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A sangre fría - Truman Capote

A sangre fría (título original en inglés: In Cold Blood) es una novela del periodista y escritor estadounidense Truman Capote. Fue comenzada en 1959 y finalmente publicada en 1966. Para hallar la documentación necesaria para el libro el autor realizó un exhaustivo trabajo de campo. A sangre fría explica cómo una familia de un pueblo rural de Estados Unidos es asesinada sin ningún sentido y cómo los asesinos son capturados y sentenciados a pena de muerte. En la novela se quieren mostrar las dos caras del sistema judicial, la humanidad que está detrás de un crimen y, especialmente, el motivo de este.

A sangre fría (título original en inglés: In Cold Blood) es una novela del periodista y escritor estadounidense Truman Capote. Fue comenzada en 1959 y finalmente publicada en 1966. Para hallar la documentación necesaria para el libro el autor realizó un exhaustivo trabajo de campo. A sangre fría explica cómo una familia de un pueblo rural de Estados Unidos es asesinada sin ningún sentido y cómo los asesinos son capturados y sentenciados a pena de muerte. En la novela se quieren mostrar las dos caras del sistema judicial, la humanidad que está detrás de un crimen y, especialmente, el motivo de este.

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espeto alguno por las personas incapaces de controlar sus tendencias sexuales»,<br />

especialmente cuando la falta de control atañe lo que él llamaba «perversión», «molestar a<br />

críos», «asuntos de maricas», violación. Y creía que Dick conocía de sobra sus puntos de<br />

vista. Es más, ¿no habían llegado casi a las manos cuando, muy recientemente, él impidió que<br />

Dick violara a una aterrada muchacha? Pero de todos modos, aunque no tenía inconveniente<br />

en repetir la hazaña, le alivió ver que la niña se alejaba de Dick.<br />

Flotaban villancicos en el aire. Procedían de la radio de las cuatro mujeres y se fundían<br />

extrañamente con el sol de Miami y los gritos de las quejumbrosas gaviotas, nunca<br />

completamente silenciosas. Venite adoremus, venite adoremus, el coro de una catedral, una<br />

música exaltada que conmovió a Perry hasta saltarle las lágrimas, lágrimas que no cesaron ni<br />

aun acabada la música. Y como le ocurría con frecuencia cuando se encontraba en semejante<br />

estado de congoja, empezó a darle vueltas por la cabeza aquella idea que ejercía sobre él una<br />

«fascinación tremenda»: el suicidio. De niño había pensado con mucha frecuencia en<br />

suicidarse, pero entonces no se trataba más que de fantasías sentimentales, nacidas del deseo<br />

de castigar de su padre, a su madre y a otros enemigos más. Sin embargo, desde que se hizo<br />

hombre, la perspectiva de quitarse la vida fue perdiendo aquella naturaleza fantasiosa. No<br />

podía olvidar que aquélla había sido la solución de Jimmy, y la de Fern también y<br />

últimamente, había comenzado a considerarla no sólo una alternativa posible, sino como la<br />

clase de muerte que le esperaba.<br />

No lograba ver que le quedaran ya «muchas cosas por las que valiera la pena vivir».<br />

Cálidas islas, oro enterrado, inmersiones en mares de fogoso azul tras tesoros enterrados, esos<br />

sueños ya no existían. Tampoco existía Perry O'Parsons, el nombre inventado para quien sería<br />

sensacional revelación de la escena y la pantalla que más o menos seriamente pretendía<br />

realizar. Perry O'Parsons había muerto sin ni siquiera haber conocido la vida. ¿Qué otras<br />

aspiraciones podían quedarle? El y Dick estaban «corriendo una carrera sin fin», así lo veía él.<br />

Ahora, cuando todavía no hacía una semana que estaban en Miami la marcha sin tregua iba a<br />

recomenzar. Dick, que había trabajado un día en la estación de servicio ABC a sesenta y cinco<br />

centavos la hora, había dicho:<br />

-Miami es peor que México. ¡A sesenta y cinco! No es para mí. Yo soy un blanco.<br />

Así que, al día siguiente, con sólo los veintisiete dólares que les quedaban de los<br />

obtenidos en Kansas City, se dirigirían otra vez hacia el oeste, a Texas, a Nevada, a ningún<br />

sitio en concreto.<br />

Dick, que había chapoteado en la marejada, volvió a su lado. Se dejó caer, mojado y sin<br />

aliento, boca abajo sobre la pegajosa arena.<br />

-¿Cómo estaba el agua?<br />

-Maravillosa.<br />

La proximidad entre Navidad y el cumpleaños de Nancy, que era inmediatamente<br />

después de Año Nuevo, siempre le había creado problemas a su novio Bobby Rupp.<br />

Necesitaba buen esfuerzo de imaginación para pensar en dos regalos apropiados en tan rápida<br />

sucesión. Pero cada año, con el dinero que había ganado en verano trabajando en la hacienda<br />

de remolacha azucarera de su padre, hacía todo lo posible, y el día de Navidad por la mañana,<br />

siempre se había presentado en la de los Clutter con un paquete que sus hermanas le habían<br />

ayudado a hacer y que esperaba sería una sorpresa deliciosa para Nancy. El año anterior le<br />

había regalado un pequeño medallón de oro en forma de corazón. Este año, con la<br />

anticipación de costumbre, estuvo dudando entre los perfumes de importación que vendían en<br />

Norris y un par de botas de montar. Pero Nancy había muerto.<br />

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