EL LIBRO DE LOS SUEÑOS MAGICOS PDF
Inspirado en el libro "EL PRINCIPITO" llega un libro cangado de magia y sueños, donde la protagonista nos enseñara el valor de la familia, la importancia de cuidar el planeta y sus recursos, el saber convivir en comunidad donde impere el respeto hacia los demas, un libro para leer en familia y por supuesto soñar sin limites.
Inspirado en el libro "EL PRINCIPITO" llega un libro cangado de magia y sueños, donde la protagonista nos enseñara el valor de la familia, la importancia de cuidar el planeta y sus recursos, el saber convivir en comunidad donde impere el respeto hacia los demas, un libro para leer en familia y por supuesto soñar sin limites.
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ARIA Y EL LIBRO DE LOS SUEÑOS MAGICOS
ILUSTRACIONES Y DIBUJOS: Maria del Valle Martinez © Derechos
Reservados.
Inspirado en el texto de Antoine de Saint-Exupéry “El Principito”,
libro de cabecera de toda una vida.
A mis nietos, de la vida y del corazón, Agostina, Camilo, Charlize y
Axel; a quienes les deseo que puedan encontrar en el camino que
están por recorrer, toda aquella magia que dentro de ellos existe.
“Todas las personas fueron alguna vez un niño, aunque pocas lo
recuerdan.”
Antoine de saint-Exupéry
PROLOGO
El Comienzo de la Magia
En algún lugar, en un rincón misterioso del mundo, existe un lugar
mágico conocido como Villa Soñadora. En este encantador
pueblo, la magia no es solo una ilusión, sino una realidad que fluye
a través de la vida cotidiana de sus habitantes. Los días
transcurren con la promesa de aventuras extraordinarias y los
sueños son hechos habituales para descubrir mundos
asombrosos.
En el corazón de Villa Soñadora se encuentra un libro único y
antiguo que responde al nombre de "El Libro de los Sueños
Mágicos". Este libro especial es la puerta de entrada a
dimensiones desconocidas, cada una de ellas se encuentran
repletas de maravillas y lecciones que solo pueden ser
descubiertas por aquellos con el corazón lleno de curiosidad y la
mente abierta a la magia.
La protagonista de esta historia es Aria, una joven intrépida y
curiosa que, un día, descubre el misterioso libro en la biblioteca
del pueblo. Aria se convierte en la guardiana de este tesoro
literario, y su vida se transforma para siempre. A través de sus
sueños, emprenderá un viaje inolvidable por mundos de ensueño
y descubrirá lecciones que cambiarán su vida y la de su
comunidad.
"El Libro de los Sueños Mágicos" no es solo un relato de aventuras
extraordinarias, sino también un recordatorio de que la magia
está en todas partes, lista para ser descubierta por aquellos que
crean en ella. A medida que acompañamos a Aria en su viaje,
descubriremos que la magia no solo reside en el mundo de la
imaginación, sino también en el mundo real, esperando a ser
abrazada por todos nosotros.
Así comienza nuestro viaje a través de las páginas de "El Libro de
los Sueños Mágicos", un viaje lleno de asombro, descubrimiento y
la magia que se encuentra en cada rincón de la vida. Prepárate
para sumergirte en un mundo donde los sueños se hacen realidad
y donde el asombro te aguarda en cada página.
Bienvenidos a Villa Soñadora y al mundo de los sueños mágicos.
El viaje acaba de comenzar.
VIAJE 1
El Descubrimiento y el primer sueño de Aria
Aria vivía en el tranquilo pueblo de Villa Soñadora, donde cada
noche las estrellas se asomaban tímidamente en el cielo. Era una
niña curiosa, con ojos llenos de sueños y un corazón rebosante de
imaginación. Desde su ventana, miraba el cielo estrellado y
soñaba con un mundo más allá de aquellas diminutas y lejanas
lucecitas que parpadeaban constantemente, y pensaba en algún
que otro mundo lleno de magia y aventuras.
Un día soleado, mientras exploraba un rincón olvidado de su casa,
Aria tropezó con un libro que había estado allí desde hacía mucho
tiempo, tal vez durante siglos. Era un libro grande, con una
cubierta de cuero desgastada que brillaba como si estuviera llena
de secretos. El título dorado en la portada decía: "El Libro de los
Sueños Mágicos".
Intrigada, Aria abrió el libro y se encontró con páginas llenas de
palabras y dibujos que parecían cobrar vida.
A medida que leía, se dio cuenta de que el libro tenía el poder de
llevarla a lugares que solo existían en sus sueños. Podía caminar
por bosques encantados, nadar en océanos de estrellas y volar
con alas de mariposa.
Pero lo más asombroso de todo es que Aria descubrió que podía
crear sus propios sueños en el libro.
Cerraba los ojos, visualizaba un mundo de magia y maravillas, y
al abrir el libro, ese mundo se extendía ante ella en todo su
esplendor.
El primer sueño de Aria fue un jardín mágico lleno de flores que
brillaban en colores que nunca había visto antes. Las mariposas
danzaban en el aire y los pájaros cantaban melodías
encantadoras. Aria se sentía como una princesa en su propio
cuento de hadas.
