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Richard Cohen - Comprender y sanar la homosexualidad

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profundiza cada vez que se ven. Joseph le ha pedido a su madre que durante un tiempo se retire un poco<br />

para permitir esa profundización entre él y su padre.<br />

Durante <strong>la</strong> sesión en <strong>la</strong> que toda <strong>la</strong> familia se abrazó, también tuvo lugar otro acontecimiento<br />

sorprendente. Joseph fue capaz de pedir perdón a su hermano pequeño por <strong>la</strong> forma abusiva en <strong>la</strong> que le<br />

había tratado motivado por los fuertes celos que sentía hacia él. Su hermano también liberó su dolor y<br />

expresó todo lo que había sufrido por eso. Se abrazaron, doliéndose juntos y recuperando <strong>la</strong> unión entre sus<br />

corazones. Por último, el hermano pequeño compartió con sus padres el dolor que le habían provocado con<br />

sus peleas entre ellos. TODA LA FAMILIA SE ABRAZÓ, TODOS LLORARON, LIBERANDO ASÍ AÑOS DE<br />

DOLOR SILENCIADO.<br />

Para esta familia fue un NUEVO COMIENZO. Hoy, Joseph está cada vez más enamorado de su mujer.<br />

Tienen una buena vida sexual, sus deseos por los hombres han desaparecido y están esperando su primer<br />

hijo.<br />

CAPÍTULO 10<br />

EL TACTO: LA NECESIDAD DE VÍNCULOS Y DE APEGO<br />

“La impersonalidad de <strong>la</strong> vida en el mundo occidental ha llegado a tal punto que hemos<br />

producido una raza de intocables. Nos hemos convertido en EXTRAÑOS LOS UNOS PARA LOS<br />

OTROS, no sólo al evitar sino al prevenir cualquier forma de contacto físico innecesario. Somos<br />

FIGURAS SIN ROSTRO en un paisaje atestado de gente: SOLITARIOS y a <strong>la</strong> vez CON MIEDO A LA<br />

INTIMIDAD. En <strong>la</strong> medida en que es así, todos nosotros nos hemos rebajado. Debido a esa<br />

incapacidad de tocarnos hemos fracasado en <strong>la</strong> creación de una sociedad en <strong>la</strong> que <strong>la</strong> gente se toque<br />

en más sentidos que en el físico.<br />

Con nuestras personalidades faltas, y asumiendo <strong>la</strong> imagen que los demás tienen de cómo<br />

deberíamos ser, no es sorprendente que estemos INSEGUROS ACERCA DE QUIÉNES SOMOS EN<br />

REALIDAD. Portamos una PERSONALIDAD FALSA que se nos ha impuesto como un TRAJE<br />

INCÓMODO y que no es de nuestra tal<strong>la</strong>; a veces nos sentimos TRISTES y NO COMPRENDEMOS y<br />

nos preguntamos cómo hemos llegado a este punto. Como dice Willy Loman en La muerte de un<br />

viajante, “Sigo sintiendo que todo es provisional”.” 132<br />

Ashley Montagu<br />

1. EL PODER CURATIVO DEL TACTO<br />

La comprensión del alcance del sentido del tacto es fundamental para entender el funcionamiento de<br />

<strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción con el mentor como método terapéutico. EL TACTO ENCIERRA EL MAYOR PODER CURATIVO<br />

DEL MUNDO. La cuestión del tacto resulta muy incómoda para <strong>la</strong> mayoría de <strong>la</strong> gente. Como terapeuta,<br />

marido y padre, practico y aliento el TACTO SALUDABLE.<br />

El tacto es un componente necesario del proceso de curación. Como me solía decir un terapeuta:<br />

“Primero quita <strong>la</strong>s ma<strong>la</strong>s hierbas y después p<strong>la</strong>nta <strong>la</strong>s semil<strong>la</strong>s”. Primero hay que quitar todas <strong>la</strong>s cosas<br />

ma<strong>la</strong>s y después reemp<strong>la</strong>zar<strong>la</strong>s con buenas. Las “cosas ma<strong>la</strong>s” son <strong>la</strong>s HERIDAS HOMO EMOCIONALES y<br />

HETERO EMOCIONALES. Las “cosas buenas” pueden consistir fácilmente en el tacto y el roce saludables y<br />

132<br />

A. MONTAGU, Touching: The human significance of the skin (Nueva York, Harper and Row, 1986), XIV.<br />

114

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