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Hilda Yaneth Sotelo
aquello formado desde las dos, en los espejos, se podría
deshacer sin mayor dificultad, aventé al cesto de la pasión
terrenal, ahí donde he depositado las expresiones sexuales
que terminan por echar a perder las relaciones. Era un cesto
medio lleno, vi los recientes depósitos y estos últimos olían a
serpiente, dejaban la perfecta huella en las camas desechas,
el aroma penetrante de una gigante víbora que huye sin
enterarme de su partida. Dando paso al tantra, la meditación,
la paz al sofocar el ensordecedor ruido de las creaciones
humanas. Lucy parecía morir, el zurrón gozaba regresar.
Arline degustaba la letra que días después vomita
incontenible; confunde y acusa a Lucy de bruja, hechicera, la
pierde, la nubla, la piensa, la odia, quiere borrarla, se refugia
en el estudio de pintura, agrega el morado que pretendió
vencer a la angelical Lucy. Lucy abandona la cancha del
juego, se enrosca en el rosa de Los Chamulas, no comprende
ninguna de las acusaciones de Arline que ha roto su relación
de amor con José alegando que Lucy lo había traído creado
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de las fauces de Neptuno, aborrece a Lucy. Ahora Arline
ciega de ignorancia, arrebata las cualidades que ella misma
había puesto en Lucy, según ella, la destruye frente a sus
amigas pero en el fondo se está destruyendo a si misma, sin
remedio. Presa de una aberrante indiscreción cuenta en la
cancha su versión de los hechos, el amor momentáneo del 14
de febrero la enorgullece hasta la blasfemia.
Marisol despojada de La Negrita corre hacia el ácido que
avienta Arline lo aplaude. Manipula a su antojo, olvida las
virtudes. Lucy en los sueños exorcisa a Marisol hasta verla
montada en un elefante blanco.Lucy comprende que
empoderar a las mujeres es una tarea difícil, mostrar los
mundos ocultos a los ciegos y abrirles los ojos suele
convertirse en el viacursis de viacrusis. Escoge entre el
poder y la libertad. Lucy decide ser libre y al cabo de varios
meses de encierro, sufrimiento físico, sacrificio corporal, las
alas surgen. Se transforma en el dragón de blancura
exquisita que regresa a la serpiente cuando sea necesario. La
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