Pero lo más importante es que Aria aprendió que los sueños
podían ser compartidos. Enseguida fue a buscar a sus amigos de
Villa Soñadora, los llevo hasta su casa y abrió el libro delante de
ellos, y pronto todos estaban creando sus propios sueños mágicos
y explorando un mundo de posibilidades.
Así comenzó la aventura de Aria en "El Libro de los Sueños
Mágicos", donde cada página era un nuevo capítulo en su
viaje hacia secretos insospechados, hacia la amistad y la
imaginación sin límites.
VIAJE 2
El Jardín de las Luciérnagas
Aria pasaba horas explorando "El Libro de los Sueños Mágicos",
descubriendo sus maravillas página tras página. Después de su
primer sueño en el jardín mágico, se emocionaba cada noche al
imaginar qué aventura le depararía el libro más adelante.
Una noche, mientras el reloj daba las doce campanadas de
medianoche, Aria decidió abrir el libro de nuevo. Esta vez, su
mente estaba llena con la idea de un lugar mágico lleno de
luciérnagas. Cerró los ojos y susurró: "Un jardín lleno de
luciérnagas brillantes, por favor".
Cuando abrió el libro, fue transportada a un mundo maravilloso
que superó todas sus expectativas. Se encontró en medio de un
jardín nocturno donde miles de luciérnagas llenaban el aire con su
luz parpadeante. Las luciérnagas danzaban con movimientos
asombrosos, como estrellas fugaces atrapadas en la Tierra.
Aria rió de alegría mientras las luciérnagas la rodeaban con su luz
titilante. Parecían guiarla a través del jardín, revelando secretos y
tesoros ocultos bajo la luz de la luna.
Al final del jardín, Aria encontró una fuente de agua cristalina que
reflejaba las estrellas en su superficie. Se arrodilló junto a la
fuente y vio cómo las luciérnagas se sumergían en el agua,
creando destellos mágicos que iluminaban todo el jardín.
Aria pasó horas explorando el Jardín de las Luciérnagas,
maravillándose ante la belleza y la magia que la rodeaban. Sabía
que este lugar especial en el libro era un regalo que podía
compartir con sus amigos y con todos los habitantes de Villa
Soñadora.
Mientras Aria regresaba a su propio mundo, sintió una profunda
gratitud por el libro que le había permitido vivir estas maravillosas
aventuras. Sabía que el Libro de los Sueños Mágicos tenía mucho
más que ofrecer, y estaba emocionada por todas las historias que
aún estaban por descubrir.
VIAJE 3
El paseo Submarino
Aria siguió explorando las maravillas del "Libro de los Sueños
Mágicos". Después de su aventura en el Jardín de las Luciérnagas,
se dio cuenta de que cada sueño era una oportunidad para vivir
experiencias únicas y emocionantes.
Una tarde, mientras el sol se ponía en Villa Soñadora, Aria decidió
abrir el libro una vez más. Esta vez, su mente estaba puesta a
explorar las profundidades del océano. Cerró los ojos y susurró:
"Un viaje submarino lleno de criaturas mágicas, por favor".
Cuando abrió el libro, se encontró en el fondo del océano, rodeado
de aguas cristalinas y corales de colores brillantes. Aria llevaba un
traje especial para ser utilizado en las profundidades el cual le
permitiría respirar bajo el agua, su corazón latía de emoción
mientras nadaba entre las maravillas de aquel océano.
Criaturas marinas de todas las formas y tamaños la rodeaban:
peces de colores brillantes, tortugas gigantes y pulpos que
cambiaban de color. Un tiburón paso a su lado y la saludo
moviendo sus aletas mientras que un pez espada hacia lo mismo
aunque le costaba hacerlo ya que aquella boca puntuda
molestaba bastante, un cangrejo abría y cerraba sus patas en
señal de bienvenida mientras una ostra hacia lo mismo a su paso
y le entregaba como regalo de bienvenida una hermosa perla
blanca, Aria se maravillaba con cada encuentro y se sentía parte
del mundo submarino.
Mientras exploraba más el fondo, Aria descubrió una ciudad
submarina construida en las ruinas de un antiguo templo. Las
casas estaban hechas de musgo y algas, y los habitantes eran
peces con la capacidad de hablar y contar historias sorprendentes
de los secretos del aquel hogar llamado océano.
Uno de los habitantes, un delfín sabio llamado Finley, la llevó a un
arrecife de coral que brillaba en la oscuridad. Allí, Aria y Finley
observaron estrellas de mar que brillaban como constelaciones y
medusas que creaban un espectáculo de luces hipnotizante.
Aria se dio cuenta de que este sueño era una oportunidad única
para explorar un mundo desconocido y para aprender sobre la
importancia de cuidar el océano y a sus habitantes. Al final de su
viaje submarino, Aria regresó a Villa Soñadora con un profundo
respeto por los océanos y una promesa en su corazón de
protegerlos. Sabía que el "Libro de los Sueños Mágicos" le había
enseñado no solo a soñar, sino también a ser una guardiana de
los tesoros de la naturaleza, en este caso pudo comprender la
importancia del agua en la vida del ser humano.
VIAJE 4
El Bosque de los Susurros
Aria había experimentado innumerables aventuras mágicas a
través del "Libro de los Sueños Mágicos", y cada sueño la había
llenado de asombro y sabiduría. Pero esta vez, Aria sintió que el
libro la guiaba hacia algo completamente diferente.
