18.03.2020 Views

Ready Player One - Ernest Cline

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

no os vendría mal algo de ayuda. —Todos intercambiamos miradas nerviosas, y él

pareció detectar nuestra desconfianza—. Por favor, no me malinterpretéis —

prosiguió—. Mi intención no es proporcionaros pistas ni ninguna información que os

ayude a encontrar el Huevo. Si lo hiciera, todo esto dejaría de ser divertido, ¿no

creéis? —Se acercó de nuevo a nosotros y su expresión se volvió seria—. Justo antes

de su muerte, le prometí a Jim que, en su ausencia, yo haría todo lo que estuviera en

mi mano para proteger el espíritu y la integridad de su competición. Y por eso estoy

aquí.

—Pero, señor…, Og… —volví a intervenir—. En su autobiografía asegura que

James Halliday y usted estuvieron los últimos diez años de su vida sin hablarse.

Morrow, divertido, me dedicó una sonrisa.

—Vamos, chico. No puedes creerte todo lo que lees. —Soltó una carcajada—. De

hecho, en cuanto a esa cuestión en concreto es casi verdad. No hablé con él durante

una década, hasta unas semanas antes de su muerte. —Se interrumpió, como si

rebuscara en su recuerdo—. En aquel momento, yo ni siquiera sabía que estaba

enfermo. Me llamó un día, así, sin más, y nos encontramos en un chat privado,

bastante parecido a éste, por cierto. Allí me contó que estaba enfermo, me habló del

concurso, de lo que había planeado. Le preocupaba que hubiera fallos en las puertas.

Y que, tras su muerte, surgieran complicaciones que impidieran que el concurso se

desarrollara tal como él lo había concebido.

—¿Se refiere a complicaciones como los sixers? —le preguntó Shoto.

—Sí, exacto. Como los sixers. De modo que Jim me pidió que supervisara todo el

concurso y que interviniera si llegaba a ser necesario. —Se rascó la barba—. Si os

soy sincero, yo no habría querido asumir esa responsabilidad. Pero fue el último

deseo de mi mejor amigo. Y así, durante los últimos seis años me he dedicado a

observar desde lejos. Y aunque han hecho todo lo que han podido por inclinar la

balanza en contra de vosotros, no sé cómo, pero los cuatro habéis resistido. Pero,

ahora, después de oíros describir vuestra situación actual, creo que al fin ha llegado el

momento de que pase a la acción y mantenga la integridad del juego de Jim.

Art3mis, Shoto, Hache y yo intercambiamos miradas de asombro, como si

quisiéramos confirmar en los demás que aquello estaba ocurriendo en realidad.

—Quiero ofreceros refugio a los cuatro, en mi casa, en Oregón —prosiguió Og—.

Desde aquí podréis ejecutar vuestro plan y terminar la competición con garantías de

seguridad, sin tener que preocuparos por si los agentes sixers os persiguen y entran en

vuestras casas. Puedo proporcionaros a todos equipos de inmersión de última

generación, conexión de fibra óptica a Oasis y cualquier otra cosa que necesitéis.

Otro silencio prolongado, de incredulidad.

—¡Gracias, señor! —solté al fin yo, controlando el impulso de arrodillarme y

dedicarle una reverencia.

www.lectulandia.com - Página 292

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!