De sapos a príncipes
programación neurolinguística
programación neurolinguística
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
estas experiencias. Este es el objetivo del ejercicio.
Parte 2
B va a hacer exactamente lo mismo que hizo en la parte 1: es decir, va a anunciar
«uno» y va a revivenciar esa experiencia, luego «dos» y luego «tres». Pero esta vez A
no tan sólo va a observar los cambios, sino que también los va a describir en voz alta,
o lo suficientemente alta para que los escuche C. La tarea de C es asegurarse que
todas las descripciones de A son descripciones basadas en datos sensoriales: «las
comisuras de la boca se están levantando. El color de la piel se está profundizando.
Su respiración es alta y superficial y más rápida. Hay más tensión en su mejilla
izquierda que en la derecha», cosas así. Estas son descripciones que le permiten a C
—que además de observar está escuchando su descripción— verificar o no qué es lo
que de hecho están observando. Si A dice «Te ves más feliz, ahora te ves muy
preocupado», esas no son descripciones basadas en datos sensoriales. «Feliz» y
«preocupado» son juicios. Involucran una adivinación acerca del estado interno del
otro. La tarea es asegurarse que las descripciones de A son basadas en datos
sensoriales y desafiar cualquier afirmación que no sea basada exclusivamente en lo
sensorial.
Parte 3
En esta oportunidad B se mete en una de estas tres experiencias sin identificarla
por número. Escoge una de las tres y la revive. A está ahí sentado observando a B, y
sin decir nada hasta que B termine con esa vivencia; entonces A le dice a B cuál
experiencia fue la que revivió: «uno», «dos» o «tres». B continúa reviviendo estas
tres experiencias, en cualquier orden que no sea el orden inicial, hasta que A es capaz
de nombrarlas correctamente. Si A no puede hacerlo la primera vez, empieza de
nuevo. No le digan cuál es cuál, o que la que pensaron que era «uno», en realidad era
número «tres», simplemente díganle que vuelva atrás y empiece de nuevo. Es un
modo de entrenar la agudeza de los sentidos.
Parte 4
Esta vez, B nuevamente se mete en cualquiera de las tres experiencias, mientras
que A alucina y adivina tan específicamente como pueda, cuál es el contenido de su
experiencia. Y créanme, uno se puede poner muy específico y muy preciso.
En la parte 1, 2 y 3, les pedimos que se quedaran únicamente en experiencias
sensoriales. En la parte 4 les estamos pidiendo que alucinen. Esto es para hacer una
distinción muy clara entre la experiencia basada en lo sensorial y la alucinación. La
alucinación puede ser una cosa muy efectiva y muy positiva. Cualquiera de ustedes
que haya hecho un laboratorio con Virginia Satir sabe que utiliza la alucinación de
modo muy efectivo y creativo, por ejemplo, en su «escultura de la familia».
www.lectulandia.com - Página 61