Una tarde, mientras observaba el sol ponerse detrás de las
colinas de Villa Soñadora, decidió abrir el libro una vez más. Esta
vez, su mente estaba llena con la idea de explorar un bosque
misterioso lleno de susurros secretos. Cerró los ojos y en voz baja
murmuro: "Un bosque de susurros, por favor".
Cuando abrió el libro, se encontró en medio de un bosque
enigmático, donde los árboles parecían susurrar secretos
ancestrales. Las hojas crujían bajo sus pies mientras avanzaba
por un sendero cubierto de hojas secas acumuladas con el del
tiempo. Los rayos del sol se filtraban a través de las ramas,
creando patrones de luz y sombra en el suelo.
Aria sintió que el bosque estaba vivo, que cada árbol y criatura
tenía una historia que contar. Se detuvo junto a un arroyo y
escuchó el suave murmullo del agua mientras las piedras la
acariciaban con cuidado. Siguió caminando y encontró una
puerta tallada en el tronco de un árbol antiguo. La puerta se
abrió lentamente, revelando un pasaje oscuro y misterioso.
Aria entró con cautela y se encontró en un claro del bosque,
donde una una gran cantidad de criaturas mágicas se había
reunido alrededor de una fogata. Había hadas que danzaban en
el aire, duendes que compartían historias y una gran lechuza
sábia observando todo con ojos brillantes.
La lechuza se acercó a Aria y le habló en voz baja, revelando los
secretos más profundos del bosque y hasta le dijo su nombre:
Petra, Aria aprendió sobre la importancia de la naturaleza, la
conexión entre todos los seres vivos y la necesidad de proteger
los bosques y los encantos que poseen, le agradeció a Petra
sobre todo por tenerla como una nueva amiga, alguien más que
había conocido gracias al libro.
Al final de su aventura en el Bosque de los Susurros, Aria regresó
a Villa Soñadora con su corazón lleno de gratitud y respeto por la
naturaleza. Sabía que cada sueño en el "Libro de los Sueños
Mágicos" la guiaba hacia lecciones valiosas y experiencias que
iban transformando su alma.
VIAJE 5
El Castillo de las Estrellas
Aria seguía fascinada por las aventuras que le esperaban en el
"Libro de los Sueños Mágicos". Después de explorar el Bosque de
los Susurros, se dio cuenta de que cada sueño era una
oportunidad para aprender y crecer, tanto en conocimiento
como en bondad.
Una noche, mientras observaba como siempre las estrellas
desde su ventana, Aria decidió abrir el libro una vez más. Esta
vez, su mente estaba con la idea de visitar un castillo mágico en
el cielo, donde las estrellas fueran algo así como miles tesoros
brillantes. Cerró los ojos por temor a que el libro se cansase
susurró: "Un castillo de estrellas, por favor".
Cuando abrió el libro, se encontró flotando en el cielo, rodeado
de estrellas que centelleaban como diamantes en todas
direcciones. Debajo de sus pies, había un camino de nubes que la
llevaba hacia un castillo majestuoso que parecía haber sido
construido en el propio firmamento.
Aria caminó por el camino de nubes con pasos ligeros y llegó al
Castillo de las Estrellas. Sus paredes estaban hechas de luz y sus
torres se alzaban hacia el infinito. El castillo estaba lleno de
habitaciones mágicas, cada una decorada con las constelaciones
y ventanas que ofrecían hermosas vistas panorámicas del
universo.
En una de las habitaciones, Aria conoció a Estelar, el guardián de
las estrellas. Estelar era una figura radiante con una capa blanca
y ojos que brillaban como soles. Le explicó a Aria que las estrellas
eran las historias de personas que habían vivido en la Tierra y
que habían ascendido al cielo para convertirse en ellas siempre y
cuando aquellas historias hayan sido escritas con el corazón y
siempre para que otros aprendan.
Aria pasó un tiempo explorando el castillo y escuchando las
historias de las estrellas. Cada una tenía su propia historia única
y lecciones de vida que compartir. Aria se sintió inspirada por el
amor y la conexión que existían entre todas ellas en aquel cielo.
Al final de su visita al Castillo de las Estrellas, Aria regresó a Villa
Soñadora con una sensación de asombro por el universo y un
profundo respeto por la vida en la Tierra. Sabía que cada estrella
en el cielo era una chispa de magia y que, al igual que las
estrellas, cada persona tenía su propia historia especial que
contar.
VIAJE 6
La Ciudad de las Canciones
Aria continuó explorando las maravillas del "Libro de los Sueños
Mágicos". Después de visitar el Castillo de las Estrellas, sus
sueños se volvieron aún más audaces y llenos de sorpresas.
Una tarde, mientras el viento en forma de leve brisa produciendo
sonidos parecidos a melodías que inundaba al pueblo de Villa
Soñadora, Aria decidió abrir el libro una vez más. Una vez más,
su mente estaba pensando en una nueva idea, la de explorar una
ciudad donde la música llenara el aire y cada casa tuviera una
canción propia. Cerró los ojos y repitió: "Una ciudad de
canciones, por favor".
