Francisco Petrarca, con los seys Triunfos de toscano - eHumanista

322 Roxana Recio
como si fuera tierra seca, y así passó el pueblo de Israel el mar Vermejo. Y entrando Pharaón
por los mesmos caminos tras ellos, quando los judíos fueron llegados a la otra ribera y Pharaón
cerca de ellos, cerrose el mar estando en salvo los judíos, y cerrándose se ahogó Pharaón con
todos sus egiptios.
Escapados los israelitas de tanto peligro, fuéronse con Moysén a los desiertos, donde
fueron mantenidos y apascentados de Dios XL años de codornizes y maná, y allí convertió
Moysén todas las aguas amargas en dulces por miraglo. De allí salidos del desierto y venidos en
las tierras de los amaléticos, combatieron con ellos y siempre vencían mientras que orava
Moysén. Al 652 fin levolos Moysén, según la promesa de Dios, cerca del monte Sinaí, donde Dios
dio la ley a Moysén encima de la altura, la qual ley quería que su pueblo guardasse. Baxando
Moysén del monte con la ley, halló el pueblo que adorava el bezerro dorado, por lo qual Moysén
recibió mucha ira, y arrojó las tablas de piedra en que la ley stava scripta y hízolas en tierra
pedaços. Mas después movido a compassión del pueblo, rogó a Dios que los perdonasse y
instituyó las leys cerca del político vivir. Y después de aver ordenado el sacerdocio, y fundado
el arca, y constituydo el oratorio, [fol. cxii v] y descriptos los tribus según el mandamiento de
Dios, bendiziéndolos a todos subió sobre el monte Nebo, donde mirando toda la tierra de
promissión, así como Dios lo avía ordenado, de edad de CXX años murió Moysén. Son bien
manifiestas estas obras por el processo de la sagrada scriptura en el Éxodo, Levítico. Y allende
del testimonio de las letras sagradas se nota la excellencia de Moysén por el contesto de Eusebio
en el nono libro De preparatione evangelica, donde introduze Eupolemo dezir de Moysén estas
palabras dignas: “Moysén fue hombre sapientíssimo y el que primero dio conoscimiento de letras
a los judíos, y de los judíos las tomaron los de Fenicia”. Manifiesta tanbién Virgilio la doctrina
en el sexto de la Eneyda, descriviendo Museo en los campos Elisios, que así le llaman los
griegos por testimonio de Eusebio, proceder con más excelencia que los otros, diziendo así en
estos versos: “Concipit, ecce, alios dextra levaque per herbam vescentes letumque choro pena
canentes inter odoratum lauri nemus, unde superne plurimus Eridani per silvam volvitur amni.
Hic manus ob patriam pugnando vulnera passi, quique sacerdotes casti, dum vita monebat,
quique pii vates et Phoeblo digna locuti, inventas atque vitam excolvere per artes quique sui
memores alios fecere merendo. Omnibus his nivea cinguntur tempora victa. Quos circunfusos
sic est affata Sibilla, Museum ante omnes, medium nam plurima turba hunc habet atque humeris
extantem suscipit altis: „discite, felices anime tuque optime vates, que regio Anchisen, quis habet
locus? alius ergo vehimus et magnos Erebi tranavimus amnes‟”. Dize: “Ved aquí a la mano
derecha y ysquierda muchos olgando por estos campos y deleytoso lugar cantando a sus
ayuntamientos por este oloroso vergel por donde pasa este 653 gran río Eridano. Aquí están todos
los que murieron peleando por su tierra, y los sacerdotes que castamente bivieron, y los profetas
que de Dios profetizaron y los que bien bivieron y a otros aprovecharon; todos estos están con
vestiduras blancas, de los quales habló la Sibila. Y ved cómo toda aquella compaña trahe en
medio encima de sus hombros a Moysén: „Aprended, ánimas bienaventuradas y tú, gran profeta,
qué lugar tiene Anchises, y todos deseamos llegar allá‟.
Cerca del exercicio 654 de las armas, allende del testimonio de Pentetauco, scrive Artapano,
como muestra Eusebio, que, después que Orpheo de Moysén ovo recebido doctrina grandíssima,
Moysén halló los instrumentos de guerra y enseñó a pelear las gentes de Egipto; por lo qual fue
de los egiptios casi adorado como dios y por su gran saber era llamado Mercurio. Mas la invidia,
652 Al: B “y al”.
653 este: B “el”.
654 exercicio: R “excercicio”.
eHumanista 2012