06.01.2013 Views

Francisco Petrarca, con los seys Triunfos de toscano - eHumanista

Francisco Petrarca, con los seys Triunfos de toscano - eHumanista

Francisco Petrarca, con los seys Triunfos de toscano - eHumanista

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

21 Roxana Recio<br />

en castellano el reverendo y muy discreto varón <strong>Francisco</strong> <strong>de</strong> Madrid, arçediano <strong>de</strong>l Alcor.<br />

Compuso también <strong>los</strong> sonetos y canciones en vulgar <strong>toscano</strong>, <strong>con</strong> <strong>los</strong> <strong>seys</strong> Triumfos en la misma<br />

lengua cuya traslación es la presente, en <strong>los</strong> quales muy claramente quiso manifestar la gran<strong>de</strong>za<br />

<strong>de</strong> su dotrina y la excellencia 28 <strong>de</strong> su saber mostrándose en el<strong>los</strong> gran poeta, muy gran orador,<br />

grandíssimo historiador, insigne philósopho, excellente astrólogo y muy <strong>con</strong>templativo y<br />

cathólico theólogo, según que la materia singular <strong>de</strong> cada Triumpho lo requiere, mostrando muy<br />

graves y provechosas sentencias <strong>de</strong>baxo <strong>de</strong> un velo muy agradable <strong>con</strong> palabras <strong>de</strong> mucha<br />

dulçura y gentileza. Y puesto que otros naturales <strong>de</strong> su tierra ayan en su lengua compuesto obras<br />

<strong>de</strong> mucha doctrina y gravedad, y su fama sea divulgada por muy excellente, si <strong>los</strong> lectores <strong>de</strong><br />

ellas quisieren juzgar la verdad sin affición, sé muy cierto que dirán averles excedido el nuestro<br />

poeta sin comparación, porque en él solo se paresció el estilo más subido y más alindado que<br />

podía en la lengua toscana hallarse; lo qual se paresce muy claro en que antes ni <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> él no<br />

huvo nadie que <strong>de</strong> tal manera escriviesse. Todas las obras que compuso fueron en latín salvo<br />

estos Triumphos y <strong>los</strong> sonetos, que fueron en <strong>toscano</strong>; en lo uno se muestra quánta elegancia<br />

pue<strong>de</strong> aver en el latín, y en lo otro quánta gentileza pue<strong>de</strong> ser en lo <strong>toscano</strong>.<br />

Pues viéndose ya el nuestro filósopho en edad algo cansada, acordó <strong>de</strong> retraerse a Padua,<br />

don<strong>de</strong> era canónigo, mas, no podiendo bivir en el tráfago <strong>de</strong> la gente, se recogió en una al<strong>de</strong>a<br />

muy agradable y <strong>con</strong>venible a sus pensamientos llamada Arquato, cerca <strong>de</strong> Padua, <strong>con</strong> un<br />

grandíssimo amigo suyo llamado Lombardo, y en aquel lugar edificó una casa don<strong>de</strong> bivió lo que<br />

le quedava <strong>de</strong> la vida escriviendo y estudiando hasta que Nuestro Señor dio fin a sus días. Pues<br />

juzgando cómo bivió <strong>de</strong>s<strong>de</strong> <strong>los</strong> quarenta años hasta que murió, sin saber su fin, le podríamos<br />

juzgar por bueno, según el testimonio <strong>de</strong> la vida pasada. Mas como <strong>de</strong> <strong>con</strong>tino tenía ante sus<br />

ojos la muerte, procuró <strong>de</strong> bivir como quien avía <strong>de</strong> morir por ser bivo <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> muerto, y así<br />

or<strong>de</strong>nó su ánima haziendo el testamento 29 que anda impresso entre sus obras. Y recibiendo <strong>los</strong><br />

sacramentos estando sin sospecha <strong>de</strong> ninguna enfermedad (como muchas vezes <strong>los</strong> recebía), y<br />

<strong>de</strong>spués salteado <strong>de</strong> una dolencia que <strong>los</strong> médicos llaman appoplexía, no podiendo ya la <strong>de</strong>licada<br />

virtud hazer resistencia a la rezia enfermedad dio el spíritu a su criador en el año <strong>de</strong>l Señor <strong>de</strong><br />

mill y trezientos y setenta y quatro años, a veynte y ocho días <strong>de</strong>l mes <strong>de</strong> agosto, así que el<br />

espacio <strong>de</strong> su vida fueron setenta años. Enterrose en aquella al<strong>de</strong>a cerca <strong>de</strong> Padua, en una<br />

yglesia don<strong>de</strong> tenía <strong>de</strong>terminado hazer una capilla a Nuestra Señora; y porque fue sepultado su<br />

cuerpo en el suelo siendo merescedor <strong>de</strong> famosa sepultura, fuele hecho <strong>de</strong>spués en la parte más<br />

onrada <strong>de</strong> la yglesia un sepulcro muy rico <strong>de</strong> mármor don<strong>de</strong> sus huessos fueron trasladados, <strong>con</strong><br />

un epitafio o título que él mismo avía hecho viviendo, el qual en nuestra lengua dize así: “Cubre<br />

esta piedra <strong>los</strong> fríos huessos <strong>de</strong> <strong>Francisco</strong> <strong>Petrarca</strong>; Tú, Virgen y Madre, recibe el ánima, la qual<br />

Tu Hijo perdone y cansada ya <strong>de</strong> la tierra le plega que huelgue en el cielo”. Y porque más<br />

<strong>con</strong>ozcamos la excellencia <strong>de</strong> nuestro poeta, no es razón que callemos <strong>los</strong> cien ducados que un<br />

rústico labrador mandava para la obra <strong>de</strong> aquella yglesia porque enterrassen su cuerpo <strong>con</strong> el <strong>de</strong><br />

<strong>Francisco</strong> <strong>Petrarca</strong>, creyendo aclarar la oscuridad 30 <strong>de</strong> su sangre <strong>con</strong> la muy clara virtud <strong>de</strong><br />

nuestro poeta, mas el obispo, como más amigo <strong>de</strong> la razón que <strong>de</strong>l interesse, mandó al cura <strong>de</strong>l<br />

mismo lugar so graves penas que no <strong>con</strong>sintiesse por precio alguno que la sepultura, que <strong>de</strong><br />

tantas partes yvan a ver por quien <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> ella estava, fuesse violada <strong>de</strong> rústica compañía,<br />

puesto que el obispo quedó riyendo y alabando al labrador que en tanto estimava <strong>los</strong> claros<br />

varones. Así que partida <strong>de</strong>l mundo aquella ánima digna y generosa <strong>de</strong> nuestro poeta, no es <strong>de</strong><br />

28 excellencia: R “excellencia”.<br />

29 testamento: R “tastamento”; B “testamiento”.<br />

30 oscuridad: R “ascuridad”.<br />

<strong>eHumanista</strong> 2012

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!