Tribuna Comunista Núm. 500

desde los estados
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frente recaía en los camaradas Emilio Alcalá y Jesús
Trejo, mejor conocido como El Lechuzo, ingeniero
topógrafo de la Reforma Agraria que se integró al
PC. En los reportes de la siniestra y desaparecida
Dirección Federal de Seguridad, se daba cuenta
que el movimiento campesino mejor organizado
en el Estado eran los núcleos de peticionarios de
tierra liderados por los comunistas.
Esto era el resultado del trabajo políticoorganizativo
que se establecía en las directrices
del Partido, de la formación política de cuadros
permanente. La línea era simple: formar
dirigentes campesinos surgidos de la misma
base para dirigir y organizar a sus hermanos de
clase. Es decir, la aplicación política del dicho:
¡Del mismo cuero salen las correas! No suplantar
la representatividad por universitarios, como
lo hicieron los compañeros del Frente Popular,
después de la salida del PC de esa organización,
debido sobre todo al hipersectarismo. El tiempo
comprobó, que la suplantación fue un gran error,
ya que deslegitimaba la lucha e impedía el avance
político de masas campesinas.
La mancuerna Alcalá-Trejo cumplía a cabalidad
tales funciones: organizar los núcleos campesinos
peticionarios de tierra, porque había que
encomendar tareas de cómo movilizar el grupo
ya en el campo para tomar la tierra, cuidar
la seguridad, la alimentación, las guardias y
sobretodo, mantener el ánimo de lucha en alto
y para eso se las pintaba El Camarada Emilio.
En las fogatas ante los campesinos y sus familias
le explica la historia de lucha y organización de
otros pueblos por mejorar sus condiciones de
vida, lo valioso de la unidad y la conciencia de
clase. Después venía la velada con canciones
Foto: Mina de plata en el Cerro de Proaño, ca. 1940, créditos originales en la imagen. | Fuente:
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