Inversion 20180527

4 Página SIETE Domingo 27 de mayo de 2018
i nve rs i ó n @ p a g i n a s i e te . b o
I nve r s i ó n
E m p re n d e d o re s
Inversión / La Paz
“
Quería probar los cuñapés
con el mismo sabor que los
de mi casa”, dice Fernando
Mirabal, socio fundador de la cafetería
Los Qñapes, local ubicado en
San Miguel y que a mediados de
abril cumplió dos años de funcionamiento
y, para deleite de sus seguidores,
el viernes atendió a su
cliente número 100 mil.
El deseo de Mirabal, que ya ha
satisfecho el paladar de miles de
visitantes paceños, del interior y
del exterior de Bolivia, se hizo
realidad cuando un amigo le dio
un consejo. “Tomaba un café en
una cafetería de la ciudad y le lancé
la pregunta; él me respondió
que eso ocurría porque el cuñapé
de casa tenía una cualidad: era
servido en un punto caliente”.
El “punto caliente” es una corriente
de la gastronomía que
busca ofrecer alimentos “del horno
al plato, de la freidora al plato”,
explica Ruth Pozzo, esposa de
Mirabal y socia propietaria de la
cafetería.
En el caso de los cuñapés, y los
otros alimentos de origen “cam-
ba”que es posible disfrutar en L os
Qñapés, todas las preparaciones
son elaboradas el día de la venta e
ingresan a los hornos o a las freidoras
cuando las pide un cliente.
“En Los Qñapés también ofrecemos
el servicio slow food, que es lo
contrario del fast food”, dice Pozzo
y Mirabal añade: “La idea es que
los clientes se sienten, disfruten
de una buena charla y consuman
sus masitas recién horneadas, no
han venido a comer a contrarreloj”,
con un pie en la calle.
Debido a esto, las clientes, en su
mayoría mujeres adultas, tienen
en la cafetería un punto de reunión
para compartir entre amigas
o familiares, jugar pasanaku o disfrutar
de la decoración del lugar,
cuyas paredes son una suerte de
galería de arte. “Unos 10 o 15 artistas
han colgado sus obras, ellos
venden sus cuadros, negocian los
precios con los compradores y
tienen un espacio para mostrar su
ar te”, aclara Pozzo.
Por si fuera poco, la propuesta
atiende a un público ignorado por
la mayoría de los locales: el menú
es apto para celiacos. “Llegamos a
este tema por casualidad, varios
clientes nos preguntaban si teníamos
estos productos porque son
celiacos, es decir son alérgicos al
glutén (proteína de algunos granos)
y las masas orientales son así.
Solo tenemos empanadas fritas
con masa de harina de trigo y para
ello, tenemos otra freidora, otros
utensilios y evitamos la contamin
a c i ó n”, asegura Pozzo.
De esta manera, la duda de Mirabal
encontró respuesta, el té
camba de su casa ahora satisface
sus exigencias y las de otras personas.
“Hemos tenido elogios;
una vez vino un cruceño muy famoso
y dijo que nuestros cuñapés
-el producto estrella de la cafetería-
son mejores que los que co-
La dupla M i ra b a l -
Pozzo y el nuevo o cu-
ñapé con chocolatc
hocolate.
La cafetería sureña Los Qñapés está de fiesta desde abril
100 mil clientes y dos años
con la “Experiencia Q”
l P RO P U E STA El local, especializado en repostería oriental boliviana, también
es parte de la corriente de comida fresca, orgánica, natural y libre de gluten.
Punto de encuentro y galería de arte.
¿ Así... o más tentador? Huminta, pan de arroz y cuñapés.
mió en su tierra porque sintió el
sabor de su hogar”, dice Pozzo.
Dadas las características de este
local, su oferta ha sido incluida
entre los locales recomendados
en guías turísticas
Decisiones y sabores
Estos dos años de experiencia,
en Los Qñapés, los propietarios han
tenido que aprender varios secretos
de la gastronomía y la administración
del área, que antes ni
siquiera sabían que existían.
“Mi mamá y toda su familia es
de origen cruceño, mi papá era
potosino. Desde muy niña yo conocí
la costumbre del té camba y,
cuando me casé con Fernando, mi
casa se convirtió en el centro de
reunión. A él le gustaba mucho y
siempre pensó que era una buena
opción para una inversión propia”,
recuerda Pozzo.
Y Mirabal responde: “S i e m p re
pensé que debía ser mi propio jefe,
eso es lo mejor. Así que después
de hacer un estudio de mercado
me di cuenta que había un
público desatendido (las mujeres
adultas) e invertí mis ahor
ro s ”.
Esta decisión ha sido positiva
para la vida de la pareja, aunque
Pozzo reconoce que aún extraña
Fotos: Sara Aliaga / Página Siete
parte de su vida anterior como
una popular presentadora de televisión.
“No ha sido fácil dejar todo lo
que conocía por algo nuevo, el primer
año yo estaba a medio tiempo
en la cafetería. Pero debía tomar
una decisión y me siento contenta
de estar aquí”, sonríe decidida la
socia quien, al inicio del proyecto,
era la encargada de preparar todas
las masitas que aprendió de
su mamá. Ahora, la empresa tiene
más de una decena de funcionarios
y, entre ellos, varios jóvenes
profesionales de la gastronomía.
La oferta de L os Qñapés tiene algunas
innovaciones para satisfa -
cer el gusto de los clientes paceños.
Por ejemplo, humintas con
un toque de ají amarillo, “p a ra
mi mamá son c o ll a d a s , pero a la
gente le gusta”, dice Pozzo.
En las próximas semanas, el
menú tendrá nuevas alternativas
creativas, entre ellas un cuñapé
relleno con trozos de chocolate,
otra collada , sonríen los propietarios.
Sin duda, las novedades no
faltarán, pero quienes deseen
sentir el sabor de los hogares cambas,
llegaron al punto indicado,
un sitio que propone a sus comensales
vivir una Experiencia Q.