Cuando abrió el libro, se encontró en el corazón de la Ciudad de
las Canciones. Las calles estaban pavimentadas con partituras y
las casas estaban decoradas con instrumentos musicales que
tocaban melodías armoniosas por sí solos. En cada esquina,
músicos callejeros creaban sinfonías improvisadas que llenaban
el aire de alegría y emoción.
Aria se unió a la diversión, cantando y bailando con los
habitantes de la ciudad. Aprendió que cada persona en la Ciudad
de las Canciones tenía una canción única en su corazón y que la
música era la forma en que se comunicaban y expresaban sus
emociones.
En una plaza central, Aria conoció a una niña llamada Melodía,
cuya voz tenía el poder de curar y traer alegría a todos los que la
escuchaban. Melodía la llevó a una biblioteca mágica donde las
palabras eran notas musicales y los libros eran partituras que
cobraban vida cuando se abrían.
Juntas, Aria y Melodía descubrieron una canción olvidada que
había sido enterrada en las páginas de un antiguo libro. Al
cantarla, devolvieron la alegría a una parte de la ciudad que
había estado silenciosa durante mucho tiempo.
Al final de su día en la Ciudad de las Canciones, Aria regresó a
Villa Soñadora con una canción en su corazón y una comprensión
más profunda del poder de la música para conectar a las
personas y sanar sus almas. Sabía que la música era un regalo
mágico que compartiría a partir de allí con su pueblo y con el
mundo.
VIAJE 7
El Reino de los Reflejos
Aria seguía explorando los mundos mágicos que el "Libro de los
Sueños Mágicos" tenía para ofrecer. Después de su emocionante
visita a la Ciudad de las Canciones, se sintió más conectada que
nunca con la magia que había dentro de ella.
Una noche, mientras miraba el cielo estrellado se le presentaba
como regalo, decidió abrir el libro nuevamente. Esta vez, su
mente estaba llena con la idea de un reino donde todo estaría
hecho de reflejos y espejismos. Cerró los ojos y susurró: "Un
reino de reflejos, por favor".
Cuando abrió el libro, se encontró en un lugar extraordinario
donde cada objeto y criatura era un reflejo mágico de algo más.
Los árboles eran reflejos dorados que parpadeaban en el aire, los
ríos eran corrientes de luz que fluían a través del paisaje y los
animales eran criaturas etéreas que cambiaban de forma y color
con cada parpadeo.
Aria caminó por calles empedradas que brillaban como
diamantes y se encontró con los habitantes del Reino de los
Reflejos. Eran seres amigables cuyas personalidades y
apariencias cambiaban constantemente, reflejando sus
emociones y pensamientos en tiempo real.
Uno de los habitantes, un hada llamada Prisma, le mostró a Aria
un lago mágico donde los reflejos eran especialmente intensos.
Aria se inclinó sobre el agua y vio su propio reflejo bailando en la
superficie como un sueño.
Prisma le explicó que en el Reino de los Reflejos, la clave para
entender a los demás y a uno mismo era la empatía y la
comprensión. Aria aprendió a observar los cambios en los
reflejos de los demás para comprender sus sentimientos y
pensamientos.
A medida que exploraba más, descubrió una puerta que la llevó
a un jardín de espejos encantados. Cada espejo mostraba una
versión diferente de su propio futuro, así, Aria entendió que las
elecciones que hacemos en la vida pueden crear reflejos únicos y
hermosos.
Al final de su aventura en el Reino de los Reflejos, Aria regresó a
Villa Soñadora con un profundo sentido de afecto y comprensión
hacia los demás. Sabía que, al igual que en el Reino de los
Reflejos, cada persona tenía su propia historia y que a través del
afecto podía ayudar a crear reflejos de amor y amistad en el
mundo que la rodeaba.
VIAJE 8
El Bosque de las Memorias
Aria seguía maravillada por las aventuras que le esperaban en el
"Libro de los Sueños Mágicos". Cada sueño la había enriquecido
y enseñado lecciones valiosas, y estaba emocionada por lo que el
libro le tendría reservado a continuación.
En una tarde soleada, mientras escuchaba el crujir de las hojas
en Villa Soñadora, decidió abrir el libro una vez más. Esta vez,
pensó en la idea de explorar un bosque donde las memorias
cobraran vida y los recuerdos se convertían en caminos. Cerró los
ojos y volvió a susurrar: "Un bosque de memorias, por favor".
Cuando abrió el libro, se encontró en un bosque encantado
donde los árboles eran gigantescos libros abiertos y las hojas
eran páginas llenas de palabras y dibujos. Cada árbol
representaba una memoria y cada sendero llevaba a un
momento del pasado.
Aria caminó con cuidado por el bosque, tocando los árboles y
reviviendo momentos especiales de su propia vida. Vio escenas
de su infancia, momentos de risas con amigos y momentos de
aprendizaje y descubrimiento. Cada vez que tocaba un árbol,
podía experimentar nuevamente la emoción y el significado de
esa parte de su memoria.
Mientras exploraba más, Aria encontró un árbol cuyas hojas
eran páginas en blanco. Comprendió que este árbol
representaba el futuro y que podía dejar su propia marca en él.
Buscó un lápiz, aquí aclaro, ya que había olvidarlo comentarlo,
que Aria llevaba consigo siempre un pequeño bolso en cada uno
de sus viajes, y comenzó a escribir sus sueños y deseos en las
esas hojas en blanco, sintiendo la responsabilidad y el poder de
dar forma a su propio destino, Aria estaba emocionada.
