IndustriaDelEstac_2017_05

¿Cuál es el efecto más significativo
de los vehículos autónomos sobre
la industria del estacionamiento,
según su perspectiva?
La necesidad autónoma de contar con un panorama donde se pueda
decir “ve a estacionar mi vehículo” y “ve a recoger mi vehículo” y
un enfoque de los estacionamientos en aprovechar a los socios para
aumentar la demanda y optimizar el rendimiento.
—Todd Tucker, ParkWhiz
Si tuviera que elegir solo uno, diría que, en el largo plazo, posiblemente
de aquí a diez años o más, a medida que los vehículos sin conductor
de nivel cuatro (taxis, ya sean en viajes compartidos o no) sean más
capaces de negociar la mayor parte de la infraestructura vial, la
enorme cantidad de estacionamientos que actualmente tenemos
en torno a los centros comerciales y tiendas (al menos en las áreas
suburbanas de la mayor parte de las ciudades del Oeste medio y Oeste
de los EE. UU.) no será tan necesaria. En la actualidad, parece que
construimos estacionamientos para una demanda del percentil 99,
generando mucha superficie que queda sin utilizar la mayor parte
del tiempo. Las flotas de nivel cuatro sin conductor quizás puedan
estacionar de manera más eficiente en diferentes configuraciones,
quizás de modo más parecido a como se administran actualmente las
instalaciones de alquiler de vehículos (uno pegado al otro), debido a
que no es necesario tener disponibilidad para vehículos particulares
en el medio del estacionamiento. Los SUV, los vehículos pequeños,
los camiones, etc. podrían estacionarse en carriles separados, y el
siguiente vehículo de un determinado tipo podría despacharse al
usuario desde el primer lugar de la fila. Los vehículos de conducción
autónoma de nivel 3 (particulares) seguirán necesitando instalaciones
de estacionamiento tradicional, ya que los propietarios necesitarán
tener acceso a sus propios vehículos en todo momento. Quizás el
estacionamiento de autos de conducción autónoma pueda ocultarse
detrás de la tienda o centro comercial, o ubicarse en otro lugar (tal vez
en un lugar alejado), y dejar solo una pequeña cantidad de vehículos
disponibles en un origen o destino en particular en todo momento,
de modo que se requiera nada más una fracción de la superficie de
estacionamiento que usamos hoy en día.
—Doug Gettman, Kimley-Horn
Creo que la conducción autónoma podría avanzar en una de dos
direcciones (con una posible combinación). En uno de los posibles
escenarios, todos continuaremos teniendo autos, pero, debido a la
comodidad, dejaremos de usar el sistema de transporte. Si bien se
espera que los autos de conducción autónoma sean usuarios más
eficientes de las autopistas, no he visto ningún dato relacionado con
las calles urbanas. Temo que las zonas céntricas de nuestras ciudades
se vuelvan muy congestionadas. En el peor escenario posible, las
personas como yo, que viven cerca de un área céntrica densa, iremos
a trabajar en nuestro auto de conducción autónoma, lo enviaremos
a casa y haremos que regrese al final del día para evitar pagar por
el estacionamiento. Hoy en día, el costo de estacionar me alienta a
ir a trabajar en autobús o en bicicleta. Si pudiera enviar mi auto a
casa, no debería preocuparme por el costo de estacionar, y el costo
adicional de operación del vehículo sería mínimo.
En otra visión, más optimista, los autos de conducción autónoma
serán principalmente compartidos. Las personas que viajen
diariamente a sus trabajos en áreas urbanas densas podrían usarlos
para acceder a un medio de transporte de alta calidad, y otras pueden
usarlos para hacer viajes compartidos en vehículos que lleven tres o
más personas con ellos. En este escenario, la congestión disminuiría,
los peatones y ciclistas se sentirían más seguros, y se les podría ceder
cierta prioridad de paso. Al hacer que sea más cómodo andar a pie
y en bicicleta, podríamos crear un círculo virtuoso en el que más
personas caminen y anden en bicicleta. Las personas tendrían muchas
buenas opciones de transporte, y el uso de los autos se reduciría. Los
vehículos de conducción autónoma también reducirían el costo de
operar un sistema de transporte, lo que permitiría prestar un servicio
más frecuente y disminuiría aún más la necesidad de viajar en un
vehículo privado.
—Matthew Kaufman, UrbanTrans
Cambiará el paradigma del estacionamiento, que es algo que
actualmente se espera o desea al finalizar cada viaje. Eso incluye
un codiciado espacio cerca del lugar de trabajo o del hogar de
quienes viajan diariamente al trabajo, o un espacio temporario en
una tienda, comercio o destino comercial, ninguno de los cuales
seguirá siendo necesario.
El cambio ocurrirá sin importar cómo se logra la autonomía total,
ya sea mediante un modelo de viajes compartidos o, como algunos
han denominado, el “escenario de pesadilla” medioambiental,
un enjambre de vehículos privados totalmente autónomos que
prestan servicio a un único propietario. En cualquier caso, los autos
dejarán a las personas y se dirigirán a recoger a otras personas
o hacer otros recados para su propietario, manteniéndose en
movimiento sin necesidad de estacionar en las congestionadas áreas
céntricas urbanas.
Los vehículos estacionarán en algún momento, aunque
sea durante las horas muertas, para recargarse o para realizar
el mantenimiento previsto, pero en áreas determinadas por el uso
de los vehículos (un escenario más conducente a una ruta predictiva
durante el día) o a una base central para una flota de vehículos
compartidos.
El cambio de paradigma para los operadores de estacionamientos
implica que se necesitarán menos espacios, tal vez ninguno, en las
áreas céntricas urbanas. De la misma manera, los agentes inmobiliarios
quizás encuentren que los garajes particulares se reconviertan, en el
mejor de los casos, o se vuelvan superfluos, en el peor.
La oportunidad para los operadores de estacionamientos es que
sus estructuras también pueden reconvertirse o demolerse y volverse
a utilizar como otro tipo de propiedad o como espacios verdes. El
desafío para los operadores es retener el estacionamiento como
franquicia si surgen grandes flotas privadas como modelo dominante
de propiedad de automóviles.
—Robin Washington
El efecto más importante será separar al conductor del auto
estacionado. Eso elimina la necesidad de contar con un estacionamiento
exclusivo en el destino. El resultado es revolucionario, ya que brinda
flexibilidad sobre la ubicación del estacionamiento, aumenta la
eficiencia de las instalaciones de estacionamiento (a través de
las eficiencias de diseño y el estacionamiento compartido) y, en
última instancia, reduce ampliamente la cantidad de espacios de
estacionamiento requeridos (con los vehículos compartidos).
—Will Baungardner, ARUP
La habilidad de acelerar el lanzamiento y la adopción de la movilidad
como servicio (Mobility as a Service, MaaS) por parte del público.
Los vehículos de conducción autónoma no cambiarán el mundo de la
noche a la mañana, pero su introducción les permitirá a las personas
ver cómo pueden usarlos para mejorar y satisfacer sus necesidades
de transporte. Esto, a su vez, comenzará a cambiar la manera en
que las personas ven y usan las instalaciones de estacionamiento,
e iniciará la evolución hacia centros de transporte en los que las
personas puedan estacionar o cambiar los modos de transporte (es
decir, compartir bicicletas, automóviles o viajes, o adoptar medios
de transporte masivos).
—Mike Drow
24 INTERNATIONAL PARKING INSTITUTE | PRIMAVERA DE 2017