11.08.2018 Views

Una Apuesta a la Vida N°277

Revista de Crecimiento Personal

Revista de Crecimiento Personal

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

En ese afecto que soñaba ver entre ellos,<br />

vivía esperando algún indicio.<br />

Era un momento de dolor y preocupación,<br />

ya que mi madre sufría por <strong>la</strong> fractura en su<br />

nariz, sin embargo para mí, fue de felicidad.<br />

¡Mi padre <strong>la</strong> había ido a buscar!<br />

¡Íbamos todos juntos en el auto!<br />

¡Veía <strong>la</strong> atención que le prodigaba!<br />

Recuerdo ir sentada atrás sonriendo, feliz,<br />

mirándolos…<br />

Como si en ese momento se me hubiera<br />

cumplido el tan anhe<strong>la</strong>do deseo.<br />

¿Todos los niños prestarán atención a esto?<br />

¿Habría alguna razón desconocida que me<br />

hacía desear tanto <strong>la</strong>s expresiones de afecto<br />

entre ellos?<br />

<strong>Una</strong> so<strong>la</strong> vez salimos juntos al cine y me<br />

hicieron sentar en el medio. Estuve años pidiéndole<br />

a mi padre… pero fue esa vez y nunca<br />

más.<br />

Ya adulta, le pregunté a mi madre por qué<br />

ellos no expresaban afecto como el resto<br />

de <strong>la</strong>s parejas. Me dio su explicación. Sólo<br />

había sucedido durante el primer año de<br />

matrimonio.<br />

Sin embargo el tiempo, en su generosidad,<br />

me dio respuestas en el momento más<br />

inesperado.<br />

Mi madre había enfermado y permaneció<br />

mucho tiempo internada.<br />

Ellos compartían el mismo techo pero estaban<br />

separados.<br />

¡Todas <strong>la</strong>s noches él <strong>la</strong> iba a ver!<br />

Mamá, no sé si por los medicamentos era<br />

como una niña, deseando ser mimada, recibiendo<br />

todas <strong>la</strong>s atenciones que le brindábamos<br />

los que estábamos junto a el<strong>la</strong>.<br />

Extrañamente se mostraba muy amorosa.<br />

Cierta noche, al irse, mi padre se acercó a<br />

tapar<strong>la</strong>.<br />

¡Quedé perpleja!<br />

Y pude ver cómo ante esa actitud de el<strong>la</strong>,<br />

receptiva al afecto, se inclinó para besar<strong>la</strong>.<br />

Creo que de pronto se dio cuenta y reprimió<br />

su impulso.<br />

Después de irse quedé reflexionando sobre<br />

este hecho.<br />

¿Habría sentido “amor”?<br />

Con el tiempo lo entendí con más<br />

profundidad.<br />

El afecto siempre estuvo, tapado por<br />

<strong>la</strong>s personalidades de ambos que los<br />

distanciaban.<br />

En esa situación el “ego” de ambos no estaba<br />

presente, sólo el “ser”, y desde ese lugar<br />

no había dudas de que se querían.<br />

Cuando mi padre estaba por partir, casi inconsciente,<br />

supe que mi madre fue a los pies<br />

de su cama y le habló. Le dijo que lo perdonaba<br />

y que se fuera tranquilo.<br />

Al otro día él dejó este p<strong>la</strong>no de existencia.<br />

Un gran acto de “amor” de mi madre, de<br />

sanación para ambos y de ejemplo para mí.<br />

Silvia Rodríguez Borges<br />

10<br />

AGOSTO 2018 - AÑO 24 - Nº 277

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!