En un claro del bosque, Aria conoció a un guardián de la
memoria llamado Memo, un anciano sabio con anteojos que le
explicó la importancia de valorar las memorias y crear nuevas.
Aria comprendió que las memorias no solo eran un tesoro
personal, sino también una forma de conectarse con los demás a
través de historias compartidas.
Al final de su día en el Bosque de las Memorias, Aria regresó a
Villa Soñadora con una apreciación renovada por el poder de los
recuerdos y la importancia de crear nuevos momentos especiales
en la vida. Sabía que el pasado y el futuro estaban entrelazados
y que cada día era una oportunidad para llenar su vida de
experiencias valiosas.
VIAJE 9
La Torre de los Suspiros
Aria continuó su viaje a través del "Libro de los Sueños Mágicos",
ansiosa por descubrir qué maravillas le depararían en su
próximo sueño. Después de explorar el Bosque de las Memorias,
había aprendido a valorar más y más cada momento de la vida.
Una noche, mientras las estrellas se alineaban en el cielo, Aria
decidió abrir el libro una vez más. Esta vez, sentía el deseo de
explorar una torre misteriosa donde los suspiros se convertirían
en canciones de esperanza. Cerró los ojos y susurró: "Una torre
de suspiros, por favor".
Cuando abrió el libro, se encontró frente a una torre que se
alzaba hacia el cielo como un faro de luz. La Torre de los Suspiros
era un lugar mágico donde las personas compartían sus deseos y
suspiros más profundos, y estos se convertían en canciones que
llenaban el aire con esperanza y alegría.
Aria subió por la escalera en espiral que llevaba a la cima de la
torre. A medida que avanzaba, escuchaba suspiros de personas
de todo el mundo que compartían sus sueños y deseos. Cada
suspiro se convertía en una nota musical que se unía a una
sinfonía celestial que resonaba en la torre.
En la cima de la torre, Aria conoció a un armonista llamado Siro,
cuya voz podía transformar los suspiros en las canciones más
hermosas. Juntos, compartieron sus propios deseos y suspiros, y
vieron cómo se convertían en música que llenaba el cielo
nocturno.
Aria comprendió que la Torre de los Suspiros era un lugar donde
las personas encontraban consuelo y esperanza al compartir sus
cargas y anhelos más profundos. Aprendió que a través de la
música y la conexión con los demás, podía ayudar a transformar
sus propios deseos en realidad.
Al final de su experiencia en la Torre de los Suspiros, Aria regresó
a Villa Soñadora con un corazón latiendo fuerte y una nueva
comprensión de la importancia de compartir y expresar los
deseos y las aspiraciones. Sabía que cada suspiro era una
oportunidad para crear belleza y esperanza en el mundo.
VIAJE 10
El Mar de las Estrellas Perdidas
Aria seguía explorando las maravillas que el "Libro de los Sueños
Mágicos" tenía para ofrecer, y cada sueño la acercaba más a la
magia que la rodeaba. Después de visitar la Torre de los Suspiros
y en una noche por demás estrellada, cuando la luna iluminaba
Villa Soñadora, Aria decidió abrir el libro una vez más. Esta vez,
su mente estaba llena de la idea de explorar un mar donde las
estrellas se perdían en las profundidades del mar. Cerró los ojos
y susurró: "Un mar de estrellas perdidas, por favor".
Cuando abrió el libro, se encontró en un mundo completamente
diferente, en medio de un vasto mar donde las estrellas brillaban
bajo la superficie del agua. Eran estrellas de todos los tamaños y
colores, como tesoros únicos en el fondo del mar.
Aria se sumergió en el Mar de las Estrellas Perdidas, rodeada de
criaturas marinas que nadaban junto a las estrellas. Descubrió
que cada estrella era un deseo o un sueño que alguien había
compartido con el mar, y que estas estrellas se habían perdido a
lo largo del tiempo.
Mientras exploraba, Aria encontró un mejillón mágico que
emitía una música encantadora. Al tocarlo, pudo escuchar los
deseos y los suspiros de las personas que habían compartido sus
sueños con el mar. Cada melodía era única y emotiva, y Aria se
dio cuenta de que el mar guardaba los anhelos y secretos más
profundos de la humanidad.
En ese mundo donde el agua dominaba todo, Aria conoció a
Marina, una sirena sábia que cuidaba de las estrellas perdidas.
Marina le explicó que cada estrella representaba un deseo y que
el mar se encargaba de cuidar de ellos hasta que estuvieran
listos para cumplirse.
Aria comprendió que el Mar de las Estrellas Perdidas era un
lugar de esperanza y conexión, donde los sueños de las personas
se convertían en parte de un universo más grande. Aprendió que,
al compartir sus sueños y deseos, podía contribuir a la belleza y
la magia del mundo.
Al final de su experiencia en el Mar de las Estrellas Perdidas, Aria
regresó a Villa Soñadora con un corazón lleno de gratitud por la
capacidad de soñar y una profunda comprensión de la
importancia de mantener viva la esperanza en el corazón de las
personas.
