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Tierra del Fuego, Retratos y Paisajes

La Corporación Patrimonio Cultural de Chile en conjunto con la empresa Larraín Vial presentan el libro “Tierra del fuego, retratos y paisajes”, un ensayo fotográfico que retrata a descendientes de los pueblos ancestrales que habitan actualmente Tierra del fuego, a través del lente del destacado fotógrafo Max Donoso.

La Corporación Patrimonio Cultural de Chile en conjunto con la empresa Larraín Vial presentan el libro “Tierra del fuego, retratos y paisajes”, un ensayo fotográfico que retrata a descendientes de los pueblos ancestrales que habitan actualmente Tierra del fuego, a través del lente del destacado fotógrafo Max Donoso.

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revestían tintes tan tétricos que parecía «como si condujeran

fuera de los límites de este mundo».

Esta representación tiene su correspondencia en las reflexiones

que Darwin hizo a propósito de los que llama «salvajes», cuya

visión lo llevó a preguntarse: «¿De dónde proceden? ¿Quién puede

haber decidido, quién ha forzado a una tribu de hombres a abandonar

las hermosas regiones del Norte, a seguir la cordillera, a

inventar y construir canoas y, por último, ir a habitar uno de los

países más inhóspitos del mundo?» Dudando de la pertinencia de

sus interrogantes, dejando ver el impacto que los habitantes del

extremo sur de América tendrían en sus planteamientos científicos,

concluyó: «la naturaleza, haciendo omnipotente el hábito y

hereditarios sus efectos, ha adaptado al fueguino al clima y a las

producciones de su miserable país».

Aunque imbuido de una mirada imperial decimonónica,

ya al final de su viaje, Darwin muestra conciencia de que «el

hombre blanco desempeña un papel destructor» pues, «donde

quiera que el europeo endereza sus pasos parece que persigue

la muerte a los indígenas». A propósito de lo que conoció de

América, Polinesia, Sudáfrica y Australia, aseguró: «En todas

partes observamos el mismo resultado». Realidad social que

inmediatamente lo llevó a concluir, anticipando el mecanismo

de la selección natural: «Las variedades humanas parece que

reaccionan sobre otras de la misma manera que las diferentes

especies animales, destruyendo siempre el más fuerte al más

débil». La Patagonia queda de este modo –ahora como escenario–

estrechamente ligada a una de las principales teorías científicas

existentes, transformándose las evidencias que contiene

en un foco de atención permanente.

«EL EXTERMINIO VENDRÁ»

Aproximadamente hasta los comienzos de la década de 1880

pudo desenvolverse la existencia corriente y pacífica de los pueblos

originarios de Tierra del Fuego, pues su hábitat aun no era

objeto de interés de aventureros o colonizadores, entre otras

razones porque no se conocían las posibilidades que ofrecía esa

tierra de extremos.

Los buscadores de oro llegados desde 1881 en adelante, y las

compañías ganaderas, que lo hicieron a partir de 1883, «iniciaron

el poblamiento blanco» de Tierra del Fuego, como afirma Mateo

Martinic, y fueron los mineros los primeros en ejercer la violencia

contra los selknam, depredándolos en su afán de capturar

mujeres y niños.

A continuación, las prácticas de explotación ganadera realizadas

por la Sociedad Explotadora de Tierra del Fuego, en su

afán por imponer sus términos y enfrentando la resistencia de la

población, derivaron en una persecución de los selknam, haush,

yaganes y kawésqar, materializada en asesinatos y en captura

para ser deportados a las misiones salesianas instaladas en la

isla Dawson, donde serían «civilizados», es decir, adoctrinados

en el culto católico y domesticados para el trabajo asalariado. En

dichas reducciones, las condiciones de hacinamiento y malnutrición

causaron enfermedades que los diezmaron y contribuyeron

a su extinción.

La historiografía tiene suficientemente acreditada la violencia

desatada sobre los fueguinos. En las palabras de un sobreviviente

Selknam reproducidas por Anne Chapman en su libro Fin

de un mundo. Los Selknam en Tierra del Fuego (2002) se consigna una

elocuente expresión de sus motivos: «¡Para poner ovejas, mataban

los indios! Se hicieron una limpieza y más por la pampa mataron

más, para limpiar que no haiga ningún indio, entonces metieron

ovejas ellos. Entonces estaban tranquilos con sus ovejas, para que

puedan poblar, producir con las ovejas esas, para su ganancia,

para su producto, con eso tenían sus ganancias. Por eso mataban

los indios». Asimismo, Alberto Harambour, en el estudio que

abre su libro Un viaje a las colonias. Memorias y diario de un ovejero

escocés en Malvinas, Patagonia y Tierra del Fuego (1878-1898) (2016),

cita a Joaquín Bascopé para asegurar que las autoridades también

fueron «agentes de violencia, que apenas si podían distinguirse de

los cazadores privados».

El pronóstico de John Spears en su libro sobre la vida en Tierra

del Fuego y la Patagonia, publicado en 1895, ya estaba prácticamente

cumplido a comienzos del siglo XX: «el ovejero terminará

por arrinconar [a los onas] extendiendo sus cercas de alambre,

y luego el exterminio vendrá». Esto explica que Mateo Martinic

concluya que «la ocupación colonizadora de Tierra del Fuego,

admirada como exitosa, había tenido un costo humano horroroso,

con la extinción virtual de los nobles y milenarios selknam».

LOS CUERPOS PINTADOS

«Cazador de sombras» fue el nombre que Martín Gusinde asegura

que los selknam le otorgaron. En los cuatro viajes que el sacerdote

y antropólogo realizó entre 1918 y 1924, investigó y fotografió los

que consideró «últimos restos de los tan poco apreciados fueguinos»,

cuando estos se encontraban muy mermados, «arrastrando

una penosa existencia» como consecuencia de la depredación

que habían sufrido. De acuerdo con las exigencias de la etnología

moderna, Gusinde no se contentó con la descripción de los

aspectos externos de los selknam, sino que intentó ir más allá

y abarcar su «propiedad cultural en su armoniosa totalidad»,

Fondo del río Gennes, 1838. En Jules

Sebastian Cesar Dumont d’Urville, Voyage au

Pole Sud et dans l’Océanie sur les corvettes…,

Paris, Gide et Cie., 1842-1847.

Colección: Biblioteca Nacional de Chile

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