Informe Anual de Comité Coordinador 2022-2023

Las cifras de fiscalización realizadas durante el periodo de este informe no dejan
lugar a dudas de que, en el Estado de México, los OIC previstos por la Ley de
Responsabilidades Administrativas del Estado de México, son un motor en la
cruzada contra la corrupción, pues estas unidades administrativas se encargan de
promover, evaluar y fortalecer el buen funcionamiento del control interno, en los
entes públicos y órganos autónomos estatales.
Teniendo, además, la facultad de
implementar los mecanismos internos
que prevengan actos u omisiones que
puedan constituir responsabilidades
administrativas; revisar el ingreso,
egreso, manejo, custodia y aplicación de
recursos públicos, según corresponda,
en el ámbito de su competencia. Para tal
efecto, las contralorías ejercen acciones
para evitar que la corrupción sea un
fenómeno frecuente que se origine
desde el interior de las instituciones.
La rendición de cuentas es una
herramienta para fortalecer la democracia
y credibilidad de la ciudadanía en
sus autoridades, siempre y cuando
éstas informen sobre sus decisiones y
justifiquen las acciones emprendidas
con el acompañamiento de mecanismos
de control y sanción. Por tanto, resulta
evidente que la transparencia y la
rendición de cuentas, se constituyen
en pilares imprescindibles de la gestión
pública, toda vez que, las decisiones que
se tomen deben estar al alcance de los
ciudadanos de una manera accesible,
clara y veraz, lo que coadyuva y favorece
a la constante vigilancia de la utilización
de los recursos públicos conforme a
la ley.
De igual forma, debe dejarse claro,
que la desconfianza en las instituciones
en los últimos años se ha generado
por el aumento en los actos de corrupción
y opacidad, sobre las actividades
que se realizan al interior de las
mismas, por ello, al mantener políticas
de fiscalización, indudablemente la
confianza de la ciudadanía en las
instituciones se recuperará.
274
2022-2023