VIAJE 11
El Jardín de los Recuerdos
Aria continuó su travesía a través del "Libro de los Sueños
Mágicos", emocionada por lo que el libro le tendría preparado a
continuación. Después de visitar el Mar de las Estrellas Perdidas,
y de aprender que los sueños y deseos eran tesoros que debían
ser compartidos, una noche, mientras las luciérnagas iluminaban
Villa Soñadora, Aria decidió abrir el libro una vez más. Esta vez,
desearía explorar un jardín donde los recuerdos crecieran como
hermosas flores. Cerró los ojos y susurró: "Un jardín de
recuerdos, por favor".
Cuando abrió el libro, se encontró en un lugar mágico y
tranquilo: el Jardín de los Recuerdos. Las flores de todos los
colores llenaban el aire con fragancias dulces, y cada una
representaba un recuerdo preciado. Aria podía ver los recuerdos
flotando en el aire como pequeñas mariposas de colores.
Aria caminó por los senderos del jardín, tocando las flores y
reviviendo momentos especiales de su vida. Encontró recuerdos
de su infancia, correrías con sus hermanos, momentos de amor y
amistad, sus días en el colegio y aquellos paseos por la plaza,
todos ellos momentos de aprendizaje y crecimiento. Cada flor
tenía un aroma único que evocaba emociones y sonrisas.
Mientras exploraba, Aria conoció a Remi, el guardián del jardín,
un anciano amable con ojos brillantes. Remi le explicó que el
Jardín de los Recuerdos era un lugar donde los recuerdos se
convertían en flores para ser compartidos con otros. Aria
aprendió que recordar y compartir recuerdos con los demás
fortalecía los lazos y traía alegría.
En un rincón del jardín, Aria encontró una fuente de agua
cristalina que reflejaba los recuerdos como destellos de luz. Al
sumergir las manos en el agua, pudo revivir sus propios
recuerdos y comprender la importancia de mantener vivas las
experiencias especiales.
Al final de su tiempo en el Jardín de los Recuerdos, Aria regresó a
Villa Soñadora con un corazón lleno de gratitud por cada
experiencia y recuerdo en su vida. Sabía que los recuerdos eran
tesoros que debían ser compartidos y que a través de ellos podía
conectarse con los demás de una manera única.
VIAJE 12
El Reencuentro con los Sueños Pasados
Aria había compartido sus experiencias mágicas con la
comunidad de Villa Soñadora, inspirando a todos a creer en la
magia de los sueños. Aunque había explorado varios sueños
extraordinarios, sintió que aún había un último sueño por
descubrir en el "Libro de los Sueños Mágicos".
En una noche estrellada, mientras se encontraba en la misma
plaza donde había experimentado su último sueño de la
comunidad, Aria decidió abrir el libro una vez más. Esta vez, su
mente estaba llena de la idea de reencontrarse con los sueños
que había vivido en el pasado. Cerró los ojos y susurró: "Un
reencuentro con los sueños pasados, por favor".
Cuando abrió el libro, se encontró en un lugar especial: un
espacio donde podía revivir y recordar cada uno de los sueños
que había experimentado a lo largo de su viaje. Se encontraba
rodeado de fragmentos de sus sueños anteriores, como
pequeños destellos de magia.
Aria caminó a través de estos fragmentos de sueños y pudo
revivir cada uno de ellos, sintiendo nuevamente las emociones,
las lecciones y la magia que habían estado presentes en cada
aventura. Cada sueño que se desplegaba ante ella era una
página del libro.
Mientras exploraba sus sueños pasados, Aria se dio cuenta de
cómo había crecido y cambiado a lo largo de su viaje. Había
aprendido a ser más afectiva, a valorar la comunidad, a abrazar
la esperanza y a apreciar la belleza de la vida en cada uno de sus
aspectos.
Al final de su reencuentro con los sueños pasados, Aria regresó a
Villa Soñadora con un corazón lleno de gratitud por su
extraordinario viaje a través del "Libro de los Sueños Mágicos".
Sabía que los sueños eran tesoros que podía tener para siempre
y que la magia de sus experiencias perduraría en su corazón.
Aria compartió esta última aventura con su comunidad,
recordándoles que la magia de los sueños no solo estaba en el
futuro, sino también en el pasado y en cada momento presente.
Juntos, celebren la maravilla de los sueños y la magia que podía
encontrarse en cada experiencia de la vida.
Y así, Aria continuó su vida en Villa Soñadora, llevando consigo
la magia de los sueños y compartiendo su luz con todos los que
la rodeaban.
VIAJE 13
El sueño de la magia compartida
Aria había explorado trece sueños extraordinarios en el "Libro de
los Sueños Mágicos", y aunque había vivido innumerables
aventuras y lecciones, sentía que todavía había más magia por
descubrir, no quería que se terminara aquella experiencia fue
entonces que en una noche llena de estrellas cerró los ojos y
susurró: "Un sueño de magia compartido, por favor".
Cuando abrió el libro, se encontró en un lugar asombroso: un
reino donde la magia fluía libremente y todos los habitantes
compartían sus habilidades mágicas con alegría. Las calles
estaban iluminadas por destellos de luz, y las risas y el asombro
llenaban el aire.
Aria se unió a la celebración mágica y pronto descubrió que
tenía un don especial: la capacidad de crear mariposas de luz
que danzaban en el cielo. Sus mariposas de luz traían alegría y
asombro a todos los que las veían.
