REVISTA CICPC

despacho, están conscientes de
las necesidades que enfrenta la
institución.
“Presentamos debilidades
que tienen que ver con una escasez
de personal, pero tenemos que
seguir trabajando para que esas
debilidades vayan disminuyendo
en un futuro inmediato. Por otro
lado, está la capacitación de ese
personal, tenemos que ir a la par
con el movimiento, no solo desde
el punto de vista técnico- científico
con las nuevas tendencias sino
también, evaluando y analizando
el comportamiento delictivo. En
la medida que vaya surgiendo
nuevas modalidades tenemos
que ir con un paso adelante,
buscando técnicas y mecanismos
para enfrentarlos, ese el otro
de los retos que nosotros como
institución tenemos que mantener
en el tiempo.
No podemos quedarnos
sentados, para eso es necesario
que mantengamos un proceso
de capacitación continuo, de
entrenamiento para que cada
día nuestros funcionarios tengan
los conocimientos, habilidades y
destrezas que le permitan enfrentar
ese fenómeno. Por su supuesto esa
capacitación debe ir de la mano
con el equipamiento y dotación
para el funcionario pueda cumplir
con sus funciones de la mejor
manera, sin dejar atrás que reciba
un sueldo digno, que tenga unas
condiciones socio económicas que
le permitan prestar su trabajo con
honestidad, que se sienta orgulloso
de pertenecer a la institución y no
lo vea como un simple oficio sino
como una forma de vida.
¿Qué hay cosas por hacer?
Sí, los procedimientos están allí y
además contamos con gente que
sale todos los días a dar lo mejor de
sí. Y esos son los funcionarios que
tenemos que observar, respaldar
y apoyar para que se conviertan
en ejemplos multiplicadores. Lo
demás, bueno, hay cosas para lo
que no se requiere dinero, sino
simplemente cambio de actitud,
creo en la voluntad y aptitud
positiva de la gente”.
La corrupción en tiempo de crisis
Acerca del tema de
corrupción refirió que crece o se
expande en tiempo de crisis, “se
justifica o más bien se utiliza este
elemento como una excusa para
incurrir en hechos delictivos, no
solo se habla del funcionario que
se vale del cargo para ejecutar
actos de corrupción, sino que
utiliza su figura o investidura para
cometer hechos delictivos y que
el primer rechazo que recibe es el
de la institución, eso siempre es
bueno decirlo.
El primer rechazo que
recibe es el de los funcionarios
honestos, aquellos que realmente
quieren a la institución, más allá del
que pueda recibir exteriormente
del ciudadano común. Ese es otro
de los temas que no debemos
descuidar, porque los procesos
han ido cambiando, al igual que
los tiempos, lo que motiva a
cualquier ciudadano a ingresar
a este organismo son variados,
lo que si tenemos claro es que a
pesar de las dificultades, carencias
y batallas que tenemos a diario,
aquí hay gente que quiere y está
dispuesta a dar la vida por la
institución.
Asegura que dentro de
la nueva generación, dada sus
acciones y su forma de actuar, le
brinda la esperanza para creer
que el Cicpc tiene más futuro que
pasado. “Por eso no podemos
desmayar en los procesos, es
una transición de una etapa a
otra, de un nombre a otro y eso
lleva implícito una cantidad de
elementos que si no llegamos al
detalle simplemente van a ser
debates sin fundamentos.
Los nuevos funcionarios
necesitan mucha orientación,
entender el contexto de lo que
sucede en el país, si no le hacemos
entender el rol protagónico que
tenemos en la sociedad y lo que
s i g n i fi ca s er u n f u n c i o n a ri o d el C
icpc, vamos a tener una gran
desventaja para mantenernos
incólume ante todos los fenómenos
que tenemos que enfrentar.
Lo más grave que
pudiéramos pensar que la
formación de un funcionario se
completa solo con su paso por
una academia. ¡No! hay una
formación de hogar que ya viene
trastocada en muchas ocasiones.
Lo digo con propiedad, yo recibí
allí desde el hijo de un ministro, de
un empresario hasta el hijo de una
persona en situación de calle por
decirles algo y aquí hizo carrera
gente que venía de los pueblos
más recónditos del país, de las
zonas más rurales.
El fondo de todo esto es que
debemos crear las bases sólidas
para que la institución se mantenga
firme, fortalecida y debe contar
con el respaldo gubernamental,
pero el mayor respaldo que debe
tener una institución dedicada a
combatir el fenómeno delictivo
es la credibilidad y confianza del
pueblo. El día que la sociedad
venezolana pierda la confianza
y fe del Cicpc hay que cerrar las
puertas, creo que esa ha sido
nuestra mayor fortaleza en el
tiempo.
Recalcó que sería
irresponsable si el tema de la
corrupción se trata desde un
solo enfoque. “es un problema
integral, multifactorial, esto es
consecuencia de una cantidad de
factores que han venido influyendo
de una manera muy negativa en
el comportamiento y desarrollo
profesional del funcionario, por
ejemplo, no nos preocupamos
por la forma de expresarse del
funcionario a cierto nivel, que
cuando pasaba de un nivel a otro,
dentro de un equipo de trabajo a
otro asumía que estaba en otro
rol, en otra posición”.
Puntualizó que lo
importante es mantener una
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