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Hilda Yaneth Sotelo
de leer, de saber, que huyen en su imaginación porque la
realidad le es cruel, dura, infame. Mujeres confundidas en la
ilusión de los ropajes, los perfumes, las máscaras esotéricas,
creyendo fielmente en la existencia de ángeles que lo
arreglan todo, todo. Mujeres de luna, desnudas al sol,
desnudas ante la nada transportando credos en el tren que
transita paralelo, el tren volado en la locura.
Creer o no creer que fui aquella Giovana de verde, cuyo
embarazo le olfateaba a millón, exitando a los gays; le
alteraba el sentido asqueando los desechos del cuerpo
humano. Amanecía en la ternura del encargo, transcurría en
el tedio de las labores sin limpieza, defendía a otras mujeres
que no permitían ser defendidas. Quise vivir en la rectitud,
pero perecí en el intento, el ambiente no se prestó. Arline
traía novedades del queso y el libro extraviado en la
montaña. El libro cercano, era redondo, blanco jugoso, lo
recuerdo. La simetría perfecta, la circunferencia completa,
muy completa. La textura del momento, genial e ideal.
Mujeres cósmicas
El índice, el dedo medio, jugaron a la experiencia, levantaron
la camisa blanca, llegaron a la cama a decir los secretos. La
ventana rodeada de cortinas rojas, el rojo mordido por el
pequeño perro, el hermano de Kamel apareció fiel, listo a ser
representado, a atestiguar el acto de la letra mía,
Nepomuceno, el que guarda los secretos, abundó la estancia,
dijo regresar después, no me importa, él no es mi santo. En
cambio tengo una Santa, Margarita es su nombre. La puerta
del baño estaba abierta, a propósito. La otra puerta obedeció
instantánea, obedecía conjurando a las mujeres
materializadas en una fotografía. Retratos del eterno sueño,
el sueño que despierta y ahora se abre. La puerta silenciosa
lenta en los ríos de las piernas enteradas de la verdad
expresada, ficticias a las razones suficientes, consideradas
reales. Así inicia la plática que ahora reposa descansado al
dormir. El secreto era.
Cenami reprendía a Giovanna, a mí, por haber llegado tarde
alguna noche, además la acusaba de haber ingerido una
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