1-Soy el numero Cuatro - Pittacus Lore
pequeño puñal. Veo el proyectil trazar un arco, dejando una ligera estela tras él, como el humo de un avión. La luz que emite lanza un hechizo que me impide apartar la vista. Un destello de luz brillante lo devora todo, y el mundo se desvanece en un vacío sin sonido. Sin paredes. Sin techo ni suelo. Sin ruidos. Muy lentamente, las cosas vuelven a cobrar forma, y los árboles se yerguen como antiguas esfinges que hablan en susurros de un mundo que existió alguna vez, en algún reino alternativo donde sólo moran las sombras. Levanto el brazo para tocar el
árbol más cercano, el único contacto gris en un mundo donde todo lo demás es blanco. Mi mano se desliza por su superficie, y por un momento el árbol resplandece como si fuera líquido. Tomo una profunda bocanada de aire. Al exhalarlo, el dolor regresa al corte de mi cabeza y a las heridas de los brazos y el tronco que me hice al escapar del incendio de la casa de los James. De algún lado me llega el sonido de agua goteando. Poco a poco, se define la figura del soldado, a cinco o diez metros. Es gigantesca. Nos tomamos la medida. El resplandor de su espada es mucho
- Page 998 and 999: pesada. —No nos queda más remedi
- Page 1000 and 1001: vacío. Bernie Kosar ya ha llegado
- Page 1002 and 1003: Lo levanta en el aire para volver a
- Page 1004 and 1005: prenda de ropa interior sucia. Mark
- Page 1006 and 1007: indicándome que no lo sabe. —Vay
- Page 1008 and 1009: como puedo. Las paredes y el suelo
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- Page 1016 and 1017: al rastreador más cercano hasta qu
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árbol más cercano, <strong>el</strong> único contacto<br />
gris en un mundo donde todo lo<br />
demás es blanco. Mi mano se desliza<br />
por su superficie, y por un momento<br />
<strong>el</strong> árbol resplandece como si fuera<br />
líquido. Tomo una profunda bocanada<br />
de aire. Al exhalarlo, <strong>el</strong> dolor regresa<br />
al corte de mi cabeza y a las heridas<br />
de los brazos y <strong>el</strong> tronco que me hice<br />
al escapar d<strong>el</strong> incendio de la casa de<br />
los James. De algún lado me llega <strong>el</strong><br />
sonido de agua goteando. Poco a<br />
poco, se define la figura d<strong>el</strong> soldado, a<br />
cinco o diez metros. Es gigantesca.<br />
Nos tomamos la medida. El<br />
resplandor de su espada es mucho