Freed-Fifty-Shades-Freed-As-Told

kalpana3023talsaniya
from kalpana3023talsaniya More from this publisher
28.11.2022 Views

Nadie es capaz de entusiasmarse tanto como mi hermanapequeña, y no recuerdo la última vez que comimos juntos losdos solos y sin prisas. Mientras degustamos los sashimis y losmakis, me pone al día de las esperanzas que tiene en su nuevacarrera profesional y de sus últimos intentos de ganarse elcorazón de Ethan Kavanagh.—Mia, no estoy seguro de poder asumir que tengas vidaamorosa.—Ay, Christian, pues claro que tengo vida amorosa. EnParís me lo pasé muy bien.—¿Qué?—Sí. Estuvo Victor, y Alexandre…—¿Tienes una lista? Joder… Para.—No seas tan mojigato, Christian —me regaña.—Moi? —Me llevo las manos al pecho con fingidaindignación.Mia se echa a reír.—¿O sea que crees que tienes alguna oportunidad conEthan? —le pregunto.—Sí —contesta con seguridad, y esa es una de las muchascosas que me encantan de ella: su determinación y sucapacidad de resistencia.—Muy bien. Buena suerte con eso. —Hago una señal parapedir la cuenta.—¿Podemos repetir algún otro día? Te echo de menos.

—Claro que sí. Pero ahora mismo tengo que volver altrabajo para ir a una reunión.Estoy sentado con Barney y Fred en el laboratorio,examinando el último prototipo de tableta solar, la versión másligera, más simple, más barata, para las economías másajustadas del tercer mundo. Esta es la parte que más me gustade mi trabajo. Barney está en plena explicación.—Ha tardado ocho horas en cargarse y nos está dando tresdías de uso.—¿Podemos conseguir más?—Creo que estamos al límite con la tecnología de bateríasde la que disponemos por ahora.Fred se sube las gafas por la nariz.—Es la pantalla de tinta electrónica en blanco y negro loque nos ahorra toda esa energía. Y también es más robusta.—¿Y para el mercado nacional?—Pantalla táctil en color. —Barney me pasa el otroprototipo.Lo sostengo en las manos.—Es bastante más pesada.—Las pantallas de color pesan.—Se nota que es más cara. —Sonrío.—Hasta ahora solo le estamos sacando cuatro horas, conocho al sol.—Tiene sentido. Pero ¿puede cargarse también de la formaconvencional?

—Claro que sí. Pero ahora mismo tengo que volver al

trabajo para ir a una reunión.

Estoy sentado con Barney y Fred en el laboratorio,

examinando el último prototipo de tableta solar, la versión más

ligera, más simple, más barata, para las economías más

ajustadas del tercer mundo. Esta es la parte que más me gusta

de mi trabajo. Barney está en plena explicación.

—Ha tardado ocho horas en cargarse y nos está dando tres

días de uso.

—¿Podemos conseguir más?

—Creo que estamos al límite con la tecnología de baterías

de la que disponemos por ahora.

Fred se sube las gafas por la nariz.

—Es la pantalla de tinta electrónica en blanco y negro lo

que nos ahorra toda esa energía. Y también es más robusta.

—¿Y para el mercado nacional?

—Pantalla táctil en color. —Barney me pasa el otro

prototipo.

Lo sostengo en las manos.

—Es bastante más pesada.

—Las pantallas de color pesan.

—Se nota que es más cara. —Sonrío.

—Hasta ahora solo le estamos sacando cuatro horas, con

ocho al sol.

—Tiene sentido. Pero ¿puede cargarse también de la forma

convencional?

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!