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Iberia Magazine Nº 13 Edición

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El kétchup de tomate<br />

El uso del tomate para crear el kétchup fue<br />

una innovación norteamericana, y la primera vez<br />

que fue publicada una receta con este vegetal<br />

fue en 1812, por James Mease. Luego en 1850 se<br />

embotelló la primera botella de kétchup para la<br />

venta. La industria creció gracias a que para ese<br />

entonces mucha gente temía comer tomates<br />

crudos, debido a que se les consideraba venenosos.<br />

A medida que el tiempo pasaba, el kétchup<br />

de tomate fue adquiriendo importancia, volviéndose<br />

popular dentro de la cocina estadounidense.<br />

Y fue en 1876 cuando Henry John Heinz<br />

lanzo al mercado su propia versión del kétchup,<br />

bajo el slogan de: “Bendito alivio para las madres<br />

y otras mujeres dentro del hogar”, en alusión al tedioso<br />

procedimiento para hacerlo de forma casera.<br />

Heinz se ganaba la vida vendiendo rábanos<br />

en conserva con la novedad del envasado: lo<br />

hacía en tarros de cristal, una auténtica sofisticación<br />

para la época. Poco a poco este producto<br />

fue tomando una difusión gigantesca en todo el<br />

continente, aunque no todo fue de color de rosa<br />

como te comentaremos más adelante. Curioso<br />

¿no? pues aún hay más, sigue leyendo.

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