28.11.2022 Views

Freed-Fifty-Shades-Freed-As-Told

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

marcas, de modo que lo acepté y no pasó nada. Y, claro, a

Elena jamás le hice marcas. Era imposible. Estaba casada.

Luego vino Susannah. A ella le encantaba toda esa mierda.

Siempre que le dejaba marcas, quería que después le hiciera

fotos.

Ana me aferra la mano y me distrae de mis pensamientos.

Lleva una falda corta que deja sus piernas al descubierto. La

miro y le acaricio la rodilla. Tiene unas piernas adorables.

¡Los tobillos!

Seguramente también tiene marcas en los tobillos.

Mierda.

Bajo la mano por su pierna, le cojo el tobillo y lo pongo en

mi regazo. Ella gira sobre el asiento y se pone de cara a mí.

—Quiero el otro también.

Necesito verlo con mis propios ojos. Ella mira hacia Taylor

y Ferreux.

¿Le da vergüenza?

¿Qué cree que voy a hacerle?

Pulso el botón de la pantalla tintada y, poco a poco, sale del

panel que tenemos delante hasta que quedamos separados de

ellos.

—Quiero verte los tobillos.

Ana pone mala cara pero coloca el otro pie en mi regazo. Le

paso el pulgar por el empeine y ella se remueve.

Tiene cosquillas. No sé por qué no me he dado cuenta antes.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!