Canastones- El misterio de los jóvenes de Oro
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
A mi hermana Raquel,<br />
que prefiere tomar <strong>de</strong>cisiones arriesgadas<br />
antes que permitir que el acomodamiento<br />
<strong>de</strong>fina cómo ha <strong>de</strong> vivir su vida.<br />
A. C.<br />
CANASTONES VOL.2<br />
<strong>El</strong> <strong>misterio</strong> <strong>de</strong> <strong>los</strong> Jóvenes <strong>de</strong> <strong>Oro</strong><br />
Primera edición: octubre <strong>de</strong> 2024<br />
© Texto: Alberto Casamayor Otero, 2024<br />
© Ilustraciones: Palma&Kako, 2024<br />
© Editorial el Pirata, 2024<br />
Saba<strong>de</strong>ll (Barcelona)<br />
info@editorialelpirata.com<br />
editorialelpirata.com<br />
Todos <strong>los</strong> <strong>de</strong>rechos reservados.<br />
ISBN: 978-84-19898-20-3<br />
Depósito legal: B 13781-2024<br />
Impreso en China<br />
Con el apoyo <strong>de</strong>:<br />
<strong>El</strong> papel utilizado en este libro proce<strong>de</strong> <strong>de</strong> fuentes responsables.<br />
Editorial el Pirata apoya el copyright, que protege la creación <strong>de</strong> obras literarias y es, por tanto,<br />
un elemento importante para estimular la labor <strong>de</strong> <strong>los</strong> artistas y la generación <strong>de</strong> conocimiento. Os<br />
agra<strong>de</strong>cemos que apoyéis a <strong>los</strong> autores comprando una edición autorizada <strong>de</strong> este libro y que respetéis<br />
les leyes <strong>de</strong>l copyright sin escanear ni distribuir <strong>de</strong> forma total o parcial esta obra, por ningún<br />
medio, sin permiso. Diríjase a CEDRO (Centro Español <strong>de</strong> Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si<br />
necesita fotocopiar o escanear algún fragmento.
EL MISTERIO DE<br />
LOS JÓVENES DE ORO<br />
Escrito por<br />
Alberto Casamayor<br />
Ilustrado por<br />
Palma&Kako
SOY JOEL<br />
Y TENGO<br />
NUEVE AÑOS.
Es posible que ya me conozcáis y, si no, me conoceréis<br />
enseguida. Entonces sabréis que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> no hace<br />
mucho tiempo juego al baloncesto y que he montado<br />
un equipo con mis amigos, <strong>los</strong> CANASTONES.<br />
Tampoco tardaréis en daros cuenta <strong>de</strong> que no se<br />
me da <strong>de</strong>masiado bien lanzar a canasta y <strong>de</strong> que<br />
a veces, cuando se trata <strong>de</strong> ganar partidos, las<br />
cosas se nos ponen un poco difíciles. O, sencillamente,<br />
imposibles. Como ahora.<br />
1<br />
Estamos ya en el último cuarto <strong>de</strong> un partido<br />
importantísimo, contra <strong>los</strong> Jóvenes <strong>de</strong> <strong>Oro</strong>, y el<br />
marcador indica que per<strong>de</strong>mos por catorce puntos.
