Cosas del tango y del lunfardo - edUTecNe
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<strong>edUTecNe</strong><br />
COSAS DEL TANGO Y EL LUNFARDO- Eduardo Giorlandini<br />
Encomillé, en el párrafo precedente, la palabra ¨rock¨ porque existe una fuerte y fundada corriente<br />
de opinión en la Argentina, según la cual no existe el rock nacional y que lo que es así denominado<br />
poco tiene que ver con el rock, por su génesis y otras características, como el idioma (en cierto<br />
sector de la música), los temas y las circunstancias locales incorporadas a su significación artística<br />
y espiritual.<br />
No se trata, entonces, aquí, de establecer las diferencias entre el rock y el llamado ¨rock¨ nacional,<br />
sino de fijar el ámbito común entre este último y el <strong>tango</strong> argentino. El ámbito común no<br />
debe precisarse, en mi opinión, en cuestiones técnicas o instrumentales, por ejemplo, sino en la<br />
circunstancia de su formación, en las particularidades de las personas o actores, en el mensaje<br />
y en las motivaciones, en la trascendencia, en las consecuencias que su desarrollo generó en el<br />
seno de la sociedad, de los propios generadores <strong>del</strong> fenómeno y en la respuesta de los grupos de<br />
poder dominantes.<br />
Un cacho de historia<br />
Muchos siglos atrás, en el titulado ¨viejo mundo¨ (¿es el más viejo?), los artistas -especialmente<br />
músicos y poetas- aceptados por el príncipe o el emperador, podían enriquecerse con su arte,<br />
máxime si estaba destinado a la alabanza <strong>del</strong> poderoso. Eran los que trascendían, por su proximidad<br />
con el poder, pero otra cosa fue la música en la entraña <strong>del</strong> pueblo, la música popular, no<br />
siempre aceptada o tolerada por las leyes, la sociedad, las clases altas, aristocracias, oligarquías<br />
o elites intelectuales o <strong>del</strong> poder político, no pocas veces enlazado al económico.<br />
En cierto sentido y de un modo relativo por cierto, esto fue casi una constante, con variaciones y<br />
todo.<br />
¿Qué pasó en la Argentina?<br />
Poco antes <strong>del</strong> nacimiento de nuestra Patria se prohibieron las ¨casas de<br />
<strong>tango</strong>¨(comprobadamente, en un documento figura por error el vocablo ¨tambo¨), donde los negros<br />
concurrían para bailar, la compás de su música.<br />
Desde aquel entonces se sucedieron normas legales que permitían o prohibían, con limitaciones<br />
o restricciones de tiempo y lugar (por ejemplo, permiso para bailar en lugares cerrados solamente).<br />
El candombe está íntimamente ligado a esta historia, al <strong>tango</strong> milonga y antes a la milonga. Una<br />
nueva música se fue conformando hasta la aparición -no intempestiva- <strong>del</strong> <strong>tango</strong>, víctima de<br />
hostigamientos e intentos de prohibición o descalificación en los ámbitos a los que hice referencia<br />
líneas arriba. Esas especies musicales eran expresión popular, <strong>del</strong> pueblo humilde, <strong>del</strong> arrabal<br />
(que no es mala palabra y que designa a la periferia de la gran ciudad, en el mismo Código Civil<br />
de la República Argentina).<br />
Esto último fue representado con versos tangueros:<br />
¨Tango argentino,<br />
sos el hijo <strong>del</strong> suburbio<br />
y en jaranas o disturbios<br />
siempre supiste tallar¨.<br />
Algo nuevo había aparecido con la música de los negros, después con el <strong>tango</strong>, en nuestro escenario;<br />
se trató de una música nueva, joven, con autores jóvenes; una música rebelde, insolente<br />
y ruidosa, no solamente para los no acostumbrados a ella sino para los propios intérpretes, algunos<br />
de los que anunciaron en sus afiches: ¨El <strong>tango</strong>, con sus ruidos característicos¨ (documentos<br />
en archivos de Bahía Blanca, relacionados con actuaciones de grupos musicales porteños). Los<br />
oídos no estaban acostumbrados a los ¨ruidos¨ <strong>del</strong> <strong>tango</strong>. Destaco aquí que en la miniserie televisiva<br />
¨Tango¨, un personaje (interpretado por Luis Brandoni) le dice a los músicos españoles de<br />
<strong>tango</strong>, más o menos: ¨Toquen fuerte... el <strong>tango</strong> es macho¨. En realidad, en sus inicios, se tocaba<br />
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