De sapos a príncipes
programación neurolinguística
programación neurolinguística
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
«¿Cuál manejas habitualmente?». Si hubieras preguntado: «¿Tienes un auto
distinto?» y luego me hubieras preguntado acerca del auto específico ¿mis programas
motores habrían sido distintos? Si hubiera estado pensando en que estaba manejando
el otro auto ¿mis piernas se hubieran movido de distinta manera?
Si utilizas tu pie izquierdo, únicamente hay embrague. Ahora consideren cómo
responden a cada pregunta. Todos ustedes tienen puerta de entrada en las casas o
departamentos en que viven, sean estas casas antiguas o apartamentos. Cuando entran
a su casa o departamento, ¿la primera puerta se abre a la izquierda o a la derecha?
Ahora bien, ¿cómo deciden esas preguntas? Todas las manos se están moviendo.
Les voy a hacer otra pregunta. Cuando llegan a casa en la tarde y el pestillo está
con llave. ¿Cuál mano usan realmente para abrir la puerta? Observen las manos.
Durante mucho tiempo la gente ha tratado de utilizar el lenguaje corporal como si
fuera un vocabulario de contenido, como si el sostener la cabeza hacia atrás
significara que son personas reservadas y mantener sus piernas cruzadas significara
que estaban cerrados. Pero el lenguaje corporal no funciona como funcionan las
palabras, funciona de modo distinto. Los movimientos oculares y los movimientos
del cuerpo dan información acerca del proceso.
En nuestra opinión, el dominio propio de los comunicadores profesionales es el
proceso. Si se meten en el contenido, inevitablemente van a imponer parte de su
sistema de creencias y valores a la gente con las cuales se comunican.
Por lo general, los problemas de la gente no tienen nada que ver con el contenido,
sino más bien con la estructura, con la forma de cómo organizan su experiencia. Una
vez que hayan empezado a entender eso, la terapia se hace mucho más fácil. No
tienen que escuchar el contenido, simplemente tienen que descubrir cómo funciona el
proceso, lo que en realidad es mucho más sencillo.
Ahora les voy a hablar de otra pauta importante. Yo soy su cliente y usted me
pregunta: «¿Bueno, y cómo le fue esta semana?». Y le respondo (suspirando
profundamente, con la cabeza hacia abajo, tonalidad baja). «Ah, todo funcionó
fantástico esta semana (suspirando y moviendo la cabeza como negando), sin
problemas». Ahora bien, por sus risas me doy cuenta de que aquí hay una
comunicación poco usual. El nombre que hemos adoptado para esto es
incongruencia. Lo que yo indico con mi tono de voz y mis movimientos corporales y
el movimiento de mi cabeza no calza con mis palabras. Ahora, ¿qué respuestas tienen
a esto como comunicadores profesionales? ¿Qué alternativas tienen para responder a
esta situación?
Mujer: Si yo te conociera muy bien diría: «No te creo» o podría decir también
«Bueno, no te ves demasiado feliz, porque las cosas te están funcionando». De modo
que tú harías un meta-comentario sobre la discrepancia que has podido observar y
confrontarías a la persona con él. ¿Alguna otra persona tiene alguna otra respuestas?
www.lectulandia.com - Página 49