After - Anna Todd
habérmelo rizado como a ella le gusta, a modo de regalo de despedida.—Voy a ir metiendo tus maletas en el coche —ofrece Noah abriendo lapalma de la mano para que mi madre le dé las llaves.Me da un beso en la mejilla y desaparece de la habitación con el equipaje enla mano. Mi madre va detrás de él.Mi segundo intento de peinarme acaba con un resultado mejor que elprimero. Luego me paso el rodillo quitapelusas por el vestido gris por última vez.Cuando salgo y me aproximo al coche, cargado con mis cosas, las mariposasde mi estómago empiezan a revolotear, y me alivia pensar que nos esperan doshoras de viaje para conseguir que desaparezcan.No tengo ni idea de cómo será la universidad, y de repente la pregunta quesigue dominando mis pensamientos es: « ¿Haré amigos allí?» .
CAPÍTULO 2Ojalá pudiera decir que el ambiente familiar del centro de Washington me harelajado durante el trayecto, o que el sentido de la aventura ha ido apoderándosede mí a cada señal que indicaba que estábamos cada vez más cerca de laWashington Central. Pero la verdad es que me he pasado el viaje planificando yobsesionándome. Ni siquiera estoy segura de qué estaba diciendo Noah, pero séque estaba intentando darme ánimos y emocionado por mí.—¡Ya hemos llegado! —chilla mi madre cuando cruzamos el arco que daacceso al campus.En la realidad, la universidad es igual de magnífica que en los folletos y en lapágina web, y me quedo impresionada al instante al ver los elegantes edificios depiedra. Cientos de personas —padres que se despiden de sus hijos con besos yabrazos, grupos de estudiantes de primer curso ataviados de los pies a la cabezacon el uniforme de la WCU, y unos cuantos rezagados perdidos y confundidos—inundan el área. El tamaño del campus intimida, pero espero que al cabo de unaspocas semanas me sienta ya como en casa.Mi madre insiste en acompañarme a la charla de orientación para novatos.Consigue mantener una sonrisa en la cara durante las tres horas que dura lasesión, y Noah escucha con atención, igual que y o.—Me gustaría ver tu dormitorio antes de irnos —dice mi madre cuando todoha terminado—. Quiero asegurarme de que todo está correcto.Observa el viejo edificio con una mirada de desaprobación. Tiene lacostumbre de sacarle defectos a todo. Noah sonríe, para calmar el ambiente, ymi madre vuelve a animarse.—¡No me puedo creer que estés en la facultad! Mi única hija, estudianteuniversitaria, viviendo por su cuenta. No me lo puedo creer —gimotea mientrasse da unos toquecitos con un pañuelo para secarse las lágrimas sin arruinarse elmaquillaje.Noah nos sigue con mis maletas mientras recorremos el pasillo.—Es la B22…, estamos en el pasillo C —les digo. Por suerte, veo una « B»enorme pintada en la pared—. Es por aquí —señalo al tiempo que mi madreempieza a volverse hacia el lado contrario.Me alegro de haber traído sólo unas cuantas prendas de ropa, una manta yalgunos de mis libros favoritos. Así, Noah no tiene que cargar demasiado y yo notendré mucho que sacar.—B22 —resopla mi madre.
- Page 2 and 3: Libro proporcionado por el equipoLe
- Page 4 and 5: Anna ToddAfterAfter - 1
- Page 6 and 7: NOTA DEL EDITORDescubre la aplicaci
- Page 8 and 9: CAPÍTULO 1Mi despertador está pro
- Page 12 and 13: Sus tacones son extremadamente alto
- Page 14 and 15: CAPÍTULO 3Una hora después, tras
- Page 16 and 17: cortina. El agua tarda demasiado ti
- Page 18 and 19: mejillas mientras continúa destern
- Page 20 and 21: CAPÍTULO 5Siento un gran alivio cu
- Page 22 and 23: CAPÍTULO 6Más tarde, una vez que
- Page 24 and 25: CAPÍTULO 7Hardin y a ha entrado en
- Page 26 and 27: CAPÍTULO 8La chica se vuelve y me
- Page 28 and 29: CAPÍTULO 9Por fin, después de pre
- Page 30 and 31: —Nate ha dicho que trajésemos a
- Page 32 and 33: CAPÍTULO 10Cuando llego a la escal
- Page 34 and 35: CAPÍTULO 11Al observar esos magní
- Page 36 and 37: CAPÍTULO 12Al despertarme necesito
- Page 38 and 39: CAPÍTULO 13El resto del fin de sem
- Page 40 and 41: salimos, y él coincide.Sin embargo
- Page 42 and 43: esta última semana, pero es que lo
- Page 44 and 45: —Venga, vente —dice Steph—. T
- Page 46 and 47: Molly desaparece en cuanto llegamos
- Page 48 and 49: CAPÍTULO 16—Desafío —responde
- Page 50 and 51: —No, tengo novio —replico, y to
- Page 52 and 53: CAPÍTULO 17Hardin me mira. Es una
- Page 54 and 55: entonces el agua impacta contra el
- Page 56 and 57: Me levanto y lo empujo para pasar,
- Page 58 and 59: —No voy a hacerte daño… Sólo
habérmelo rizado como a ella le gusta, a modo de regalo de despedida.
—Voy a ir metiendo tus maletas en el coche —ofrece Noah abriendo la
palma de la mano para que mi madre le dé las llaves.
Me da un beso en la mejilla y desaparece de la habitación con el equipaje en
la mano. Mi madre va detrás de él.
Mi segundo intento de peinarme acaba con un resultado mejor que el
primero. Luego me paso el rodillo quitapelusas por el vestido gris por última vez.
Cuando salgo y me aproximo al coche, cargado con mis cosas, las mariposas
de mi estómago empiezan a revolotear, y me alivia pensar que nos esperan dos
horas de viaje para conseguir que desaparezcan.
No tengo ni idea de cómo será la universidad, y de repente la pregunta que
sigue dominando mis pensamientos es: « ¿Haré amigos allí?» .