28.11.2022 Views

Freed-Fifty-Shades-Freed-As-Told

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

la pista de despegue. Taylor está en la parte de atrás, leyendo

una novela de Lee Child. Stephan y el primer oficial Beighley

se hallan a los controles.

—A ver si lo adivino: Vancouver —le digo a Elliot.

—¡Bingo! He pensado que habría menos posibilidades de

que la gente te reconozca si te portas mal en la Columbia

Británica.

—¿Qué narices has planeado?

—Tranquilo, fiera —responde Elliot, y levanta su copa.

Una vez en el aire, Sara nos sirve cerveza y pizza picante de

pepperoni, de una pizzería local de Georgetown. Creo que esta

es la primera vez que se sirve pizza en mi jet privado, pero

esta es la idea que tiene de Elliot de pasar un día de lujo.

Francamente, tengo tanta hambre que ahora pienso lo mismo.

Mac, que está sentado enfrente de mí, y yo devoramos la

pizza.

—Te lo has zampado en un suspiro —dice Mac con su

acento irlandés.

—Hoy Elliot ya me ha hecho lanzarme en tirolina y saltar

en paracaídas.

—¡Joder! No me extraña que estés muerto de hambre…

El tiempo de vuelo es de menos de quince minutos. Cuando

aterrizamos en la Signature Flight Support de Vancouver,

Taylor es el primero en salir del avión con nuestros pasaportes

para enseñárselos al agente de Inmigración que ha acudido al

pie de la escalerilla.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!