magia ceremonial

determinación desde el comienzo. Al contrario que en los
grimorios más tardíos en los que los espíritus aéreos están
diferenciados en seres separados, de nuevo como en el caso del
Goecia, por ejemplo, ninguna distinción de este tipo sobre estos
seres es hecha en el Heptameron. Era costumbre en los grimorios
más tempranos empezar el asunto inmediatamente, y empezar
maldiciendo o exorcizando, como parte de la conjuración o
proceso de convocación. También debe ser consciente que la
inserción del símbolo de una cruz, “+,” entre cada nombre
divino, fue usado en los primeros grimorios tanto para separar
los nombres, así como una instrucción para que el Operador
dibujara una cruz en el aire con una arma mágica que en este
caso sería la Espada del Arte. Aunque esta acción no puede ser
necesaria, yo lo hago, ya que me permite enfocar mi mente y por
eso obtengo un gran control sobre el estado de Beatitud que en
esos momentos estará alcanzando un increíble tono febril.
Unas palabras con respecto a la pronunciación de los
nombres divinos y angélicos son ahora necesarias. La Nueva Era
ocupa una exasperante cantidad de tiempo en diferentes métodos
para “Vibrar Palabras de Poder,” cuando se trata de los
Nombres de Dios, seres angélicos, y de otras palabras de poder
como las Palabras “Bárbaras de Evocación.” Este esquema de
vibración es completamente innecesario. Simplemente es otra de
sus estructuras diseñadas para explicar por qué (después de una
de sus evocaciones) no hay ningún fenómeno físico o manifestación
salvo por algunas imaginadas sensaciones de que
había algo presente, o que tuviste. El centro de la cuestión es, que
la energía contenida en los nombres divinos y palabras de poder
está allí por virtud de las mismas palabras, y contenida en el
aliento viviente del Operador que está pronunciándolas en su
estado de sublime Beatitud, un estado en el que es Uno con su
parte individual de la Deidad haciendo la Convocación. Nada es
necesario, salvo ese éxtasis genuino que ahora se convierte en un
candente fuego de Beatitud, y la virtud contenida en las mismas
palabras.
En este punto del rito, normalmente empezara la
manifestación. No será todavía clara como el cristal, pero será
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