EL PODER DE LAS PALABRAS
Las palabras acompañadas de la visualización son herramientas super poderosas para alcanzar los objetivos y metas que nos planteemos. Generan resultados que pueden comprobarse en la práctica y que permiten a las personas lograr su bienestar individual y familiar. Se trata de una estrategia para direccionar la vida hacia donde nos propongamos y, para que se presenten los cambios que deseamos. Una de las cosas que más preocupa a las personas es la falta de estabilidad laboral, ya que al no tenerla se desequilibra todo el engranaje de nuestras vidas. Desafortunadamente estamos en una sociedad de consumo donde el dinero es pieza vital y, sin este no se pueden lograr muchos de nuestros objetivos, y el no tener lo básico hace que las personas caigan en la depresión, el pánico, la angustia y el temor sobre el futuro. El poder de la palabra con la visualización, se constituyen en instrumentos eficaces, pero que desafortunadamente no todos sabemos utilizar y poner en práctica, lo que es entendible cuando alguien se encuentra en una situación económica complicada, donde nada le sale bien a pesar de la persistencia. A estas personas se les dificulta concentrarse en lo fundamental para lograr lo que desean. No se puede esperar que el universo nos provea de lo que queremos, por lo que es indispensable que seamos protagonistas de nuestro propio futuro. Debemos comenzar por preguntarnos lo que aspiramos alcanzar laborales y, una vez tengamos la respuesta, debemos imaginarlo y acompañarlo con palabras de poder, haciendo que las imágenes sean lo más exactas posibles, repitiendo la visualización con frecuencia, en un espacio que favorezca la atención de la mente. Es fundamental que la visualización se incorpore como parte de la escena, con la creencia de que se transformará en realidad. Es esencial estar convencidos de los beneficios y de los resultados que se obtendrán por medio de dicha práctica. Mediante el empleo de palabras positivas y por medio de la visualización se pueden crean sensaciones y proyectar anhelos de diferente tipo y, si a esos ingredientes le incorporamos la fe, se lograrán los propósitos que nos propongamos. En el libro se presenta una encuesta sobre el tema, una serie de tipologías y algunas reflexiones finales.
Las palabras acompañadas de la visualización son herramientas super poderosas para alcanzar los objetivos y metas que nos planteemos.
Generan resultados que pueden comprobarse en la práctica y que permiten a las personas lograr su bienestar individual y familiar.
Se trata de una estrategia para direccionar la vida hacia donde nos propongamos y, para que se presenten los cambios que deseamos.
Una de las cosas que más preocupa a las personas es la falta de estabilidad laboral, ya que al no tenerla se desequilibra todo el engranaje de nuestras vidas.
Desafortunadamente estamos en una sociedad de consumo donde el dinero es pieza vital y, sin este no se pueden lograr muchos de nuestros objetivos, y el no tener lo básico hace que las personas caigan en la depresión, el pánico, la angustia y el temor sobre el futuro.
El poder de la palabra con la visualización, se constituyen en instrumentos eficaces, pero que desafortunadamente no todos sabemos utilizar y poner en práctica, lo que es entendible cuando alguien se encuentra en una situación económica complicada, donde nada le sale bien a pesar de la persistencia.
A estas personas se les dificulta concentrarse en lo fundamental para lograr lo que desean.
No se puede esperar que el universo nos provea de lo que queremos, por lo que es indispensable que seamos protagonistas de nuestro propio futuro.
Debemos comenzar por preguntarnos lo que aspiramos alcanzar laborales y, una vez tengamos la respuesta, debemos imaginarlo y acompañarlo con palabras de poder, haciendo que las imágenes sean lo más exactas posibles, repitiendo la visualización con frecuencia, en un espacio que favorezca la atención de la mente.
Es fundamental que la visualización se incorpore como parte de la escena, con la creencia de que se transformará en realidad.
Es esencial estar convencidos de los beneficios y de los resultados que se obtendrán por medio de dicha práctica.
Mediante el empleo de palabras positivas y por medio de la visualización se pueden crean sensaciones y proyectar anhelos de diferente tipo y, si a esos ingredientes le incorporamos la fe, se lograrán los propósitos que nos propongamos.
En el libro se presenta una encuesta sobre el tema, una serie de tipologías y algunas reflexiones finales.
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David Francisco Camargo Hernández. Nacionalidad Colombiano.
Escritor, humanista y economista con especialización, maestría y
doctorado. Artista plástico. Inventor. Guionista. Becario de
universidades europeas. Director Fundación Sueños de Escritor y
ediciones Dafra. Premios literarios y académicos en los años 2001-
2005-2008-2010-2016-2017 en eventos internacionales. Profesor de
posgrado. Investigador CVLAC Colciencias. Conferencista
internacional basando los temas en sus propios libros. Propende
por una economía «más humana, más igualitaria, capaz de
contribuir a mejorar la calidad de vida de la comunidad». En 2010
algunas de sus publicaciones fueron traducidas a varios idiomas.
Una de las más destacadas se titula: “cómo regionalizar el país”. Y
por «su sobresaliente trayectoria literaria y pensamiento
comprometido con los problemas de la cotidianidad».
Las palabras acompañadas de la visualización son herramientas super poderosas para alcanzar los
objetivos y metas que nos planteemos.
Generan resultados que pueden comprobarse en la práctica y que permiten a las personas lograr su
bienestar individual y familiar.
Se trata de una estrategia para direccionar la vida hacia donde nos propongamos y, para que se
presenten los cambios que deseamos.
Una de las cosas que más preocupa a las personas es la falta de estabilidad laboral, ya que al no
tenerla se desequilibra todo el engranaje de nuestras vidas.
Desafortunadamente estamos en una sociedad de consumo donde el dinero es pieza vital y, sin este
no se pueden lograr muchos de nuestros objetivos, y el no tener lo básico hace que las personas
caigan en la depresión, el pánico, la angustia y el temor sobre el futuro.
El poder de la palabra con la visualización, se constituyen en instrumentos eficaces, pero que
desafortunadamente no todos sabemos utilizar y poner en práctica, lo que es entendible cuando
alguien se encuentra en una situación económica complicada, donde nada le sale bien a pesar de la
persistencia.
A estas personas se les dificulta concentrarse en lo fundamental para lograr lo que desean.
No se puede esperar que el universo nos provea de lo que queremos, por lo que es indispensable
que seamos protagonistas de nuestro propio futuro.
Debemos comenzar por preguntarnos lo que aspiramos alcanzar laborales y, una vez tengamos la
respuesta, debemos imaginarlo y acompañarlo con palabras de poder, haciendo que las imágenes
sean lo más exactas posibles, repitiendo la visualización con frecuencia, en un espacio que favorezca
la atención de la mente.
Es fundamental que la visualización se incorpore como parte de la escena, con la creencia de que se
transformará en realidad.
Es esencial estar convencidos de los beneficios y de los resultados que se obtendrán por medio de
dicha práctica.
Mediante el empleo de palabras positivas y por medio de la visualización se pueden crean
sensaciones y proyectar anhelos de diferente tipo y, si a esos ingredientes le incorporamos la fe, se
lograrán los propósitos que nos propongamos.
En el libro se presenta una encuesta sobre el tema, una serie de tipologías y algunas reflexiones
finales.
PALABRAS DE PODER PARA INGRESAR AL MERCADO LABORAL David Francisco Camargo Hernández
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