santurtzi - Bizkaiko Batzar Nagusiak

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Forja Artística en Las Encartaciones de Bizkaia
parciales, reconociendo mi labor y dándome ánimos para continuar, como también lo hicieron
Dña. Micaela Portilla y D. Julio Caro Baroja 2 .
Por otro lado, no quiero concluir sin mencionar a D. Javier de Ybarra y Bergé, insigne historiador
y gran conocedor de nuestra cultura, cuyos trabajos (Escudos de Vizcaya y Catálogo
Monumental de Vizcaya) han sido mis libros de cabecera durante estos últimos años.
Forja artística en Las Encartaciones. Características
Edificios civiles.
Cruces y veletas
Estas piezas no abundaron en los edificios civiles de Las Encartaciones. Realmente, su número
es exigüo, puesto que sólo han llegado hasta nosotros dos ejemplos [uno en la Casa Gorostiza
(Valle de Sopuerta) (Fig. 320) y otro en el Palacio de Ubieta (1829) (Valle de Gordejuela)
(Fig. 945)]. Posiblemente, otras construcciones estuvieron engalanadas con estos elementos,
pero por azares del destino no han llegado hasta nosotros.
Asimismo, hay que consignar que, a diferencia de algunos herrajes de balcones y puertas, el
diseño de las cruces y veletas encartadas es muy sencillo (Fig. 325).
Balcones
Desde el siglo XVII, los balcones fueron utilizados en la mayoría de las construcciones civiles
de calidad. En los edificios modestos, las balconadas eran de madera. Por otro lado, las
fachadas traseras de los edificios importantes presentaban balconadas de madera. Lógicamente,
esto evidencia que el trabajo en hierro era caro y que sólo se lo podían permitir los
propietarios de las mejores casas y palacios.
A lo largo de los siglos XVII, XVIII y principios del siglo XIX, los balcones presentaban las
siguientes características.
Por un lado, los balcones abundan sobremanera en la fachada principal de los edificios.
Algunos superan ligeramente las dimensiones de la puerta balconera (Figs. 409 y 1180),
mientras que otros ocupan la totalidad de la fachada (Fig 181).
En las fachadas laterales abundan los balcones de antepecho, es decir sin vuelo (Fig. 527).
Los balcones están siempre formados por dos partes: la base y la barandilla.
Por lo que respecta a la base de los balcones, existen tres variantes. Unas son de armadura
de hierro con largas tornapuntas de barrotes con remates avolutados (Figs. 183, 768 y 870).
2 Este estudio fue publicado en diferentes capítulos de la revista
Ondare por Eusko Ikaskuntza entre los años 1982 y 1988.