La tormenta del siglo - Stephen King

ylliasbell777
from ylliasbell777 More from this publisher
11.05.2023 Views

podemos permitirle…SONNY (no sin amabilidad): Creo que ya hemos escu​chado tu opinión, Mike.Ahora siéntate, ¿de acuerdo ?Mike le mira con expresión de impotencia. No es estúpido y sabe muy bien hacia dóndesopla el viento.MIKE: Tenéis que pensaros bien esto, chicos. Tenéis que pensároslo muy bien.Desciende los peldaños y regresa junto a Molly. Coge la mano de su esposa. Ella le dejaretenerla unos instantes y luego la aparta.MOLLY: Quiero sentarme junto a Ralphie, Mike.Se levanta y recorre el pasillo central hasta donde los niños duermen en sus catres.Atraviesa el círculo de padres y desaparece sin mirar atrás.ROBBIE: ¿Algo más? ¿Algún otro quiere dar su opinión? Transcurren unosinstantes de silencio.URSULA (adelantándose): Que Dios nos ayude, pero démosle lo que quiere.Démosle lo que quiere y que siga su camino. No me preocupa mi pro​pia vida, pero lade los niños… incluso aunque le toque a mi Sally. Prefiero que viva junto a unhombre malo que… que muera, (mira alrede​dor, sollozando) Dios mío, MichaelAnderson, ¿es que no tienes corazón? ¡Son niños! ¡No podemos dejarle matar a unosniños!Vuelve junto a su hija. Mike, entretanto, está quedando aislado en el centro de uncírculo de miradas hostiles.ROBBIE (consultando el reloj): ¿Alguien más?Mike hace ademán de levantarse. Hatch le posa una mano en el brazo y presiona. Mikevuelve hacia él una mirada sorprendida e inquisitiva. Hatch niega levemente con la cabeza.,como si quisiera decir: «Déjalo; ya has hecho cuanto has podido.» Mike le aparta y vuelve alevantarse. En esta ocasión no utiliza el estrado, sino que se dirige a los isleños desde dondeestá.MIKE: No lo hagáis, por favor. La familia Anderson se remonta a 1735 aquí enwww.lectulandia.com - Página 408

Little Tall. Os lo pido como isleño y como padre de Ralphie Ander​son… no lohagáis. No accedáis a una cosa así. (pausa) Os estáis condenando.Mira alrededor con desesperación. Ninguno de ellos, ni siquiera su propia esposa, seatreve a mirarle a los ojos. Vuelve a reinar el silencio, quebrado tan sólo por el aullar delviento en el exterior y el tictac del reloj.MIKE: De acuerdo, propongo que la votación sea restringida.Dejemos votar a los padres, y sólo a los padres. Todos son residentes…LINDA ST. PIERRE: No, eso no es justo.Acaricia con cariño la frente de su hija dormida.LINDA ST. PIERRE: La he criado yo sola… oh, sí, con la ayuda de la gente de la isla,incluidos tú y tu mujer, Mike… pero sobre todo por mí misma. No debería tener quetomar una decisión como ésta yo sola. ¿Para qué sirve una comunidad si no es paraayudar a la gente cuando sucede algo terrible? ¿Cuando ninguna opción parece laadecuada?AND Y: Yo no habría sabido expresarlo mejor, Linda. MIKE: Pero…MUCHAS VOCES: Siéntate… Plantea ya la cuestión… ¡Vo​temos!ROBBIE: ¿Puede alguien pronunciarse en contra de la restricción de voto?Probablemente no sea par​lamentario, pero tenemos que seguir. Preferiría escucharlode uno de los progenitores.Siguen unos instantes de tenso silencio.MELINDA HATCHER: Propongo que todo el mundo vote.CARLA BRIGHT: Yo lo secundo.MIKE: Esto no es…ANGIE: ¡Cállate! Ya has dicho lo que tenías que decir, ahora cállate.ROBBIE: Se ha propuesto y secundado que se le permita votar a todo el mundo sientregar o no lo que pide al señor Linoge. ¿Los que estén a favor?Todas las manos se alzan a excepción de la de Mike. Advierte que Molly también halevantado la suya y que evita su mirada, y algo muere un poco dentro de él.www.lectulandia.com - Página 409

podemos permitirle…

SONNY (no sin amabilidad): Creo que ya hemos escu​chado tu opinión, Mike.

Ahora siéntate, ¿de acuerdo ?

Mike le mira con expresión de impotencia. No es estúpido y sabe muy bien hacia dónde

sopla el viento.

MIKE: Tenéis que pensaros bien esto, chicos. Tenéis que pensároslo muy bien.

Desciende los peldaños y regresa junto a Molly. Coge la mano de su esposa. Ella le deja

retenerla unos instantes y luego la aparta.

MOLLY: Quiero sentarme junto a Ralphie, Mike.

Se levanta y recorre el pasillo central hasta donde los niños duermen en sus catres.

Atraviesa el círculo de padres y desaparece sin mirar atrás.

ROBBIE: ¿Algo más? ¿Algún otro quiere dar su opinión? Transcurren unos

instantes de silencio.

URSULA (adelantándose): Que Dios nos ayude, pero démosle lo que quiere.

Démosle lo que quiere y que siga su camino. No me preocupa mi pro​pia vida, pero la

de los niños… incluso aunque le toque a mi Sally. Prefiero que viva junto a un

hombre malo que… que muera, (mira alrede​dor, sollozando) Dios mío, Michael

Anderson, ¿es que no tienes corazón? ¡Son niños! ¡No podemos dejarle matar a unos

niños!

Vuelve junto a su hija. Mike, entretanto, está quedando aislado en el centro de un

círculo de miradas hostiles.

ROBBIE (consultando el reloj): ¿Alguien más?

Mike hace ademán de levantarse. Hatch le posa una mano en el brazo y presiona. Mike

vuelve hacia él una mirada sorprendida e inquisitiva. Hatch niega levemente con la cabeza.,

como si quisiera decir: «Déjalo; ya has hecho cuanto has podido.» Mike le aparta y vuelve a

levantarse. En esta ocasión no utiliza el estrado, sino que se dirige a los isleños desde donde

está.

MIKE: No lo hagáis, por favor. La familia Anderson se remonta a 1735 aquí en

www.lectulandia.com - Página 408

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!