Capturo un rebote en ataque y oigo a Laura, nuestra<br />
jugadora más simpática y que siempre intenta<br />
ayudar, que dice:<br />
¡Estoy aquí, Joel!<br />
¡No te preocupes<br />
y pásamela!<br />
Pero cuando intento pasársela, un enjambre <strong>de</strong><br />
brazos largos y raquíticos se interponen entre<br />
nosotros. La jugadora rival que tengo enfrente<br />
me guiña un ojo y me lo vuelve a guiñar y me<br />
lo guiña otra vez —la verdad es que sus ojos son<br />
azules y muy bonitos—.<br />
«¿Pue<strong>de</strong> ser que le guste? Pero…».<br />
6
Me quedo tan sorprendido que ni me doy cuenta<br />
<strong>de</strong> que me roba la pelota.<br />
—No sé si era un gesto AMOROSO o más bien un<br />
tic NERVIOSO —me dice Bermú<strong>de</strong>z, que es mi mejor<br />
amigo, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el banquillo.<br />
—Pues harían una pareja perfecta —masculla<br />
Nico, que es nuestro jugador estrella, pero que está<br />
en el banquillo porque atraviesa un mal momento.<br />
La pelota llega a la jugadora rival que lleva el<br />
número 87, lanza <strong>de</strong>s<strong>de</strong> lejos y la pelota entra en<br />
la canasta como si fuera lo más fácil <strong>de</strong>l mundo.<br />
Duna, que es nuestra jugadora más agresiva y<br />
que tiene peor carácter que un toro con picores,<br />
me agarra <strong>de</strong> la camiseta:<br />
—¡Corazones! Si pier<strong>de</strong>s un balón, has <strong>de</strong> <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r.<br />
No caigas en sus trampas.<br />
¿Que por qué me llama Corazones, si me llamo<br />
Joel? Pues porque una vez… mis calzoncil<strong>los</strong>…<br />
En fin, ¡esa historia ya está explicada!<br />
7
Des<strong>de</strong> el banquillo, nuestro entrenador, el coach<br />
Evans, nos aplau<strong>de</strong>. Creo que quiere levantarnos el<br />
ánimo, aunque a mí esas manazas inmensas y oscuras,<br />
en un hombre <strong>de</strong> casi dos metros con enormes<br />
ojos brillantes como bolas <strong>de</strong> nieve, más bien me<br />
levantan las ganas <strong>de</strong> salir corriendo.<br />
Patrick, nuestro jugador más alto y competitivo,<br />
a quien no le gusta per<strong>de</strong>r ni cuando juega con un<br />
bebé, toma el balón y se dispone a sacar <strong>de</strong> fondo.<br />
—Si me hubiesen llegado ya las gafas nuevas…<br />
—masculla, porque ve peor que un murciélago.<br />
<strong>El</strong> balón le llega a Samu, que es nuestro nuevo<br />
base, pelirrojo y tan nervioso que a veces parece<br />
que se ha multiplicado.
Por la radiofonía <strong>de</strong>l pabellón el speaker hace<br />
sonar música <strong>de</strong> trompetas, como si viniese el séptimo<br />
<strong>de</strong> caballería <strong>de</strong> las películas <strong>de</strong>l Oeste que le<br />
gustan a mi abuelo.<br />
Samu hace un quiebro que le rompe la cintura al<br />
número 77 y lanza el balón con fuerza a Patrick. La<br />
pelota, que ni ve, sale <strong>de</strong> la pista y choca contra<br />
una valla publicitaria. Botando, botando, llega a<br />
<strong>los</strong> pies <strong>de</strong> Patrick, que sigue pidiéndola:<br />
¡Pásamela,<br />
aquí!
Duna, con el ceño fruncido, lo agarra <strong>de</strong> un hombro<br />
y se lo lleva hacia nuestra canasta, para que<br />
<strong>de</strong>fienda.<br />
—¿Pero no te estaba enseñando Laura a usar el<br />
oído para orientarte?<br />
—Es que tengo la otitis cada vez peor…<br />
Con la lengua fuera, corremos a <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r. Echo<br />
un vistazo al banquillo. Junto a la hermana <strong>de</strong> Bermú<strong>de</strong>z,<br />
que está mirando su móvil y nunca habla,<br />
está Provi<strong>de</strong>ncia, nuestra jugadora <strong>misterio</strong>sa.<br />
<strong>El</strong>la, a veces, es capaz <strong>de</strong> ver el futuro y sus<br />
visiones acostumbran a ser muy útiles, pero hoy no.<br />
Resulta que para jugar este partido nos hemos<br />
tenido que <strong>de</strong>splazar hasta la costa y parece, no<br />
me preguntéis por qué, que la cercanía <strong>de</strong>l mar<br />
anula sus po<strong>de</strong>res…<br />
¡Y mira que yo, que soy un gran lector <strong>de</strong> cómics,<br />
sé un montón <strong>de</strong> superpo<strong>de</strong>res! Pero esto <strong>de</strong>l mar<br />
no lo había oído por ningún lado.<br />
—¡Canasta! —gritan <strong>los</strong> seguidores <strong>de</strong> <strong>los</strong> Jóvenes<br />
<strong>de</strong> <strong>Oro</strong> cuando la 99 vuelve a anotar.<br />
10
La diferencia en el marcador es cada vez más<br />
amplia y nuestros padres y <strong>los</strong> aficionados que<br />
han venido a vernos jugar están tan abatidos como<br />
nosotros.<br />
Con <strong>los</strong> brazos en jarra miro a mis compañeros y<br />
me quedo hipnotizado porque las camisetas que llevamos,<br />
<strong>de</strong> la tienda <strong>de</strong> <strong>de</strong>portes <strong>de</strong>l padre <strong>de</strong> Nico,<br />
son feas con avaricia y, si las mirarais mucho rato,<br />
a vosotros también os levantarían dolor <strong>de</strong> cabeza.<br />
Nos vuelven a robar el balón. Si encestan, ni Mr.<br />
Prodigio, mi superhéroe favorito, sería capaz <strong>de</strong><br />
darle la vuelta al marcador.
