You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
mente está constantemente analizando lo que no va bien o lo que podría ir mal de
cualquier situación. Su principal disposición mental es: “¿Y si no funciona?” o, con
mayor frecuencia: “No va a funcionar”.
La gente rica de clase media es ligeramente más optimista: su disposición mental
es la de “yo, desde luego, espero que esto funcione”.
Los ricos, como he dicho antes, se responsabilizan de los resultados de su vida y
actúan según la disposición mental de “funcionará porque yo haré que funcione”.
La gente rica confía en tener éxito. Tienen confianza en sus capacidades, tienen
confianza en su creatividad y creen que, en el caso de que las circunstancias fueran
desfavorables, podrían encontrar otro modo de tener éxito.
Generalmente cuando más grande es la recompensa, mayor es el riesgo. Como
constantemente ven oportunidades, los ricos están dispuestos a arriesgar. La gente
rica cree que, si las cosas no salen del todo bien. Siempre podrán recuperar su dinero.
Los pobres, sin embargo, esperan el fracaso. Carecen de confianza en sí mismos y
en sus capacidades. Piensan que si las cosas no saliesen bien seria catastrófico. Y
como constantemente ven obstáculos, por regla general no están dispuestos a
arriesgar. Y si no hay riesgo no hay recompensa.
Que conste: estar dispuesto a arriesgar no significa necesariamente que estés
dispuesto a perder. La gente rica asume riesgos con base. Esto significa que
investigan, averiguan lo que tienen que averiguar y toman decisiones basándose en
información y en hechos sólidos. Por otra parte, ¿crees que se toman todo el tiempo
del mundo para informarse? No. Hacen lo que pueden en el menor tiempo posible, y
después deciden meterse en el asunto o no.
Los pobres, aunque afirman que están preparándose para cuando llegue la
oportunidad, lo que generalmente hacen es andarse con rodeos: están muertos de
miedo, vacilando durante semanas, meses e incluso años enteros, y para entonces la
oportunidad, generalmente, desaparece. Así, racionalizan la situación diciendo: “Me
estaba preparando”. Seguro que sí, pero mientras ellos estaban “preparando” el rico
entró, salió y ganó otra fortuna.
Sé que lo que estoy a punto de decir puede sonar un poco extraño teniendo en
cuenta lo mucho que valor la auto responsabilidad Sin embargo, sí creo que hay
cierto elemento de lo que mucha gente denomina suerte asociado con el hecho de
hacerse rico o, incluso, con prosperar en cualquier cosa.
En el futbol americano, podría ser el jugador del equipo contrario que llega dando
tumbos a pisarte propia línea cuando queda menos de un minuto para acabar el
partido, permitiendo que lo gane tu equipo. En el golf podría ser la bola loca que da
contra un árbol que está fuera de los límites y vuelve a rebotar en el césped, a sólo
unos centímetros del agujero.
En los negocios, ¿cuántas veces has oído hablar de un tipo que se gasta algo de
www.lectulandia.com - Página 61