1-Soy el numero Cuatro - Pittacus Lore
darme una paliza sin esfuerzo, te habría tratado un poco mejor desde el primer día. Seis atraviesa la habitación y echa un vistazo a mis cosas encima de la mesa. —Deberíamos ir yéndonos —dice, y su expresión se suaviza con una mirada de tácita simpatía—. En realidad, sólo queda una cosa por hacer. No sabíamos que querrías hacer al respecto. Asiento. No me hace falta preguntar a qué se refiere. Miro a Sarah. Tendremos que separarnos mucho antes de lo que creía. El
corazón me da un vuelco. Me entran ganas de vomitar. Sarah me coge la mano. —¿Dónde le habéis dejado? — digo. El suelo está mojado por la nieve derretida. Cogiendo a Sarah de la mano, atravesamos en silencio el bosque, a un kilómetro del hotel. Sam y Mark caminan delante, siguiendo las huellas que han dejado en el barro unas horas antes. Más adelante diviso un pequeño claro, en cuyo centro han
- Page 1126 and 1127: delante de nosotros, y allí es don
- Page 1128 and 1129: más fuerte. «Así que este es el
- Page 1130 and 1131: aterra. Pero Henri está conmigo, y
- Page 1132 and 1133: siento en ella la rabia ni la malic
- Page 1134 and 1135: estia a actuar, pero esta vacila fr
- Page 1136 and 1137: mujeres y niños. Los mogadorianos.
- Page 1138 and 1139: Caigo de bruces sobre el césped. A
- Page 1140 and 1141: ligeramente abiertos; cada respirac
- Page 1142 and 1143: oca. —Venir aquí, a Paradise, no
- Page 1144 and 1145: cañones, y sus sonidos y luces tra
- Page 1146 and 1147: propio ser empezara a desvanecerse.
- Page 1148 and 1149: ojos, está Sarah. Deja caer el cuc
- Page 1150 and 1151: los casos, trae una negrura impenet
- Page 1152 and 1153: prolonga con el alocado abandono de
- Page 1154 and 1155: digo. Unos ojos luminosos y amables
- Page 1156 and 1157: cae rodando por un lado de la cara.
- Page 1158 and 1159: —¿Dónde estamos? —pregunto.
- Page 1160 and 1161: de la cama y después me agacho par
- Page 1162 and 1163: fue difícil. Sólo teníamos como
- Page 1164 and 1165: la mano suavemente sobre su cabeza.
- Page 1166 and 1167: lo llevas? Ella asiente y contesta:
- Page 1168 and 1169: —Y el mío te pertenece a ti. Atr
- Page 1170 and 1171: pudiéramos; después, vinimos aqu
- Page 1172 and 1173: —¿Cómo te sientes? —me pregun
- Page 1174 and 1175: hubieran pegado ojo. Mark está det
- Page 1178 and 1179: tumbado el cadáver de Henri, encim
- Page 1180 and 1181: Pienso llevarte de vuelta. De algú
- Page 1182 and 1183: econforta saber que Henri todavía
- Page 1184 and 1185: Asiento, y Seis cierra la puerta. S
- Page 1186 and 1187: acerco a Mark y le estrecho tambié
- Page 1188 and 1189: se para y pone la primera. Mark y S
darme una paliza sin esfuerzo, te<br />
habría tratado un poco mejor desde <strong>el</strong><br />
primer día.<br />
Seis atraviesa la habitación y echa<br />
un vistazo a mis cosas encima de la<br />
mesa.<br />
—Deberíamos ir yéndonos —dice,<br />
y su expresión se suaviza con una<br />
mirada de tácita simpatía—. En<br />
realidad, sólo queda una cosa por<br />
hacer. No sabíamos que querrías<br />
hacer al respecto.<br />
Asiento. No me hace falta<br />
preguntar a qué se refiere. Miro a<br />
Sarah. Tendremos que separarnos<br />
mucho antes de lo que creía. El