14.03.2022 Views

La Velocidad de la Confianza (2)

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Recuer<strong>de</strong> que acumu<strong>la</strong>mos fuerzas para perdonar a aquellos que nos<br />

perjudican no por lo que ellos hacen, sino por lo que hacemos nosotros.<br />

Y no perdonamos para ce<strong>de</strong>r ante el que nos «ofen<strong>de</strong>»; como <strong>de</strong>mostró<br />

Man<strong>de</strong><strong>la</strong>, perdonamos por nuestra propia c<strong>la</strong>ridad y paz.<br />

El que es incapaz <strong>de</strong> perdonar <strong>de</strong>struye el puente p o r el que<br />

tam bién <strong>de</strong>be pasar.<br />

Lord Herbert, filósofo y teólogo británico<br />

Como ciudadanos globales, como parte <strong>de</strong> <strong>la</strong> raza humana, y por el<br />

interés propio y ajeno, necesitamos perdonar. Sólo entonces —y sea cual<br />

sea <strong>la</strong> dirección que tomemos con respecto a <strong>la</strong> confianza— seremos libres<br />

para avanzar.<br />

DÉ PRIORIDAD A LA RECUPERACIÓN DE LA CONFIANZA<br />

Un amigo íntimo compartió conmigo <strong>la</strong> siguiente historia:<br />

Hasta que cumplió los catorce, nuestro hijo era un niño «i<strong>de</strong>al».<br />

Participaba entusiasmado en <strong>la</strong>s activida<strong>de</strong>s familiares, sacaba buenas<br />

calificaciones, tenía muy buenos amigos... Pensábamos que todo iba <strong>de</strong><br />

maravil<strong>la</strong>. Cuando empezó a separarse un poco, dimos por sentado que<br />

era normal para su edad. Sin embargo, cuando empezó a salir con un<br />

nuevo grupo <strong>de</strong> amigos y se volvió más reservado, supimos que teníamos<br />

un problema.<br />

Decidimos convertir a nuestro hijo en nuestra prioridad absoluta. Pasamos<br />

más tiempo con él. Le recortamos algunos privilegios, p<strong>la</strong>nteamos<br />

objetivos en familia, hab<strong>la</strong>mos con expertos y lo llevamos a visitar a expertos.<br />

Hubo una serie <strong>de</strong> sermones, disculpas y promesas rotas. A medida<br />

que iba creciendo, sus elecciones eran cada vez más peligrosas. Nos sentíamos<br />

frustrados y asustados, pero <strong>de</strong>cidimos asegurarnos <strong>de</strong> que tuviese<br />

siempre presente que nunca le íbamos a <strong>de</strong>jar por imposible y que nunca<br />

<strong>de</strong>jaríamos <strong>de</strong> quererlo, hiciera lo que hiciese.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!