20.01.2023 Views

La pregunta y la respuesta - Patrick Ness

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

nada hambrienta que se acaba de rendir?

—Pero no soy yo quien os ha conquistado —continúa el alcalde—. No

soy yo quien os ha golpeado ni os ha derrotado ni os ha esclavizado.

Hace una pausa, mira a la multitud. Va completamente vestido de blanco,

con sombrero blanco, botas blancas, y su silueta, añadida a las sábanas

blancas que cubren la plataforma y al sol de la tarde que brilla con fuerza, es

prácticamente cegadora.

—Os ha esclavizado vuestra pereza —concluye—. Os ha derrotado

vuestra complacencia. ¡Habéis sido sentenciados —y aquí su voz se eleva

de pronto, y pronuncia «sentenciados» con tanta dureza que la mitad de la

gente da un brinco— por vuestras buenas intenciones!

Se está animando, y respira con fuerza contra el micrófono.

—Os habéis vuelto tan débiles, tan flojos ante los desafíos de este

mundo, que en una sola generación os habéis convertido en un pueblo

capaz de rendirse a causa de un ¡¡rumor!!

Empieza a caminar por el escenario, micrófono en mano. Cada rostro

asustado del público, cada rostro del ejército, sigue con la mirada cómo

anda arriba y abajo, arriba y abajo.

Yo también miro.

—Permitís que un ejército entre en vuestra ciudad y, en vez de obligarlo a

luchar por ella, ¡se la ofrecéis voluntariamente!

Sigue caminando de un lado a otro, y la voz sigue subiendo.

—Ahora ya sabéis lo que hice. Os tomé. Os tomé a vosotros. Tomé

vuestra libertad. Tomé vuestra ciudad. Tomé vuestro futuro.

Se echa a reír, incapaz de creerse la suerte que ha tenido.

—Esperaba una guerra —dice.

Muchos se miran los pies, evitan mirarse entre ellos.

Me pregunto si sienten vergüenza.

Espero que sí.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!