Freed-Fifty-Shades-Freed-As-Told

kalpana3023talsaniya
from kalpana3023talsaniya More from this publisher
28.11.2022 Views

Asunto: He dado en el clavo…Como siempre, señora Grey, se muestra directa y desafiante porcorreo.Tal vez deberíamos discutir esto cuando vuelvas a NUESTROapartamento.Deberías cuidar ese lenguaje. Sigo estando furioso, joder.Christian GreyPresidente de Grey Enterprises Holdings, Inc.Mierda. No quiero pelearme con Ana por correoelectrónico. Salgo del estudio hecho un basilisco y entro en elsalón. Mi humor mejora ante la visión de la ensalada de polloque la señora Jones me ha preparado para comer.Puede que esté tan enfadado porque tengo hambre.—Gracias —mascullo.—Voy a ir a la tienda de delicatessen griega que le gusta a laseñora Grey a comprar sus platos preferidos para esta noche.Solo tendrá que meterlos en el microondas para calentarlos.—Perfecto —contesto distraído.¿Por qué Ana y yo no hacemos nada más que discutirúltimamente?—Señor Grey… —dice la señora Jones intentando atraer miatención.—Sí.

—Gracias por lo de esta noche. Pero debo decir que parececansado. ¿Ha pensado en echarse una siestecita?Frunzo el ceño. ¿Una siesta? No soy un crío.—No.—Es solo una idea.—Lo tomaré en consideración —murmuro, y me llevo laensalada a mi estudio.Welch llama mientras estoy comiendo.—Welch.—Tenemos un avance interesante en el caso Hyde —anuncia con su voz áspera—. Resulta que la furgoneta queHyde había dejado en el garaje contenía un colchón ysuficiente ketamina para dormir a un rodeo entero de potrossalvajes.—Ketamina. Mierda.¡Tenía razón!—Sí, señor. Y jeringuillas.Tuerzo el gesto. Odio las jeringuillas.—Parece ser que nuestro chico será acusado de tentativa desecuestro en primer grado. Además, había una nota —prosigueWelch.—Clark me la ha enseñado.—¿Le dice algo?—No. Y Hyde la dejó en la furgoneta. Igual cambió deopinión acerca de la nota, pero no tiene sentido ninguno.

—Gracias por lo de esta noche. Pero debo decir que parece

cansado. ¿Ha pensado en echarse una siestecita?

Frunzo el ceño. ¿Una siesta? No soy un crío.

—No.

—Es solo una idea.

—Lo tomaré en consideración —murmuro, y me llevo la

ensalada a mi estudio.

Welch llama mientras estoy comiendo.

—Welch.

—Tenemos un avance interesante en el caso Hyde —

anuncia con su voz áspera—. Resulta que la furgoneta que

Hyde había dejado en el garaje contenía un colchón y

suficiente ketamina para dormir a un rodeo entero de potros

salvajes.

—Ketamina. Mierda.

¡Tenía razón!

—Sí, señor. Y jeringuillas.

Tuerzo el gesto. Odio las jeringuillas.

—Parece ser que nuestro chico será acusado de tentativa de

secuestro en primer grado. Además, había una nota —prosigue

Welch.

—Clark me la ha enseñado.

—¿Le dice algo?

—No. Y Hyde la dejó en la furgoneta. Igual cambió de

opinión acerca de la nota, pero no tiene sentido ninguno.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!