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Hilda Yaneth Sotelo
Mujeres cósmicas
profesional.
El tiempo llegó y preparaba sus maletas hacia la frontera,
Ramón recibía la noticia de que iba a ser trasladado a Europa
los próximos meses, las cartas estaban en el aire, o le
proponía matrimonio o se olvidaba de ella. Ajena a todo lo
que su pretendiente gestaba en sus adentros, llegó a El Paso,
Tx se instaló unos días en la casa de su tío materno. En unas
cuantas horas Ramón llega al aeropuerto de la ciudad, había
pedido prestada una avioneta para seguirla, compró un ramo
de frescas rosas y la llamó desde la pista del aeropuerto,
envió un taxi a recogerla. Diamante intrigada pensando que
todo era una broma, accedió. Una vez dentro de la avioneta,
él le propuso matrimonio después de un corto noviazgo . .
Pues que te puedo decir, mira que seguirme hasta acá en
avioneta y todo, que bárbaro, sí, claro que sí me caso contigo
. Ramón fue el hombre más feliz, arreglaron el compromiso
poniendo de testigos a los familiares de Diamante, unos días
más tarde ya como esposos llegarían al piso ocho de un
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edificio cerca de Barajas. Efectivamente, Diamante estudió
su maestría, armaron tremenda boda religiosa donde los
padres de Ramón le daban la bienvenida a Diamante
incorporándola como una más de sus hijas. Juntos han ido de
país en país viajando a placer de la carrera profesional de
Ramón, ella ha olvidado que un día deseó estudiar, trabajar,
salir. Vivió en el entorno del bendito matrimonio pasando
buenas y malas. El día que Diamante y yo platicamos en el
pequeño departamento en al calle Casta, se quejó de haber
apolillado su intelecto so pretexto de apoyar a su marido en
la vida, trabajaba en una pequeña escuela privada en Madrid.
Se maestra no la llenaba, buscaba en vano algo afuera, en sus
amigas, algo que ella había olvidado colocarse adentro.
Añora la casa del pasado, la frontera, el cruce de los puentes
internos, la base de su nacimiento seguía de alguna forma
desprendida del pecho, no logró reconciliarse, mucho menos
ahora que las noticias fatales de la guerra en Ciudad Juárez
estaban a la orden del día. Tomás arribó a la reunión de las
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