SILENCIOS REVELADOS

ESCRITURA COLECTIVA
PÁGINA 30
-¡Qué noche tan bonita!- dije, sentada sobre mi cama,
observando a través de mi ventana la luna a lo lejos y algunas
estrellas cerca de ella. Veía como el viento agitaba las hojas de las
palmeras, y muchas otras caían sobre la arena.
-Creo que no volveré a dormir - me dije. Cada noche es lo
mismo, mi cabeza se convierte en una maraña de pensamientos, que
no me dejan descansar, pienso en mis padres tan responsables y
trabajadores, del gran esfuerzo que hacen para que mis dos
hermanos y yo tengamos lo suficiente en casa. Los amo demasiado y
siempre he sido una buena hija, o al menos es lo que yo creo, pero
hasta hace unos meses conocí a alguien, que ha llegado a mi mundo
de manera increíble y me ha demostrado un amor diferente al amor
fraternal. Nunca en mi vida había experimentado algo tan
maravilloso como es esto.
Escuché un ruido en el pasillo, entré a mis cobijas lo más rápido posible para que mamá o papá no me vieran
despierta, dejé un pequeño espacio entre la cobija y la cama, era papá quien estaba checando que ya estuviéramos
durmiendo, vi como sonrío al verme acostada, y dijo buenas noches.
Al cerrar la puerta me volví a sentar para seguir observando la noche, mi cabeza comenzó a pensar nuevamente,
sobre todo por mi familia. Mi papá Gael, es un gran maestro de filosofía en la preparatoria, mi mamá Aura, una
hermosa e inteligente directora de una primaria cerca del trabajo de papá, ellos han sido mi completa guía en mi
corta vida. Me han demostrado de mil formas lo bonito y complejo que es el amor. Para mí son perfectos, aunque
realmente no sea así.
Estoy estudiando leyes en una universidad cerca de casa, amo mi carrera, estoy en cuarto semestre y me encanta
cada asignatura que llevo.
Es una escuela realmente buena y yo la disfruto al máximo, ahí fue donde conocí a Alonso, un chico que en un
comienzo éramos compañeros y después amigos, lentamente nuestros sentimientos fueron cambiando, ahora
estamos saliendo, somos tan compatibles, tenemos tantas cosas en común, sé que me quiere y yo al él.
Lo demuestra con su andar en la escuela, con sus acciones, con sus detalles, con su manera de ser cuando está
conmigo y miles de cosas más. Realmente estoy enamorada de él, pero sé que mis padres no lo quieren, alguna vez
fue a mi casa para comer. Me di cuenta de que no les agradó nada que lo llevara a casa, estaban muy molestos
conmigo, no entendía el porqué de su sentir.
¿Qué pasa?, me preguntaba, mientras suavemente acariciaba mi mano, no lograba entender por qué la felicidad no
llegaba completa, me hacía una y mil preguntas que yo misma me respondía, el sentimiento escarbaba lo más
profundo de mi corazón, - mis padres se oponen a nuestra relación, pero yo lo amo y estoy dispuesta a enfrentarlos-,
en voz baja le respondía con la mirada hacia el suelo, reprimiendo las ganas inmensas de llorar, haciéndome la
fuerte y evitando a toda costa derramar alguna lágrima, me extendió el brazo alrededor de mi cuello y suavemente
inclinaba su cabeza sobre la mía, mostrándome un gesto de apoyo y amor.