Francisco Petrarca, con los seys Triunfos de toscano - eHumanista

425 Roxana Recio
hombres famosos. Y para prueva de esta sentencia dize quántas personas de fama ovo entre
Peneo y Híber, que son ríos, quántos entre Xanto y Tíber; los más de ellos son ya sin memoria
puestos en olvido del mundo, y ni más ni menos se olvidarán los que no son aún olvidados.
“Hará el sol al derredor
no solos años, mas lustres
y el siglo, que es vencedor
de lo mayor y menor;
hará menguar los illustres.
¡Quántos claros se hallaron
entre el Peneo y el Híber!
¡Quán presto que se acabaron!
Así yrán los que quedaron.
¡Quántos sobre Xanto y Tíber!
Es de saber que lustre es difinido de los scriptores de la lengua latina significar el tiempo
de cinco años, lo qual tuvo origen del cuento de cinco años hecho del pueblo romano. De donde
nuestro poeta quiere dezir que no solamente es apto el sol a passar un año, mas los lustres y
qualquier otra duplicación que del tiempo se haga; mediante la qual revolución queda el siglo
superior a todo hombre famoso, por mucho que de él ayan escripto los más sabios escriptores.
Así que andando el tiempo se pierde la fama, por grande que sea oy entre los mortales, de los que
más illustres an sido.
Segundariamente avemos de entender que muy saludable exemplo trae nuestro micer
Francisco de aquéllos que ya son escurescidos entre el río Peneo y Híber, y entre el río Xanto y
Tíber, los quales en otro tiempo esclarecidos eran por grandes hechos y notable fama. De donde
se á de entender por los primeros los famosos grecos, porque el río Peneo discurre y riega la
Thesalia, la qual hazia el mediodía confina con Macedonia, y el río Híber discurre por Tracia,
que es vezina a Constantinopla; así que entre estos dos ríos se contienen Macedonia, Tracia,
Thesalia, y son vezinas la Áctica y Boecia. Y quántos fuesen famosos entre macedónicos,
tracios, thesálicos, athenienses y thebanos cada uno por sí mesmo lo puede considerar; y muchos
de aquéllos son ya olvidados y sin fama, y otros estarán poco tiempo en olvidarse y quedar sin
fama. Por los otros entiende el poeta los preciados troyanos, porque el río Xanto pasava por
medio de Troya. De donde Virgilio en el primo de la Eneida lo cuenta quando dize que Eneas
vía dentro del templo de Cartago pintadas por orden todas las guerras troyanas, y entre las otras
cosas Diómedes quando tomava los cavallos de Reso, los quales tenían propriedad que, como
beviessen en el río Xanto, no se podría más perder Troya, y dize así: “Agnoscit lacrimans, primo
que prodicta somno Titides multa vastabat cede cruentus, ardentesque avertit equos in castra
prius quam pabula gustassent Troye [fol. cxlix v] Xantumque bibissent”. Por los últimos
entiende micer Francisco los gloriosos romanos, porque el río Tíber passa por Roma. Verdad es
que primeramente se llamó Álbula por la blancura que entonces el agua tenía; después se llamó
Tíber porque se ahogó en él un rey de Albano que se llamava Tiberino. Pues ya se sabe quán
famosos fueron los romanos y los troyanos, y se sabe quánta multitud de ellos son ya sin fama,
manifiesto nos queda que el tiempo es muy cierto vencedor de la fama, o por muchos días o por
perderse libros y historias que de ellos hablavan.
Añade agora la otra digna sentencia que oyó, diziendo que la fama de los mortales es
como un poco de sereno en ynvierno, el qual es deshecho con poca niebla, y por esto el tiempo
luengo es gran veneno para matar la fama. Y la otra sentencia es que nos dio a entender quán
eHumanista 2012