Intrigado por conocer su para<strong>de</strong>ro, seguí la<br />
estela <strong>de</strong>l velero navegando por la red, consultando<br />
foros, blogs, libros, periódicos… Su dilatada<br />
historia era sencillamente impresionante.<br />
Originalmente el nombre <strong>de</strong>l barco fue “NIE-<br />
VES” y arbolaba tres mástiles. Se construyó en el<br />
año 1.918 en la Carpintería <strong>de</strong> Ribera propiedad<br />
<strong>de</strong>l maestro don Manuel Domínguez Lestón<br />
situada en Broñas (A Coruña), en el límite <strong>de</strong> los<br />
ayuntamientos <strong>de</strong> Noia y Serra <strong>de</strong> Outes.<br />
Pailebote “MARINO RIQUEL” anclado en la bahía <strong>de</strong><br />
Antequera. Tenerife<br />
5