7. Solucionario
7. Solucionario
7. Solucionario
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
ANEXOS Guía didáctica: Ética<br />
Y una buena forma de determinar el ‘valor’ es usar una metafórica ‘balanza’. Pues si entendemos<br />
nuestra decisión libre como la elección de una opción entre varias, debemos suponer que la acción<br />
que escogemos es aquella a la que le otorgamos más valor. Puedo entender que siempre escogeré lo<br />
más valioso, con razones justificadas o no, la inclinación hacia una acción es haberla declarado más<br />
valiosa que todas las demás opciones posibles. Así, a la pregunta de ¿cuáles son mis valores?, no se<br />
debe responder desde frases recogidas en textos propuestos por los maestros o los sabios aprendidos<br />
en la escuela, o en la calle, o en la universidad, sino desde la comprobación de las opciones elegidas.<br />
Si elegimos una actitud de egoísmo frente a otra posible de generosidad lo que estamos diciendo es<br />
que para nosotros es más valioso actuar con egoísmo que con generosidad, quizás porque aquello que<br />
conseguimos con el egoísmo es más deseado que aquello que conseguimos con la generosidad, con<br />
lo cual estamos al mismo tiempo afirmando que el egoísmo o la generosidad están subordinados a la<br />
utilidad de los bienes que esperamos conseguir; si es un mejor puesto en la empresa o un mejor sueldo,<br />
será aquello que pesa más que la generosidad, con lo cual ésta será un valor, pero siempre que no<br />
interfiera con otro que considero de más valor o más digno para mí. Hay un ejemplo muy famoso que<br />
puede ilustrar cuan importante es el resultado de la acción y como ponemos en un lado de la balanza<br />
una capacidad y otra en el otro lado. Es la de Esaú y Jacob. Esaú tenía el derecho de primogenitura<br />
porque nació primero y Jacob era sencillo y sin derecho para ser el señor de sus hermanos, y sucedió que<br />
“Cierta vez estaba Jacob cocinando cuando su hermano llegó del campo muy agotado, pidiéndole del<br />
plato de lentejas que preparaba, pues venía hambriento... Jacob le respondió: ‘Véndeme ahora mismo<br />
tus derechos de primogénito’, Esaú le respondió: ‘Estoy muriéndome de hambre, ¿qué me importan<br />
mis derechos de primogénito?’. Jacob insistió: ‘Júramelo ahora mismo’. Éste lo juró, vendiéndole sus<br />
derechos. Jacob entonces dio a su hermano pan y un plato de lentejas. Éste comió y bebió y luego se<br />
marchó. No hizo mayor caso de sus derechos de primogénito. 62<br />
En el momento del hambre el valor de un derecho no le pareció mayor que saciarla con el guiso<br />
de su hermano, aunque cuando le es robada la bendición, sí que estima su valor. El saber estimar lo<br />
que no es presente parece que hace a la persona más sabia que el saber estimar sobre lo actual. La<br />
correcta estimación de lo que no está en uso en la actualidad es precisamente una de las virtudes que se<br />
le exige a todo buen economista. Esaú cambió un plato de lentejas por una ‘capacidad’, y este término<br />
se hace tan importante que un autor, a quien se le otorgó el premio Nobel de Economía, Amartya<br />
Sen, propuso la ‘capacidad’ como uno de los medios evaluativos del bienestar o de la pobreza. En el<br />
enfoque de ‘capacidad’ lo que le interesa es hacer la evaluación en términos de su habilidad real para<br />
lograr funcionamientos valiosos como parte de la vida. Eligió el término ‘capacidad’, según sus palabras,<br />
para “representar las combinaciones alternativas que una persona puede hacer o ser: los distintos<br />
funcionamientos que puede lograr”. Sus investigaciones (según el Comité que entrega el Premio) han<br />
ampliado la comprensión del mundo respecto a los mecanismos económicos que subyacen en las<br />
hambrunas. Esaú no supo evaluar en términos de capacidad su primogenitura frente al apetitoso guiso<br />
que estaba preparando su hermano Jacob.<br />
Sen afirma, además, que no trata de moralizar la ética sino de poner los modelos económicos<br />
al servicio de las decisiones éticas, que implican dilemas lógicos y técnicos complejos, y, quizás por<br />
eso, él prefiere adentrarse en los dilemas económicos que implican cuestiones éticas y políticas, y son<br />
considerados sus planteamientos como muy significativos en la vinculación de ética y economía.<br />
Valor y virtud también son entendidos como valentía por los griegos. El valor de los soldados ha<br />
sido considerado como uno de los elementos que en las guerras (no las de ahora) inclinaba la balanza<br />
de la victoria hacia su lado. En su Ilíada Homero ilustra con suficiencia esta consideración. Aristóteles<br />
menciona cinco especies de valor que van unidas a las emociones que provocan el acto valiente: El<br />
valor cívico; el de los soldados que obedecen por temor, y que menciona Homero; el valor de la<br />
62 Génesis 25,29-34<br />
UNIVERSIDAD TÉCNICA PARTICULAR DE LOJA La Universidad Católica de Loja 185