La 87 se dispone a lanzar y, <strong>de</strong> repente, Samu nos<br />
grita:<br />
—¡Haced lo mismo que yo!<br />
Nos quedamos todos boquiabiertos porque empieza<br />
a…<br />
Uy, esperad, esperad, imagino que ahora mismo<br />
os estaréis preguntando…<br />
¿Samu? Pero… ¿quién es Samu? ¿Y por qué es tan<br />
importante este partido?, ¿y contra quién estamos<br />
jugando?, ¿quiénes son <strong>los</strong> Jóvenes <strong>de</strong> <strong>Oro</strong>?, ¿y por<br />
qué son un equipo <strong>de</strong>…?<br />
Esperad, que me precipito… Si <strong>de</strong> verdad queréis<br />
saberlo, venid conmigo, que os explico cómo empezó<br />
todo.<br />
¡BOING!
Todo empieza una semana antes <strong>de</strong> que Samu nos<br />
grite: «¡Haced lo mismo que yo!». Para ubicarnos<br />
un poco en el tiempo, os diré que han pasado solo<br />
unos días <strong>de</strong>s<strong>de</strong> nuestra victoria en el torneo <strong>de</strong><br />
las Hamburguesas Vegetales Potra.<br />
2<br />
Des<strong>de</strong> entonces, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> clase, <strong>los</strong> jugadores<br />
<strong>de</strong>l equipo nos hemos acostumbrado a reunirnos<br />
en el vestuario que nos presta el colegio, junto a la<br />
cancha <strong>de</strong> baloncesto <strong>de</strong>l patio, para cambiarnos<br />
y entrenar.<br />
Por si todavía no nos conocéis, el equipo <strong>de</strong> <strong>los</strong><br />
<strong>Canastones</strong> está formado por:<br />
13
PATRICK<br />
Lo que más le gusta<br />
es el baloncesto.<br />
NICO<br />
Está enamorado <strong>de</strong>…<br />
su flequillo.<br />
PROVIDENCIA<br />
A veces<br />
tiene visiones.<br />
DUNA<br />
Una fanática <strong>de</strong><br />
las artes marciales.<br />
14
LAURA<br />
Le apasiona la moda.<br />
BERMÚDEZ<br />
Le encanta la poesía<br />
y habla con rimas.<br />
JOEL<br />
Me encanta leer<br />
cómics, pero…<br />
15
… pero he <strong>de</strong>scubierto que lo más <strong>de</strong> lo más es estar<br />
con mis amigos. Así que me he vuelto un forofo<br />
<strong>de</strong> <strong>los</strong> <strong>Canastones</strong> y haría cualquier cosa por el<strong>los</strong>.<br />
Mientras esperamos a que el coach llegue para<br />
entrar en el vestuario, me fijo en que Duna, que es<br />
bastante agresiva, sostiene con las dos manos, con<br />
mimo infinito, un montón <strong>de</strong> láminas <strong>de</strong> papel <strong>de</strong><br />
arroz.<br />
—Qué láminas más bonitas —le dice Laura.<br />
—Me han costado <strong>los</strong> ahorros <strong>de</strong> cinco cumpleaños<br />
—gruñe Duna—. Las he comprado porque últimamente<br />
lo único que aplaca mi ira es el sonido<br />
<strong>de</strong>l aire cuando agita el papel <strong>de</strong> arroz.<br />
Bermú<strong>de</strong>z, a mi lado, señala las hojas <strong>de</strong> Duna y<br />
me susurra:<br />
—Parecen más frágiles que el CRISTAL, mejor ni<br />
acercarse o acabaremos MAL.<br />
Le doy toda la razón. Nadie que quiera seguir<br />
vivo se acercaría a esas láminas. Jamás.<br />
Nuestro entrenador, el coach Evans, que también<br />
es nuestro profesor <strong>de</strong> Educación Física en el colegio,<br />
aparece enseguida.<br />
16
COACH EVANS<br />
Le gusta que le llamemos Evans, coach Evans o incluso<br />
«¡Eh! Vans». Vive para enseñar <strong>de</strong>porte, su mujer es la<br />
sensei que da clases <strong>de</strong> kárate en el colegio y es el padre<br />
adoptivo <strong>de</strong> Duna, nuestra jugadora más fiera.<br />
