28.11.2022 Views

Freed-Fifty-Shades-Freed-As-Told

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

—Pues sí. ¡Sorpresa! Mueve el culo: tengo todo el día

planeado para ti.

¿Qué?

—Iba a ir de compras con Ana.

Suelta un bufido, con expresión de asco.

—Es una mujer adulta. Joder, puede ir ella solita de

compras, ¿no?

—Pero…

—Tío. Te vas a librar de una buena gracias a mí. Ir de

compras con las mujeres es un suplicio. Anda, ponte algo de

ropa, pervertido. Y haz el puto favor de darte una ducha, que

se huele el olor a sexo desde aquí.

—Vete a la mierda —replico sin acritud.

La verdad es que a veces es un capullo integral.

—Vas a necesitar botas de montaña y zapatillas de deporte

—me dice.

¿Las dos cosas?

—¿Cómo has entrado? —le pregunto cuando bajamos al

garaje en el ascensor.

—Taylor.

—Ah, por eso no nos sigue nadie de seguridad.

—Sí. He pensado que, como te venías conmigo, no vas a

correr ningún peligro. A tu hombre, Taylor, no le ha hecho

mucha gracia, pero al final le he convencido.

Asiento con la cabeza, conforme. El hecho de tener siempre

encima al equipo de guardaespaldas ha sido agotador. Ana y

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!