DESDE MI VITRINA DE CRISTAL, de Jaime Cannobbio, TOMO 6

HISTORIA DE LA PRIMERA COMPAÑÍA DEL CUERPO DE BOMBEROS DE SANTIAGO
Jueves 23 de Septiembre
Fallecimiento de un gran amigo de esta casa, Carlos Castro
Ossandón
En sesión de Compañía el voluntario Ricardo Serrano señala que
hace algunos días falleció un muy amigo de esta casa Primerina, que
perteneció a esta casa allá por los años 40, y que debió renunciar por
motivos de trabajo, pero en su corazón siempre llevó el Nº1. Se trata
de don Carlos Castro Ossandón llamado cariñosamente "Chino"
Castro. Gran artista que dejó en nuestro bar una gran acuarela donde
confluyen el presente y el pasado de la Primera, con sus miles de
historias, anécdotas y caricaturescos personajes.
Señaló además que le causó emoción un solitario recuerdo de éste
amigo en la prensa de Santiago, donde se hace una reseña de él y que
dice textual:
Un gran artista que se ha ido y nadie dice nada.
Fuera del aviso del obituario, que sepamos nadie ha dicho más sobre la desaparición terrenal del Carlos
Castro Ossandón. Y vengo a rebelarme contra este asunto, cada vez más cotidiano, porque pienso que el
hombre se merecía un recuerdo mayor. No en vano, si bien no sé el Premio Nacional, en 1884 obtuvo la
Medalla de Oro del Salón Nacional de Bellas Artes.
Fui su amigo y me duele su desaparición. Se perdió un artista y se perdió un caballero. No es poco decir,
porque la divulgación no abunda. Ya no recuerdo cuando lo conocí, pero si recuerdo el trato con él. Era un
hombre refinado, y por tanto modesto. No era retórico, y en sus acuarelas, que fue la pasión de su vida
pictórica, solía testimoniarlo. Romera escribía en 1958 aludiendo a una muestra suya: "El colorido es sobrio,
las arboledas, las casas, las fragosidades y las verdes hondonadas quedan aprehendidas con el toque tenue de
una pincelada que sintetiza y resume la visión de las apariencias". Visión de caballero y artista.
Fue también "caballero del fuego"; bombero ingresó a la Primera Compañía el 15 de Mayo de 1940 y al
término de su vida era honorario. En 1983, y de ello hay elocuente testimonio en el casino del Cuartel de José
Miguel de la Barra 411. Don José Miguel fue uno de los fundadores en 1863, y además de haber sido
Secretario de don Manuel Bulnes y haber entrado con él a Lima, nos dejó un estupendo álbum de dibujos. El
testimonio a que aludimos es una acuarela gigantesca de 3.30 metros de ancho por 0.50 metros de alto, en el
cual Carlos Castro - él incluido - retrató a 75 voluntarios que estuvieron o están en dicha Compañía. No
conozco otro retrato multitudinario de tales dimensiones. Pero me conmovió la primera vez que lo vi y poder
reencontrarme con dos antiguos amigos ya desaparecidos: Raúl Velasco, primera voz de "Los Cuatro
Huasos", y Enrique "Tacho" Phillips, que fue Regidor por Santiago, Secretario General del Cuerpo de
Bomberos y casi eterno Director del Club de la Unión. también con mi locuaz amigo Domingo Durán y otras
celebridades de ayer, como Ignacio Carrera Pinto, el de la Batalla de la Concepción, y Hernán Figueroa
Anguita, ex senador y Superintendente del Cuerpo, más dos mártires de la Institución: Adolfo Ossa y René
Carvallo. Este retrato, de por sí y solo, es un documento valiosísimo de la calidad artística que tuvo Carlos
Castro Ossandón pintado en 1983.
Hay más, claro es, en la década del 60, nuestro artista pintó las portadas de dos discos larga duración que
editó RCA Víctor: Cantares de Chile Viejo y Paseo en Carreta, con interpretaciones de "Los Nocheros",
cuarteto vocal que integraban Jorge Burgos Ovalle, Sergio Prieto Trucco, Aníbal Ortuzar Ramírez, Marcial
Edwards García Huidobro. En el primero se añora un antiguo cafetín, y en el segundo, la vieja tradición
campesina. Entre portada e interpretaciones uno revive el Chile tradicional, con su injustamente olvidado
folclore u su música popular, que tanto echamos de menos en la ¿celebración? de nuestras recientes Fiestas
Patrias. No en vano, en 1986, a raíz de una muestra de Castro en Sao Paulo, Brasil, la crítica de arte brasileña
Ivonne Sleryneer, apuntaba: Ha triunfado en la difícil técnica de la acuarela y su trabajo se caracteriza por su
212 TOMO 6 - 1987 A 2000