Pa<strong>de</strong>ce narcolepsia.<br />
¿Sabéis qué es?<br />
Pues que se queda<br />
dormido <strong>de</strong><br />
repente y sin<br />
aviso, ¡don<strong>de</strong><br />
sea! Por eso<br />
siempre bebe<br />
café ¡a litros!<br />
Aunque no le sirve<br />
<strong>de</strong> nada porque se queda<br />
dormido igual.<br />
Por suerte, averiguamos<br />
que el remedio para no<br />
quedarse traspuesto es…<br />
¡limpiarse las orejas con<br />
bastoncil<strong>los</strong>! Sí, sí, lo sé, no<br />
es un remedio muy científico,<br />
¡pero es lo que hay!<br />
Manos enormes<br />
Bastoncil<strong>los</strong><br />
para las orejas<br />
Termo<br />
<strong>de</strong> café
A simple vista pue<strong>de</strong> dar algo <strong>de</strong> miedo porque<br />
es muy gran<strong>de</strong> y muscu<strong>los</strong>o, y sus ojos, inmensos,<br />
brillan como el marfil sobre la piel oscura <strong>de</strong> su<br />
rostro. ¡Pero es un gran entrenador!<br />
—¡CANASTONES! —nos grita, con una voz<br />
tan atronadora que a un pájaro que pasa volando<br />
se le cae un huevo—. He <strong>de</strong> daros una noticia.<br />
Como ya sabéis, el partido <strong>de</strong> la final <strong>de</strong>l torneo <strong>de</strong><br />
las Hamburguesas Vegetales Potra fue transmitido<br />
a través <strong>de</strong> YouTube y tuvo un montón <strong>de</strong> visualizaciones.<br />
Des<strong>de</strong> ese día<br />
GLORIOSO firmo<br />
autógrafos como<br />
un FAMOSO.
A mí me han<br />
salido canas…<br />
Pues a mí me<br />
hacen <strong>de</strong>scuento<br />
en la peluquería.<br />
—Y la tienda <strong>de</strong> <strong>de</strong>portes <strong>de</strong> mi padre ven<strong>de</strong> tantas<br />
camisetas que van a hacer un documental sobre<br />
nosotros en las teles <strong>de</strong> pago. ¡En todas! —resopla<br />
Nico acariciándose el flequillo—. Mi padre siempre<br />
quiso ser diseñador <strong>de</strong> moda y, como ahora es<br />
nuestro proveedor <strong>de</strong> ropa <strong>de</strong>portiva, <strong>los</strong> bancos<br />
le han dado cantidad <strong>de</strong> dinero para que pueda<br />
producir un montón <strong>de</strong> camisetas y suda<strong>de</strong>ras con<br />
diseños propios y el logo <strong>de</strong> la tienda: Deportes<br />
Nicolás, Lo Petarás, ¡y lo está petando!<br />
19
Bermú<strong>de</strong>z y yo lo miramos <strong>de</strong> reojo, porque, aparte<br />
<strong>de</strong> que nunca hemos visto a nadie con la ropa<br />
<strong>de</strong> su padre, la última vez que pasamos frente al<br />
escaparate <strong>de</strong> la tienda, continuaban expuestas<br />
las mismas horribles camisetas <strong>de</strong> siempre, más<br />
feas que un examen en el último día <strong>de</strong> clase.<br />
<strong>El</strong> coach Evans da un sorbo al termo que lleva<br />
cargado <strong>de</strong> café y cruza sus <strong>de</strong>scomunales brazos<br />
sobre el pecho.<br />
—Me han llamado para que participemos en un<br />
torneo <strong>de</strong> campeones. <strong>El</strong> premio para el ganador<br />
es un cheque por mucho dinero. Es justo lo que<br />
necesitamos si no queremos que <strong>los</strong> <strong>Canastones</strong><br />
<strong>de</strong>saparezcan.<br />
Me quedo un poco extrañado, ¿y por qué íbamos<br />
a <strong>de</strong>saparecer? A Nico, <strong>los</strong> ojos le hacen chiribitas<br />
y, alisándose sobre el pecho <strong>de</strong> la chaqueta el logo<br />
<strong>de</strong> la tienda <strong>de</strong>portiva <strong>de</strong> su padre, dice:<br />
