11.03.2019 Views

Diario Reflexivo. Brenda

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

En “Sexualizando la Trinidad: Aportes desde una teología de la liberación queer a la<br />

compresión del misterio divino” de Hugo Córdova Quero, se expresa la importancia del lenguaje<br />

en la construcción y reconstrucción de los conceptos tanto de expresión del ser humano, como de<br />

lo divino. El lenguaje puede comprenderse como el vehículo por el cual el heteropatriarcalismo,<br />

heterosexualismo y el colonialismo han construido y siguen construyendo simbolismos que<br />

mantienen su hegemonía.<br />

Comprender como la trinidad ha sido parte de esta hegemonía opresora, nos permite analizar de<br />

qué manera hemos concebido la imagen de Dios, como esto ha conllevado a justificar bajo la<br />

idea del dios blanco no solo la supremacía del hombre, sino del hombre blanco y heterosexual.<br />

Esta imagen de lo divino se ha naturalizado, comprendiéndola como el “verdadero” orden.<br />

Ante ello, trabajar bajo una trinidad queer nos puede brindar otras formas de interpretación más<br />

inclusivas, donde se reconozca el rol que posee el lenguaje en el proceso de colonización de los<br />

cuerpos. Al ser los cuerpos la geografía desde donde el colonialismo heterosexual ha mantenido<br />

cautiva la sexualidad, el cristianismo ha tenido partida al colocarlos en el espacio de lo<br />

prohibido.<br />

Discursos como estos, son mecanismos de control sobre las personas, como una forma de seguir<br />

manteniendo el control por medio de la culpa, que reprime los cuerpos; como lo es en su<br />

sexualidad, en su manera de vestir, de expresarse, de interactuar y de conocer su cuerpo. Desde<br />

niños y niñas los discursos religiosos nos han presentado el cuerpo como intocable, malo, sucio,<br />

pero a la vez como templo de Dios, como nos lo muestran en los diez mandamientos. Es a base<br />

del miedo a sentirnos culpables que escogemos el camino de la obediencia y disciplinamiento en<br />

nuestra forma de actuar y de pensar y es así como expreso que la obediencia lleva a la permisión<br />

de normas, y con ello a permitir que construyan nuestros cuerpos como si se tratara de un taller,<br />

en donde llegamos y nos los moldean, restringiendo y negando gran parte de nuestra sexualidad,<br />

gozo y placer.<br />

El cuerpo de la mujer, ha sido víctima de la constante culpa impuesta a sentir gozo, placer y<br />

alegría. La sexualidad femenina se ha visto envuelta entre títulos de pecado que niegan y anulan<br />

su libre expresión, el cuerpo se ha utilizado como el medio por el cual se concreta el pecado,

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!