A medida que exploraba, Aria conoció a personas con una
amplia variedad de habilidades mágicas. Algunos podían
cambiar la forma de las cosas, otros podían traer objetos de la
nada, y otros tenían el poder de curar con solo tocar al enfermo.
Juntos, compartieron sus habilidades y crearon espectáculos
mágicos impresionantes.
En el centro de este reino mágico, Aria se encontró con un
anciano sabio llamado Maestro Magus, quien le explicó que la
verdadera magia radicaba en compartir y celebrar los dones
mágicos con los demás. Aria entendió que, al compartir su
propia magia y apreciar la de los demás, podía crear una red de
apoyo y amistad.
Aria también descubrió que esta magia compartida tenía el
poder de transformar el mundo real de Villa Soñadora. Volvió a
su comunidad y compartió las lecciones de su decimocuarto
sueño, inspirando a los habitantes a abrazar sus propias
habilidades y compartir su magia única con los demás.
Con el tiempo, Villa Soñadora se convirtió en un lugar donde la
magia y la creatividad florecían en cada rincón, y todos se
apoyaban mutuamente en sus sueños y aspiraciones. La
comunidad se convirtió en una red mágica de amistad y apoyo,
donde cada persona podía compartir su propia magia y hacer
que los sueños se hicieran realidad.
Aria continuó su vida en Villa Soñadora, sabiendo que la magia
de su decimocuarto sueño había enriquecido no solo su propio
viaje, sino también la vida de toda la comunidad.
VIAJE 14
El Sueño de la Transformación
Aria había vivido innumerables aventuras aprendiendo las
lecciones gracias al "Libro de los Sueños Mágicos". Sin embargo,
sentía que aún había más por descubrir en su viaje. En una
noche llena de misterio y anticipación, decidió abrir el libro una
vez más. Esta vez, pensó en explorar un sueño donde la magia de
la transformación fuera de la protagonista. Cerró los ojos y
susurró: "Un sueño de transformación, por favor".
Cuando abrió el libro, se encontró en un lugar fascinante: un
reino donde la magia de la transformación estaba en todas
partes. Los árboles cambiaban de colores como un arco iris, los
animales podían adoptar formas diferentes a voluntad, y las
flores se transformaban en fuentes de agua con solo tocarlas.
Aria se maravilló ante la magia de la transformación y pronto se
dio cuenta de que ella misma tenía un don especial: la capacidad
de transformar sus sueños en realidad. Con cada pensamiento y
deseo, podía dar forma a su entorno y a sí misma de maneras
asombrosas.
Mientras exploraba este reino de transformación, Aria conoció a
otros habitantes con habilidades igualmente sorprendentes.
Había un hada que podía cambiar su tamaño a voluntad, un
mago que convertía piedras en mariposas, y un lobo que se
transformaba en un delicado colibrí. Juntos, compartieron sus
habilidades y crearon un espectáculo de transformaciones
mágicas que dejó a todos boquiabiertos.
En el corazón de este reino, Aria encontró a Triana, la Anciana de
la Transformación, una sabia figura que le explicó que la
verdadera magia de la transformación residía en la capacidad de
cambiar y crecer. Aria comprendió que, a través de la
transformación, podía convertirse en la mejor versión de sí
misma y ayudar a los demás a hacer lo mismo.
De regreso en Villa Soñadora, Aria compartió las lecciones de su
decimoquinto sueño con su comunidad. Inspiró a los habitantes
a abrazar la magia de la transformación, a cambiar y crecer en
sus propias vidas, y a ayudarse mutuamente a convertirse en las
mejores versiones de sí mismos. Con el tiempo, Villa Soñadora se
convirtió en un lugar donde la magia de la transformación
estaba presente en cada rincón, y todos se apoyaban
mutuamente en su búsqueda de crecimiento personal.
La comunidad se transformó en un lugar donde los sueños se
hacían realidad y donde cada persona florecía en su propio
camino de transformación.
VIAJE 15
LA LLUVIA SALVADORA
Caía la tarde en Villa Soñadora mientras algo curioso estaba
sucediendo, es que hacía mucho tiempo que no llovía, por ese
motivo, algunos sembradíos comenzaban a secarse y con ello
crecía la preocupación entre sus habitantes, este fue el motivo
por el cual Aria, decidió recurrir una vez más al “libro mágico de
los sueños perdidos” y frente al mismo le pidió el que sería uno
de los deseos más importantes ya que se trataba de uno en
donde debería encontrar la manera de ayudar a su gente,
cerrando los ojos nuevamente pidió entonces su deseo: “un cielo
lleno de nubes por favor,”.
Al abrir el libro se encontró como flotando en un vasto campo
blanco, rodeado de ángeles que frotándose sus alas, iban de un
lado a otro como si se tratase de algún tipo de tarea, no existía
otro color, solo ese blanco perfecto que contrastaba con un
celeste sobre sus cabezas, Aria quedo fascinada con el silencio
que allí había, ni el batir de cientos de alas se escuchaba, Aria
comenzó a caminar hacia un lado elegido al azar ya que solo
había un horizonte infinito.