20
Sí, ya sabéis que<br />
mi padre nos va a<br />
regalar la ropa <strong>de</strong><br />
<strong>de</strong>porte para que<br />
juguemos…<br />
… y, claro, es mucho<br />
dinero el que está<br />
perdiendo. No es que<br />
lo necesite porque<br />
gana muchísimo,<br />
pero…<br />
21
—No lo había pensado —recapacita Laura—. Si<br />
tenemos que <strong>de</strong>splazarnos, o comer fuera, o incluso<br />
las inscripciones en <strong>los</strong> campeonatos, todo vale<br />
dinero.<br />
—Qué contrariedad más INOPORTUNA que ninguno<br />
dispongamos <strong>de</strong> una FORTUNA —se queja Bermú<strong>de</strong>z,<br />
tragando sin respirar una gominola que…<br />
¡puaj! parece <strong>de</strong> acelga.<br />
¡Vaya! Y yo que creía que para seguir jugando<br />
solo necesitábamos una pelota y dos canastas.<br />
Ahora que por fin tengo un grupo <strong>de</strong> amigos, no<br />
puedo permitir que <strong>de</strong>saparezcan <strong>los</strong> <strong>Canastones</strong>.<br />
Así que, como diría Mr. Prodigio, ¡tendremos<br />
que ganar!<br />
—¿Y cuántos partidos tenemos que jugar para<br />
llevarnos el torneo? —pregunto con el corazón en<br />
un puño.<br />
—Lo extraordinario es que se trata <strong>de</strong> un torneo<br />
¡a partido único! —exclama el coach Evans.<br />
—¡Qué gran<strong>de</strong>! A estos torneos solo acce<strong>de</strong>n <strong>los</strong><br />
equipos que han ganado campeonatos —se emociona<br />
Patrick, que está muy enterado <strong>de</strong>l funciona-<br />
22
miento <strong>de</strong> todos <strong>los</strong> <strong>de</strong>portes y, como aún no le han<br />
llegado las gafas nuevas y acaba <strong>de</strong> guardarse las<br />
viejas en el abrigo, le habla a un extintor creyendo<br />
que es uno <strong>de</strong> nosotros.<br />
—Entonces sería como jugar una FINAL… pero sin<br />
eliminatorias, ¡qué GENIAL! —medita Bermú<strong>de</strong>z,<br />
que pone cara <strong>de</strong> haber pisado una boñiga mientras<br />
chupa otra gominola, esta vez parece <strong>de</strong> col<br />
<strong>de</strong> Bruselas.<br />
Espero a que Provi<strong>de</strong>ncia haga algún comentario<br />
funesto <strong>de</strong> <strong>los</strong> suyos, previendo alguna <strong>de</strong>sgracia,<br />
pero permanece en silencio con <strong>los</strong> ojos semicerrados,<br />
muy concentrada. Los <strong>de</strong>más empiezan a<br />
bailar en el patio:<br />
—¡Vamos a jugar una fina-al! —canturrea Patrick,<br />
que no se da cuenta <strong>de</strong> que está frente al poste <strong>de</strong><br />
una canasta hasta que intenta chocar la mano con<br />
él.<br />
—¿Y quién organiza el torneo? —pregunto.<br />
<strong>El</strong> coach vuelve sus enormes ojos hacia mí y, <strong>misterio</strong>so,<br />
le da un largo sorbo a su café. Los <strong>de</strong>más<br />
<strong>de</strong>jan <strong>de</strong> cantar y bailar, y lo miran intrigados.<br />
23
Eso es lo más<br />
extraño…<br />
<strong>El</strong> promotor no<br />
ha querido dar<br />
su nombre.<br />
Pero es alguien con<br />
mucho mucho pero<br />
que mucho dinero…
Las palabras <strong>misterio</strong>sas <strong>de</strong>l coach nos inflaman<br />
la curiosidad. Las posibilida<strong>de</strong>s empiezan a explotarnos<br />
en la cabeza con la fuerza <strong>de</strong> un castillo <strong>de</strong><br />
fuegos artificiales:<br />
—Pues, si no quieren <strong>de</strong>cirlo, <strong>de</strong>ben ser ESPÍAS<br />
como la CIA y otras COMPAÑÍAS —<strong>de</strong>duce Bermú<strong>de</strong>z,<br />
