ONELIFE #35 – Spanish

AL VOLANTE CON…
La naturaleza salvaje y la belleza deslumbrante del Círculo Polar Ártico sueco dejan al visitante sin aliento
en más de un sentido. Aquí es donde Jaguar Land Rover lleva a cabo sus pruebas en condiciones de frío
extremo. Y también donde los amantes del motor pueden vivir una experiencia al volante inolvidable.
TEXTOS P A U L E N T W I S T L E
Arjeplog es una población de 1.800 habitantes a
orillas del lago Hornavan que, años ha, vivió un cierto
esplendor gracias a la industria minera, tal como
atestiguan los nombres de las calles y, sobre todo, el
hotel Silverhatten, que se eleva sobre esta pequeña
localidad con una singular iglesia que data de 1642.
Con un solitario cine y un sinfín de gasolineras,
Arjeplog tiene unas vistas dignas de la película épica
más espectacular. La desaparición de la industria minera
podría haber significado la muerte de esta región,
donde las infraestructuras dejan mucho que desear, de
no haber sido por un recurso extremadamente útil que
nunca escasea por estos lares: el frío glacial.
A lo largo del duro invierno, esta población silenciosa
y bucólica se llena de vida con la llegada de los
especialistas en calibrado de vehículos, que acuden en
busca de sus temperaturas bajo cero. Los enormes
circuitos trazados sobre el lago helado resultan ideales
para probar los nuevos modelos, lejos de los periodistas
que intentan descubrir los protagonistas de los futuros
salones de automóviles.
En este lugar, los expertos de la Ice Academy de
Jaguar Land Rover le enseñarán a dominar algunos de
los vehículos más sofisticados y potentes del mundo.
Durante décadas, la industria del automóvil acudió
en masivas peregrinaciones anuales a Kiruna, en el
Círculo Polar Ártico, hasta que en 1973 unos ingenieros
descubrieron una lengua de tierra en el helado lago
Hornavan y llegaron a la conclusión de que Arjeplog era
el lugar ideal para las pruebas. Otros fabricantes siguieron
sus pasos y la ciudad abrió de par en par sus puertas
a los equipos de ingenieros, que pueden pasar hasta
seis meses al año trabajando en la región.
Durante los días y las noches de invierno, es más
probable toparse en la carretera con un prototipo camuflado
que con un lugareño, lo que tal vez explica por qué
los lapones protegen tanto a sus “invitados invernales”.
Los turistas al uso raramente se aventuran tan al
norte de Estocolmo y en ningún caso durante el invierno.
Sin embargo, ahí está precisamente el encanto de la
zona. La Ice Academy de Jaguar Land Rover no solo
saca al descubierto las virtudes dinámicas de los
Land Rover en uno de los entornos más duros del planeta,
sino que además permite asomarse a la cautivadora
belleza de los parajes naturales del Ártico.
Únase a nuestro equipo sobre el hielo y disfrute
de una experiencia irresistible al volante y de la mejor
hospitalidad en uno de los lugares más extremos y,
a la vez, más hermosos del mundo.
LÁNCESE AL HIELO para disfrutar de la experiencia de su vida sobre
ruedas. Más información en landrover.com/experiencesweden
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