Al poco de andar se presenta Nubelius, señor y amo de aquel
paraíso blanco,-” Hola pequeña cómo te llamas?” -pregunta
mirándola a esos ojos grandes y luminosos, -“Soy Aria y vengo
en busca de ayuda”,- responde la pequeña…
-“que ayuda necesitas?” vuelve a preguntar Nubelius, “necesito
que llueva en mi pueblo ,se está secando la cosecha, los
animales tienen sed y pronto las plantas darán sus primeras
flores pero sin agua se marchitaran”
-“ tranquila, justamente le estaba diciendo al ángel encargado
de la lluvia, que había visto un lugar en donde debería de estar
verde y en cambio su color había palidecido, así que regresa
tranquila al lugar desde donde has venido y avísales que pronto
todo volverá a ser como antes, abra agua suficiente para todos”
concluyo Nubelius en su respuesta.
El rostro de Aria se transformó de inmediato y una sonrisa
comenzó a visitarla, pero antes de regresar, quiso conocer un
poco más de aquel sitio donde no había otro color más que el
blanco, hasta los pájaros que revoloteaban tenían el mismo
color, notó también que aquellos ángeles estaban haciendo el
trabajo que les había encomendado Nubelius, deberían de reunir
muchas nubes justo arriba de Villa Soñadora ,fue entonces que
pensó en no molestarlos, pero antes de regresar tuvo un gran
pensamiento: “si todos trabajasen juntos en beneficio de una
comunidad, no solo harían algo útil y provechoso sino que
también ayudarían a otros pueblos, trabajar unidos es mucho
mejor que hacerlo por separado incluso solo haría falta un solo
jefe” y con esa idea regreso a Villa Soñadora.
Una vez allí reunió a todos en la plaza grande y les dio la gran
noticia de que pronto una gran lluvia le devolvería el color y la
vida a los campos y sembradíos, pero también les dijo sobre lo
de trabajar todos al mismo tiempo y ayudándose unos a otros,
pasado el momento, Aria estaba encantada de ver cómo
mientras se abrazaban y reían, comenzaban a marchar a sus
tierras mientras las primeras gotas de lluvia comenzaban a caer,
todos ellos después, comprendieron que el saber esperar
siempre tiene su recompensa.
EPILOGO
El Legado de los Sueños
Aria había completado su asombroso viaje a través del "Libro de
los Sueños Mágicos", habiendo vivido una vez sueños
extraordinarios que la habían transformado de muchas
maneras. Había aprendido lecciones valiosas sobre la empatía,
la esperanza, la comunidad y la magia que residen en el corazón
de cada persona. Juntos, comenzaron a construir un jardín
mágico donde las flores representaban los sueños compartidos
de todos.
Con el tiempo, Villa Soñadora se convirtió en un lugar donde la
magia de los sueños se entrelazaba con la vida cotidiana. La
comunidad celebraba festivales de música, exposiciones de arte
y noches de cuentos donde compartían sus propias historias de
sueños y aventuras.
El "Libro de los Sueños Mágicos" ocupó un lugar especial en la
biblioteca de Villa Soñadora, esperando a que las futuras
generaciones de niños curiosos lo exploren y vivieran sus propias
aventuras.
Aria, ahora una adulta, se convirtió en una consejera y guía para
los jóvenes, alentándolos a abrazar la magia de sus sueños y a
compartir su amor y conocimiento con el mundo. Su legado
perduró en la comunidad, recordándoles que la magia estaba en
todas partes, siempre que creyeran en ella.
Y así, en Villa Soñadora, la magia de los sueños continuó
brillando, recordando a todos que la aventura nunca termina
cuando creemos en lo extraordinario que vive en nuestro
interior.
FIN
PERSONAJES MAGICOS POR ORDEN DE APARICION:
Finley, el delfín.
Petra, la lechuza.
Estelar, el guardián de las estrellas.
Melodía, habitante de la ciudad de las canciones.
Prisma, el hada buena.
Memo, el anciano sabio.
Siro, el armonista.
Marina, la sirena.
Remi, el guardián del jardín.
Maestro Magus, el mago
Triana, la anciana de la transformación.
Nubelius, amo y señor de las nubes.
INDICE DE LOS VIAJES DE ARIA
VIAJE 1….EL DESCUBRIMIENTO Y EL PRIMER VIAJE
VIAJE 2… EL JARDIN DE LAS LUCIERNAGAS
VIAJE 3… EL PASEO SUBMARINO
VIAJE 4… EL BOSQUE DE LOS SUSURROS
VIAJE 5… EL CASTILLOS DE LAS ESTRELLAS
VIAJE 6… LA CIUDAD DE LA MUSICA
VIAJE 7… EL REINO DE LOS REFLEJOS
VIAJE 8… EL BOSQUE DE LAS MEMORIAS
VIAJE 9… LA TORRE DE LOS SUSPIROS
VIAJE 10… EL MAR DE LAS ESTRELLAS PERDIDAS
VIAJE 11… EL JARDIN DE LOS RECUERDOS
VIAJE 12… EL REENCUENTRO CON LOS SUEÑOS PASADOS
VIAJE 13… EL SUEÑO DE LA MAGIA COMPARTIDA
VIAJE 14… EL SUEÑO DE LA TRANSFORMACION
VIAJE 15… LA LLUVIA SALVADORA