que se ha tragado la gominola y está blanco.<br />
—A lo mejor es una organización benéfica que no<br />
quiere hacerse publicidad —aporta Laura, convencida.<br />
—Quizá sea la NBA, que busca nuevos talentos<br />
en secreto —se le ocurre a Patrick, mientras mueve<br />
la cabeza hacia todos lados.<br />
—¡Se acabaron las presunciones! —ruge el<br />
coach—. Vamos a jugar contra <strong>los</strong> Jóvenes <strong>de</strong> <strong>Oro</strong>,<br />
otro equipo que también ha ganado recientemente<br />
un campeonato. ¡Cambiaos ya! Vamos a entrenar<br />
duro. Empezaremos con un partidillo <strong>de</strong> cuatro<br />
contra cuatro.<br />
Aunque tenemos un millón <strong>de</strong> preguntas en la cabeza,<br />
el rugido <strong>de</strong>l coach nos cierra la boca como<br />
si tuviéramos pegamento en <strong>los</strong> labios.<br />
3<br />
25
Empezamos a entrar en el vestuario. Yo voy <strong>de</strong>trás<br />
<strong>de</strong> Patrick, que es el más alto <strong>de</strong>l equipo. Y entonces<br />
me doy cuenta… ¿<strong>El</strong> coach ha dicho un partidillo<br />
<strong>de</strong> cuatro contra cuatro? Pero si solo somos siete…<br />
De repente, me pego un porrazo contra la espalda<br />
<strong>de</strong> Patrick.<br />
¿Por qué<br />
te paras?
Pero ¿qué<br />
haces tú<br />
aquí?
Sentado en un banco, con una bolsa <strong>de</strong> <strong>de</strong>porte<br />
a <strong>los</strong> pies, hay un chico bajito y pelirrojo, <strong>de</strong> piel<br />
oscura como las sombras, al que recuerdo perfectamente.<br />
Él fue el jugador que empujó a Duna en <strong>El</strong> torneo<br />
<strong>de</strong> básquet soñado*. Por su culpa la expulsaron<br />
<strong>de</strong>l equipo durante la primera fase <strong>de</strong>l campeonato.<br />
—No sé qué has venido a hacer aquí. —Duna, con<br />
el cuidado <strong>de</strong> una madre que <strong>de</strong>ja a su bebé en la<br />
cuna, coloca sobre el banco <strong>de</strong>l rincón sus láminas<br />
<strong>de</strong> papel <strong>de</strong> arroz. Luego, hace crujir sus nudil<strong>los</strong>—.<br />
Pero será mejor que <strong>de</strong>saparezcas.<br />
—Nadie va a <strong>de</strong>saparecer —gruñe el coach mientras<br />
abre un paquete <strong>de</strong> bastoncil<strong>los</strong> para las orejas—.<br />
Os presento a Samu, nuestro base suplente.<br />
*Primera novela <strong>de</strong> la colección.<br />
28
SAMU<br />
Lo conocimos en el torneo <strong>de</strong> baloncesto<br />
que ganamos, el <strong>de</strong> Hamburguesas Vegetales<br />
Potra, «prueba una y querrás otra».<br />
Es la persona más nerviosa que<br />
he visto; en el momento menos<br />
pensado le da por hacer volteretas<br />
y cabriolas, la cabeza<br />
le va a mil y se le ocurren un<br />
montón <strong>de</strong> i<strong>de</strong>as alocadas.<br />
Como le gusta tanto hacer el<br />
payasote para ser el centro <strong>de</strong><br />
atención, lo han echado <strong>de</strong> todas<br />
las activida<strong>de</strong>s extraescolares. Sus<br />
padres le han pedido al coach Evans<br />
que lo acepte en nuestro equipo<br />
<strong>de</strong> baloncesto. Creen que, con el<br />
buen rollito que tenemos, se<br />
tranquilizará un poco.<br />
Lo que más le gusta a<br />
Samu es hacer bromas.<br />
Aunque a veces se pasa<br />
<strong>de</strong> la raya.<br />
29<br />
I<strong>de</strong>as alocadas<br />
Pelo rizado<br />
y pelirrojo<br />
Camiseta<br />
<strong>de</strong>l equipo rival<br />
Aparato<br />
para hacer<br />
bromas